Mía yo tuyo

"Llevándola a nuestro hogar"

Stephen James:

Cuando la vi abrazada con ese idiota me dio una ira, es que la gente no entiende que ella es ajena, por esa razón me baje molesto y la agarre a la fuerza, pero lo bueno es que la tengo aquí conmigo, jaja vi su carita sorprendida cuando vio mi mansión, corrección nuestra mansión. Quiero lo mejor para ella, no dejaría que hiciera nada, solo quiero tenerla para mi solo y que no se preocupa por nada.

Entramos a la casa y nos recibe Mary.

-Buenas tardes mi niño, buenas tardes señorita- dijo ella amable.

-¡Mary! te presento a Kendall, verdad que es una hermosura?- dije entusiasmado.

Ella se sonrojo.

-Jaja Stephen eres un caso, claro que si es muy hermosa- dijo Mary con una cálida sonrisa.

-Bueno Mary haznos un jugo, voy a enseñarle la casa a mi niña- dije agarrando de la mano a Kendall.

Subimos al piso de arriba donde están los cuartos.

-Ven preciosa voy a enseñarte nuestra habitación- le dije como niño pequeño.

-Stephen por favor...-no la deje terminar.

-Ven mi niña vamos...-dije entusiasmado pero ni me dejo terminar.

-Stephen cálmate por favor, quiero irme a trabajar si- dijo ella pero me dio mucha rabia.

-Tu no te vas de aquí, ya ya te dije tu no necesitas trabajar- dije estampando la en la pared.

-Por...por favor, déjame ir si, mi mamá esta muy enferma y yo soy lo único que tiene- dijo temblando.

-Ya lo se muñequita, yo puedo pagarle una de las mejores clínicas a tu mamá- dije acariciándole la mejilla.

-No stephen tu no pue..., espera, como sabes que mi mamá esta enferma?- me pregunto confundida.

-Pues, bueno, lo que pasa es que estuve averiguando tu vida y así que por eso se- dije nervioso y rascándome la nuca.

-COMO QUE ESTABAS AVERIGUANDO SOBRE MI VIDA? NO ES TU MALDITO PROBLEMA- dijo histérica y empujándome porque la tenía estampada.

-OYE ESCÚCHAME- Dios ya me va a dar un ataque de ira- NO ME ESTÉS GRITANDO O TE VA A IR MAL, Y SI ES MI MALDITO PROBLEMA POR QUE ERES MALDITAMENTE MÍA- dije ejerciendo fuerza en sus muñeca poniéndolas al lado de su cabeza.

-Por favor no me hagas daño si, so...solo quiero ir a casa con mamá- dijo con la cabeza agachada y con lagrimas en sus ojitos.

Maldita sea ¿Qué hice? ella no, ella no.

-Perdóname- dije apartando mis manos de las suyas asustado- Perdóname mi muñequita, no lo quise hacer- dije le iba a agarrar una mejilla pero se aparto.

-No re apartes por favor no me tengas miedo- dije con lagrimas en los ojos y entrando en una crisis nerviosa.

Ella se iba alejando- No te vayas por favor- dije cayendo al piso y haciendo el intento de agarrarla, pero se alejaba.

-Por favor- dije sentado poniéndome en posición fetal, escondiéndome como un niño.

Dure un rato así hasta que siento que tocan mi hombro- Oye no te pongas así ¿Si?- levante mi mirada y ella estaba de rodillas acariciando mi mejilla, su toque me relaja demasiado.

-Perdóname- dije hipando de llorar.

-No, perdóname a mi, creo que me porte como una niña. Pero la manera en como me traiste aquí no es la adecuada- dijo haciéndome entrar en razón.

-Tienes razón, es que tu no querías ceder así que...-me puso un dedo en los labios haciéndome callar.

-No hablemos más de el tema- dijo haciendo una sonrisa sin enseñar los dientes, que hermosa- Si quieres nos conocemos ¿Te parece?- dijo ella.

-Es en serio mi amor?- dije esperanzado.

Se sonrojo- Si, porque no- me abalance abrazándola.

-Gracias, gracias- dije dando besitos por toda su carita roja- Me encanta cuando te sonrojas y más cuando yo soy en causante- dije ella se puso más roja de lo normal y agacho su mirada.

-Ey que dije de agachar la mirada?-dije poniéndole un dedo en su mentón para que alzara la cara.

-Emm que yo soy la única que puede mirarte?-dijo no tan segura.

-Así es mi amor, tu eres la única que puede verme a los ojos, porque yo soy solo tuyo- dije agarrándola de su pequeña cintura y susurrándole.

-Eh bueno, vamos a conocernos ¿No?- dijo ella separándose rápidamente.

Yo con una sonrisa arrogante le dije- Claro bebita vamos a bajar y tomamos un jugo- dije agarrando su mano y bajando por las escaleras.