Mía yo tuyo

"La conversación"

Kendall West:

Cuando me despierto siento algo aplastarme y también siento mucha calor, abro los ojos acostumbrándome a las luz y cuando volteo hacia abajo veo a Stephen acostado sobre mi con un brazo detrás de mi cabeza, el otro en mi cintura y con sus piernas enrolladas con las mías, o sea literal me esta aplastando, también siento su gran amigo duro en mi muslo, ¡Dios! debo de estar como dice Alex un "tomate". Me remuevo para sacarlo de encima, pero lo que logro sacar son gruñidos por su parte- Stephen, me estas aplastando, quítate de encima- entonces ahí veo que se despierta y veo sus hermosos ojos verdes.

- Muñeca déjame aquí, me encanta sentirte- para luego meter su cara en mi cuello y lamerme, yo suelto un gemido- Ste...phen.

-¡MÍA!, di mi nombre- vuelve a lamerme y subirse encima de mi.

-Ste...phen y...yo m...mmmmm- Dios santo, me encanta este hombre, pero debo detenerlo, en estos momentos siento húmeda mi vagina- Stephen ya por favor, yo soy tuya pero en estos momentos no estoy lista.

El separo su cara de mi cuello y se veía apenado- Lo siento bebita, de verdad lo siento- dijo y agarro mis dos mejillas para besarlas- ¿Di...dijiste que eres mía?- dijo viéndome con ternura.

-S...i- tartamudee, pero carraspee para sonar más segura- Si Stephen, soy tuya- dije y le di un dulce beso en sus labios.

Cuando nos separamos el tenía los ojos cerrados, como si estuviera saboreando el beso y cuando los abrió el estaba... ¿llorando?, vino y se lanzo bruscamente hacia mi y me abrazo, estaba olfatean dome y tocándome y besándome por todas partes, creo que le esta dando una de esas crisis nerviosas que le da- Mía, mía, mía, mía, mía ,mía, mi mujer, mi hembra.

Dios debo detenerlo- Cariño, bebé cálmate mi cielo- el me estaba lamiendo desde mi cuello hasta mi mejilla, me daba risa, parecía un perrito. Yo estaba acariciando su cabello y su espalda para calmarlo ya que respiraba entrecortada mente, me he dado cuenta que las veces que le ha dado estas crisis yo soy la única que lo calma- Estas más calmado cariño?.

Se separo lentamente y tenía los ojos cristalizados, yo acaricie su rostro tiernamente, parece un niño- S...i, si bebita hermosa- dijo y me dio un beso fugaz y se quito de encima poniéndose a un lado, pero me tenía agarrada de la cintura pegado a mi, nos quedamos en silencio un rato hasta que Stephen rompió el silencio- Pequeña ahora si no te me vas a escapar, responde me lo que te pregunte ayer- dijo serio.

-¿Que cosa?- dije haciéndome la que no sabía viendo hacia otro lado.

El me agarro de la mandíbula voltean dome hacia el- No me tomes al pelo muñequita. sabes que cuando se trata de ti, todo es en serio- dijo y me soltó.

Hice un largo suspiro- Alex yo lo conocí hace un año en la cafetería, una vez que estaba muy desesperada ya que no teníamos nada de dinero, busque en el periódico y vi un anuncio que decía que necesitaban una camarera, así que no perdí la oportunidad, llame y bla bla. Cuando llegue ahí y me presenta ante el jefe que es tío de Alex, el solo me vio y rápidamente me dijo que no podía darme el trabajo porque era una niña, y era verdad, pero estaba muy desesperada, así que le implore y le rogué que me diera el empleo, pero solo era no y no, hasta que.... llego Alex me vio y ya que tenía los ojos cristalizados el me pregunto que me pasaba, y yo como era primera vez que lo veía yo le dije con toda pena de el mundo mi situación, y bueno, como el señor Cameron no tiene hijos, Alex es como si lo fuera el automáticamente hablo conmigo y me dio el trabajo, así que desde allí Alex se convirtió en mi mejor amigo porque fue uno de los que me brindo su mano, así que lo aprecio mucho.

