La condena anticipada - Angeles de la muerte (CA libro 1) ¡¡TERMINADA!!

De nuevo ese sonido.

Dirijo la mirada hacia el balcón y simplemente extiendo la mano derecha, mientras coloco la mano izquierda hacia atrás, adquiriendo la posición de un arquero, cierro los ojos y me concentro en lo que debo de hacer...

"Envía esta alma a su lugar de descanso"

Repito con tono bajo este mantra, sé que el color de mis ojos se ha vuelto de un violeta intenso, lo puedo sentir en todo mi cuerpo y cuando abro nuevamente los ojos observo como se comienza a materializar un arco entre mi mano.

Jalo con más fuerza mis hombros hasta que mi brazo queda perfectamente alineado con el arco y el hilo que tomo entre mis dedos queda forzado, cuando esta queda cerca de la comisura de mis labios exhalo lentamente.

Mientras lo hago, siento como la pesadez de mi pecho desaparece, y lentamente forma una flecha del mismo color de aquel hilo que acababa de romper.

Ha llegado la hora... frente a mi comienza a aparecer aquel símbolo que he observado varias veces: un circulo que contiene dentro una estrella de ocho picos, en las cuales están representadas las fases lunares y en algunos otros picos se pueden observar algunos símbolos que representan al sol, pero estos no eran similares al eclipse solar, se podía ver la representación de un sol en extinción, dentro de este se encontraba una estrella de seis picos que parecía proteger en su interior una pequeña triada.

Observo detenidamente este símbolo que es muy conocido entre los shinigamis llamado Xijiolum el transportador de almas, antes de liberar la flecha de mis dedos, se perfectamente que no fallare y antes de que la flecha pueda tocar este extraño símbolo, se desvanece en el aire... pero se que solo ha abandonado este plano para trasladarse al lugar donde descansara aquella alma....

Cierro los ojos y disfruto de la calidez de la energía que está recorriendo mi cuerpo, "oh, es tan agradable".

Una ligera punzada oprime mi pecho y siento ganas de llorar, no sé porque siempre siento esto.

Anhelo, nostalgia, y la imperiosa necesidad de tener a alguien entre mis brazos y no dejarlo, no sé por qué pero este anhelo siempre es el mismo. En fin, disfruto solo un instante de estas sensaciones y entonces vuelvo a abrir los ojos, miro a Julián y después a Balthazar...

— De acuerdo, ahora veremos si es tan fácil como dices— digo mientras disfruto los últimos segundos de esta agradable sensación.

— Lo es — vuelve a decir Balthazar.

— Ya lo veremos — respondo mientras observo el espacio que nos separa, pero no es la indicada – mmm Julián puedes retroceder un poco y tú acércate un poco más a mí, prometo no hacerte daño.

— My lady... — replicaba Julián mientras retrocedía unos pasos.

Julián me agrada un poco más que los demás Shinigamis y es por eso he decido explicarle lo que pienso hacer.

— Ya me canse de que todo el mundo crea que mi vida es tan fácil — replico – no tienen idea de lo que paso cada día, cada momento con esta condena. No es justo, todos creen que saben que es vivir como yo vivo, pero no lo saben – suspiro – estoy cansada de que siempre venga alguien a cuidarme y a decirme que hacer, ¿de verdad crees que mi vida es fácil? Perfecto, entonces hare que vivas como yo vivo....

— De que hablas... — pregunto de pronto Balthazar un poco serio.

— Ya lo veras—

De inmediato me coloco frente a el, recordando las anotaciones que días atrás había leído en el viejo libro de la abuela, y aunque al principio parecía no tener sentido, las memorice al instante.

Era el momento de iniciar y con algunos movimientos de mis manos comencé a recitar aquellas palabras...

"una vida atada a otra,

traída de regreso,

viviendo juntos lado a lado"

Repetía una y otra vez estas palabras hasta que un halo de luz comenzó a encerrar el cuerpo de Balthazar, continúo repitiendo estas palabras "una vida atada a otra...." Y entonces el símbolo por el cual envíe el alma se forma bajos los pies de Balthazar, ¿eso es normal?, trato de no desconcentrarme, "una vida atada a otra...." De pronto la luz que encerraba el cuerpo de Balthazar comenzó a introducirse en su pecho, y justo en ese instante un halo de luz pero esta vez de color violenta comienza a salir.

Según el libro este es el momento de cambiar lo que digo...

"resguardando tu existencia

quédate a mi lado,

viviendo otra vez,

una vez más"

Repito una vez más las palabras tratando de comprender su significado. ¿Resguardando? ¿Qué es lo que debo resguardar?, trato de analizar lo que digo lo que sucede y lo que debo de hacer, de pronto veo que el halo violeta está acercándose cada vez hacia mí, ¿eso es lo que debo resguardar? ¿Cómo? ¿En dónde?,. La luz blanca casi terminaba de entrar en el cuerpo de Balthazar lo que significaba que el haz violeta estaba por terminar de salir, "resguardando tu existencia quédate...."

¿Qué hago?.

De pronto lo recuerdo. Mi guardapelo.

Tomo la cadena que cuelga de mi pecho y lo abro, justo en el momento en que el haz blanco ha desaparecido, la luz violeta se introduce lentamente en este, cuando casi ha entrado en su totalidad mágicamente se cierra. Y con este golpe caemos al suelo ¿en qué momento nos elevamos?. Miro a Balthazar en el suelo y es cuando recuerdo que debo de hacer algo más para cerrar el hechizo.

Sin más me acerco a Balthazar y lo abrazo fuertemente.

— ¿Qué? ¿Espera....? respondía nervioso tratando de escapar de mis abrazos.

— Solo quédate así unos segundos y lo veras—.

— Pero...

— Shhh —

Permanecemos en silencio aun abrazados en el suelo y en menos de un instante un sonido comienza a hacer ruido, me aparto un poco de Balthazar para poder ver su rostro.

Este sorprendido tiene los ojos abiertos de par continuos más fuerte. Primero lentamente y después comienza a coger un ritmo constante.

Pum, pum, pum.

Balthazar está sorprendido y yo también, no creí escuchar ese sonido saliendo del pecho de un Shinigami. El sonido de un corazón latiendo nuevamente.