& aquí estaba yo frente al espejo vestida completamente de blanco, maquillaje perfecto, y un peinado natural cubierto de un velo semitransparente, Hoy era el dia, nuestro dia.
-puedo pasar?- se escucho la voz de Niall detrás de la puerta.- estas hermosa- dijo al verme.- dentro de unos minutos nos iremos de aquí, estas nerviosa?
-bastante- suspire, los nervios me carcomían viva.
-tranquila, y recuerda que afuera de la iglesia habran cámaras, fans y todo eso; no te vayas a asustar- me advirtió. Solo asentí. La fuerte vibración de mi teléfono me saco de mis pensamientos, tome el teléfono, era Harry.
*Llamada Telefonica*
-Hola- salude sin poder dejar de sentir nervios.
-estas nerviosa?-rio Harry atravez de la línea.
-tu no?- lo rete. Niall me observaba con cada paso que daba.
-bastante, pero sabes que me calma?- me pregunto.
-no lo se, dime
-pensar en lo mucho que te amo-. seguramente si mi corazón estuviera conectado a uno de esos aparatos que hacen “bip”, este hubiera sonado descontroladamente.
-estas listo?- pregunte sabiendo que ya era hora.
-si, te veo en unos minutos- me aviso.
-sere la de blanco- bromeee.
-y yo el de risos- dijo antes de terminar la llamada.
*Fin de la llamada telefónica*.
-debemos de irnos- aviso Niall tomando las llaves del auto y me ayudo a subir en la parte de atrás de este. Después de diez exactos minutos estábamos frente a la iglesia, Niall bajo del auto y dio la vuelta para tomarme de la mano después de abrirme la puerta.
Cámaras, cientos de flash, personas gritando, llorando, otras preguntándome cosas que no entendía.
-todo estará bien- susurro mi angel en mi odio, asentí y terminamos de subir las gradas para poder entrar a la iglesia, dos hombres que se encargaban de abrir las puertas avisaron por comunicadores que la música debía de empezar, y suspire al mismo momento en que las puertas se abrían y le daban permiso a mi vista para poder ver a aquel hombre vestido formalmente, aquel hombre que tanto amaba, aquel hombre llamado Harry Styles.
El camino junto a niall parecía eterno, hasta que por fin llegue a donde se encontraba a Harry, Niall me dejo en sus manos y la ceremonia empezó. Harry jugueteaba con nuestras manos o intercambiábamos miradas divertidas hasta que llego ese mometo.
-Harry Edward Styles Cox prometes serle fiel, amar, y respetar a Rossalie _____ Hunt en la salud, y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, todos los días de tu vida, hasta que la muerte los separe? – dijo el sacerdote.
-acepto- dijo mirándome a los ojos con una sonrisa en su rostro. Era mi turno.
-y tu Rossalie ______ Hunt prometes serle fiel, amar….-. entonces fue en ese momento en el que lo mire a los ojos y todos los que estaban a nuestro alrededor desaparecieron para mi, solo eramos el y yo, nadie mas. Fue en ese momento en el que me di cuenta que no había nada que amara mas en la tierra, fue hasta allí en que supe que estaba mas que enamorada. “te amo”- dije solo moviendo mis labios y sin dejar de verlo. “también te amo”- me dijo de la misma manera sin ningún sonido.- …hasta que la muerte los separe?- pregunto el sacerdote haciéndome volver.
-acepto- sonreí.
-por el poder que Dios me confiere hoy los…
-esperen!- grito alguien hasta el fondo, todos volteamos a ver sosprendidos. Era una mujer de mi edad, cabello negro hasta los hombros, y notoriamente con un embarazo de tres meses aproximadamente.
-Jennifer…- susurro Harry y mi corazón de partió en dos.
-quien es ella- pregunte sin dejar de verla.
-Edward- susurro la mujer llamándolo por su segundo nombre.- tu si eres el padre- solloso.
-Que?- dijimos El y yo al unisonido.