-Bueno no es tan idiota como parece, pero no me gusta que este contigo, es que te ve de una manera que no es de amigos- dijo acariciando mi labio con su pulgar.

- Stephen, yo nunca he visto a Alex con otros ojos que no sea el de un hermano mayor- dije y lo abraze por su cuello y acariciando su rostro con mi nariz.

- Lo se pequeña, pero el no lo entiende. Además no me gusta esos sobrenombres, no me gusta que te diga tomatito, yo soy el único que puede ponerte apodos- dijo repartiendo besos por toda mi cara- Y larry?.

-Stephen es en serio?- dije riéndome.

-Ya te dige, cuando se trata de ti, todo es en serio- dijo mirándome fijamente y escondiendo un mechón detrás de mi oreja.

- Bueno- dije y rode los ojos- Larry y yo eramos amigos de la infancia, eramos inseparables, venía a comer y a jugar conmigo después de la escuela.Su padre era un maltratador, todos las noches llegaba borracho y golpeaba a su mamá y a el, por ende el agarro el mal camino y empezó a tener malas juntas, yo decidí ayudarlo pero el se negó, así que nos separamos.

-Pero el gusta de ti, con lo que dijo ayer me lo confirmo- dijo serio.

-Bueno si, el siempre ha gustado de mi. Me gustaría tener la oportunidad de ayudarlo, sacarlo de ese mundo, yo se que en el fondo hay un niño que tiene miedos y resentimientos- dije poniéndome triste.

-Ya mi linda bebé, ven vamos a dormir- el estaba acariciando mi cabello.

Tenía los ojos cerrados disfrutando del momento hasta que...- ¡Oh por Dios!, maldición, maldición- dije y me pare rápidamente.

-¿Que paso pequeña?- dijo Stephen preocupado.

- La escuela, voy tarde- dije agarrando mi ropa para ir al baño.

- Pequeña pero...- no lo deje terminar ya que me encaminaba a bañarme. Hice mis necesidades, me bañe y me vestí, salí como alma que lleva el diablo a hacer el desayuno, mire el reloj y marcaba las 6:10, de seguro llegare tarde, acabe el desayuno y llame a Stephen para que viniera a comer y le lleve el desayuno a mi mamá.

- Mami despierte que ya le hice el desayuno. ella abrió los ojos y me vio con una sonrisa.

- Mi niña, ya te dige que yo puedo hacerme mi comida, de todas maneras gracias- dijo ella dulce.

Le di un beso en la frente- mami cuídate, en la noche tengo que decirte algo.

-Esta bien pequeña- dijo y yo me fui corriendo a la sala para agarrar mi bolso e irme, pero Stephen me detuvo.

-Bebita no te apresures, ya nos vinieron a buscar- dijo agarrando mi pequeña mochila y agarrando mi mano para salir.

-Nos vinieron a buscar?- dije confundida.

- Si, Nervi vino por nosotros, acuérdate que yo voy a traerte y llevarte, ya no tienes que agarrar esos molestos autobuses. Te gusta la idea bebita- dijo con una sonrisa de oreja a oreja.

-Emm claro- dije encogiendo los hombros y con una sonrisa.

-Esa es mi chica- dijo y beso mi mano. Al momento escucho una bocina de auto y los dos volteamos hacías esa dirección- Oh mira ese es Nervi- Agudice mi vista y vi a un chico con unos lentes negros haciendo la mano cornuda y sacando la lengua- Y esta demente- dijo Stephen.

-Ya me di cuenta- dije riéndome y caminamos hacia el.

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Hola gente hermosa, en serio disculpen la inactividad, mi internet esta jodido así que aja.

En serio quisiera que comentaran como va mi historia, si les gusta, alguna recomendación para el próximo capitulo, lo que ustedes quieran me lo hacen saber por los comentarios. Ahh y voten please.

BESOS.