Mía yo tuyo

"Mi suegra me odia"

Stephen James:

(+18)

Íbamos en el auto en camino a la casa de mi suegra, le prometí que la iba a llevar a una de las mejores clínica de Chicago, y eso es lo que voy a hacer. Haría cualquier cosa por el ser que le dio vida al ser más precioso que he tenido en mis manos. Mi muñequita y yo estábamos hablando de lo sucedido de hoy, yo quería que todo saliera perfecto pero tuvo que venir Stephan a estropearlo todo; no tengo nada en contra de el, es mi hermano y se que no es su culpa haber nacido con ese trastorno, y lo quiero aunque no lo demuestre, pero es que quería que todo saliera bien para que mi dulce mujer se enamore más de mi, pero lo recompensare haciéndole el amor. Ya habiamos llegado al barrio Riverdale y aparco el auto donde lo había puesto la primera vez que había venido, menos mal ya mi bebé no vive aquí, nos dirigimos a la casa de mi suegra y mi Kendall saca unas llaves para abrir la puerta.

-¡Mamá ya vine!- grita mi Kendall, pero no hacía falta, porque la señora Margot estaba sentada en los muebles de la sala y con nada más y nada menos que la molestia de Alex.

-Kendall acércate rápido- dice la señora Margot con un semblante asustadizo. Kendall se acerca extraña y yo igual- No, tu aléjate de nosotras- dice y yo paro en seco. Agarro a Kendall de las manos- Estas bien mi niña, ese monstruo te hizo algo?.

-Mamá que sucede?- dice kendall preocupada.

-Ese tipo- dice señalándome- Es uno de los matones más buscados de país Kendall, no debes estar con el. Alex vino y me lo dijo.

Estoy que ardo de la rabia, me abalanzo hacía Alex- Pedazo de mierda te voy a ...- Kendall se interpone en mi campo de visión.

-No Stephen, espera- me agarra de los hombros y luego se voltea hacía Alex- Alex como se te ocurre venir a decirle una noticia como esa a mi mamá?.

-Kendall yo tenía que hacer algo para salvarte de las garras de ese tipo.

Intento volver a abalanzarme sobre el pero Kendall me agarra de la mano- Alex cuantas veces tengo que decirte que no te metas en mi vida, que tal si a mi mamá le hubiera pasado algo?ah?, que hubieras hecho?.

El baja la cabeza- Kendall deja de decir baboseadas, estuvo bien que viniera a decírmelo, saber que mi hija esta con un criminal- ella se queda pensativa- No me digas que sabias lo que hacía este tipo?ah?- Kendall se sobresalta y queda en silencio- Dímelo Kendall.

A mi Kendall se le cristalizan los ojos- Si mamá, si se que Stephen hace esas cosas- ella baja la mirada y yo la abrazo por su cintura para darle apoyo, la señora Margot ve la acción que hice y los ojos se le cristalizan y sonríe amargamente.

Voltea hacía mi- Ah, me lo suponía, engatusaste a mi pobre niña inocente, cierto?- yo niego, voltea hacía Kendall- A el le gusta andar con las mujeres para hacer sus sinvergüenzas y botarlas como las putas, o no me digas que eres una.

Kendall rompe a llorar- Que ?, como mi propia madre puede decir que soy una puta, cuando no es así- beso su cabeza y pego mi mejilla en ella- Déjame decirte que desde que te dio esa enfermedad no he salido de esa maldita cafetería para poder pagar tus insumos médicos, y trabajar turnos extras para que me pagaran más sueldo, y si quieres pregúntaselo a el- señala a Alex- O también le llenaste la cabeza de mentiras?.

-Kendall yo...- Alex se pone a llorar, yo lo asesino con la mirada.

-Y quiero decirle a todos, que yo no estoy con Stephen o porque soy una puta, o porque me tiene secuestrada, o porque me engañada, yo estoy consiente de todo. Yo estoy con el porque lo amo y el me ama, y voy a estar con el les guste o no- voltea hacía donde Alex- Y deja de entrometerte en mi vida y mortificar a mi mamá, te lo pido- se voltea hacía mi y me dice "vamonos" en un susurro y me agarra de la mano para salir de la casa. En todo el camino hasta el auto no dirigimos palabras, igual dentro del auto, mi Kendall parece sumida en sus pensamientos, por eso no quise hablar, mi niña debe estar analizando lo sucedido en su casa. Ese maldito de Alex, mete sus narices en donde no debe, ahora mi suegra me odia, pero es que juro que cuando lo vea por ahí le daré una lección, nadie se mete con mi muñeca.