Ella tan linda,dulce,tímida.
El tan agresivo, arrogante, posesivo.
Tan diferentes. Quien creería que estos dos polos opuestos estarían juntos, casados y con una familia, pues créelo, a través de esta historia conocerás a estos dos bellos personajes...
Estaba sentada en el sillón esperando a que Stephen volviera, pero nada, así que me levanto del mueble y me dirijo a la puerta.
-Cariño que pasa?- el voltea a verme, ahí diviso a un señor y a los guardias de la casa.
-Dulzura n-no pasa nada espérame en la habitación- en eso dicho señor entra a la fuerza empujando a Stephen y el... ¿Me abraza?.
-Dios mío, eres hermosa como te imagine- yo me quedo congelada en mi sitio mientras el sigue abrazándome.
-¿Qui-quien es usted?- digo tratando de alejarlo.
El me ve- Yo soy tu padre Kendall- en ese momento sentía de todo, muchos sentimientos revolvimos que hicieron que me faltara la respiración.
-Agárrenlo y sáquenlo de aquí- dice Stephen autoritario.
-No por favor, necesito hablar contigo y arreglar todo hijita- dice forzando para soltarse.
- ¡Sáquenlo ahora mismo!- vuelve a decir mi esposo pero yo me entrometo.
-¡No!- todos se voltean hacía mi- Suéltenlo.
-Pero dulzura el...- lo interrumpo.
-Que no, yo necesito aclarar unas cosas, por favor suéltenlo- ellos sin dudarlo lo sueltan.
Stephen se acerca a mi y me susurra- ¿Estas segura?.
-Si cariño- sonrió y le doy un beso en su cicatriz.
-¿Quieres hablar a solas?- yo asiento y el me da un beso- Me avisas cualquier cosa- Dice para luego descender por las escaleras.
-Acompáñeme- digo mientras me dirijo a la sala y el me sigue- siéntese- le señalo el mueble- Y cuénteme, ¿a que vino?.
-Se que me tienes rencor o hasta posiblemente me odias y te doy toda la razón, pero quiero que me des la oportunidad de explicarte todo- dice desesperado.
-Lo escucho- digo neutra.
-Margot y yo al principio eramos muy buenos amigos en serio, a donde iba ella yo iba a donde yo iba ella igual, eramos inseparables. Al tiempo después nos empezamos a gustar y toda la cosa, ella siempre fue lo opuesto a mi: Era toda una niña bonita de su casa. Yo al contrario era un antisocial de mierda que no podía vivir sin las drogas. Nos volvimos novios después, recuerdo que cuando era su novio era demasiado celoso , no dejaba que ningún tipo la viera o tocara, yo siempre decía: Pobre de aquel que ose a tocarla. Le hacía mucho daño, pero ella igual me amaba. Y bueno, en uno de esos momentos me entere que te iba a tener; me volví loco, iba a ser papá y con la mujer que amaba, pero como todo no es color de rosas,las drogas ganaban la batalla, no podía vivir sin ellas, me había endeudado con un narco o no se que mierda y tuve que irme y dejarlas- el lloro en todo el trascurso de la historia y yo igual lo acompañaba- Perdóname, perdóname hija mía te lo imploro.
-Yo no voy a juzgarlo por su pasado y créame que ni lo odio ni tampoco le tengo rencor. pero perdonarlo me va a costar muchísimo. Mi madre y yo pasamos muchas necesidades la mayoría del tiempo, a mi mamá le costo darme el tamaño que ahora tengo, por eso me costara demasiado- digo con la voz quebrantada.
-Hare lo posible por recuperarte, a ambas.
- De mi madre lo dudo mucho- el baja la cabeza.
-Y dime, ¿El te trata bien?- pregunta decaído.
Yo sonrío- Demasiado.
-Me alegra que tengas a alguien que te de amor y te cuide- baja la mirada- Algo que no hice yo- nos quedamos en silencio por un rato hasta que escucho como si un gatito estuviera maullando dándome a entender que Joseph esta llorando, escucho como descienden por las escaleras y aparece Stephen en la sala con mi pequeño.
-Dulzura Joseph tiene hambre- el camina hacia mi y se sienta a mi lado entregándome a Joseph.
-E- el es tu hijo?- el me mira con los ojos abiertos, yo asiento- No puede ser- el se levanta y agarra su cabello desesperado-Todo lo que me he perdido estos años, maldición- el se acerca de manera rápida a mi pero Stephen se levanta y lo detiene.
-No se acerque- dice poniéndole una mano en el pecho.
-Mi amor déjalo- digo mientras amamanto a Joseph.
-Pero amor- dice suplicante.
-Tranquilo, ven siéntate- yo aprovecho y me pongo una manta en mi pecho para que no se vea nada-¿Quiere verlo?- el asintió frenéticamente.
Yo me levanto y camino hacia el con Stephen siguiéndome, se lo muestro- Es hermoso, todo lo que me perdí estos años, ya eres mamá y-y yo soy abuelo- el sonríe entre lagrimas- no lo puedo creer, tu madre como se puso?, me imagino que feliz porque es abuela ¿no es así?.
-Si muy feliz, todos lo están- el seca sus lagrimas y sonríe.
-Y-yo bueno- suspira- yo creo que debo irme. Te agradezco mucho que me hayas dado la oportunidad de hablar contigo- el se iba a voltear para irse pero yo lo detengo.
-Porque no se queda a cenar. Preparare un pollo al horno con verduras- el me mira sorprendido.
-No creo que deba- dice rascándose la nuca incomodo.
-Venga, yo lo invito- el sonríe sin aún poder creerlo.
Y así pasamos a la cocina, Stephen y el señor me ayudaron a preparar todo mientras que el me platicaba de cosas como fue su rehabilitación, en donde trabaja y como a sido su vida durante este tiempo. Y bueno, Stephen no se que le sucedía hoy, desde que llego Harold no a dejado de estar pegado a mi como una plastilina, cuando estábamos haciendo la comida parecía que estaba en una competencia o algo así y también le mandaba una que otra mirada de amenaza a Harold, también cada vez que podía me susurraba en el oído que era "suya".
Después de la comida el se ofreció a lavar los platos y dijo que se iba, el me suplico lo dejara visitarme a mi y a mi hijo, y también que hablara con mi mamá de esto. Yo de verdad no quiero guardarle rencor ni odio a nadie, esos sentimientos nos arruinan y tampoco quiero transmitirle esas energías a mi hijo, así que voy a hacer lo mejor posible por perdonarlo y aceptarlo.
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¿Como están? que les pareció este capitulo, ¿Ustedes creen que Kendall deba perdonarlo?
Que tal si comentan que quieren para el proximo cap.
