29. Deshechar la flor

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5 meses después
Elizabeth
Gustavo tenía muchos compromisos con Soda stereo y en su vida profesional, yo seguía viviendo en Argentina y decidí trabajar empezar a escribir un libro en los tiempos en que Gustavo y yo no nos veíamos que casi era todos los días.
Los planes de boda se estaban haciendo cada vez más largos y parecía que la propuesta se había esfumado porque no tocabamos de nuevo el tema.
Aburrida de todo y sin ideas para seguir en mi libro decidí sentarme en el sofá y poner un disco de acetato de Paul McCartney después de 3 canciones comenzó a sonar 'another day', no había mejor canción que describirse todo lo que yo sentía.
Cerré los ojos y al terminar todo el álbum vi la hora y ya era demasiado tarde, Gustavo aún no llegaba. Decidí volver a sentarme y seguir escribiendo mi novela, en ese momento se escuchó el ruido de la puerta y era Gustavo demasiado alcoholizado y con las pupilas dilatadas, desafortunadamente no era la primera vez que llegaba así o a veces no llegaba.
Todo era tan rutinario y tan fastidioso, creo que en 5 meses sólo he cruzado 10 palabras cómo máximo con Gustavo, sin duda era un tope.
Decidí hacer lo que cualquier persona cuerda haría, a pesar de que lo amaba demasiado esto no podía seguir así.
Tome las mismas maletas con las que había llegado hace 5 meses y medio, guardé mis cosas, compré un ticket a México y decidí partir a comenzar de nuevo, sola como en un principio.
Antes de salir le escribí una carta a Gustavo mencionando todo lo que antes ya mencioné, lo guardé en un pequeñito sobre, guardando dentro del mismo el anillo de compromiso.

Me fui un sábado aproximadamente a las 5 horas de la mañana del departamento, curiosamente era muy temprano pero era la hora y en ese día en que casi nadie estaba despierto y como era de esperarse Gustavo no estaba ahí.
Tomé un taxi y era momento de irme silenciosamente.

Gustavo
Todo con Soda Stereo estaba en auge, a veces en algunos conciertos veía a Cecilia y no miento, se me hacía demasiado atractiva pero pensaba en Elizabeth y decidí no tener nada con Cecilia aunque una vez en una fiesta en Chile ella me besó pero fue sólo un beso y nadie nos vio. Hoy sábado y ya eran las 9 am, después de una enorme fiesta con los chicos decidí irme al departamento.
Llegué al departamento y Elizabeth no estaba ahí, fui a una habitación en dónde estaba su máquina de escribir porque seguramente estaba ahí y tampoco, grité su nombre y ella no contestó. Me dirigí a todos lados como un loco pero ella sólo había dejado un sobre con mi nombre, lo abrí y ahí mismo estaba el anillo de compromiso, leí todo lo que ella me había escrito y todo era muy cierto, la descuide y no me di cuenta, ella se sentía sola y yo no estaba ahí para decirle que ella nunca estuvo sola. Me sentía un idiota pero no sabía a donde había ido, baje con las personas de seguridad del departamento y sólo me dijeron que la vieron salir con 3 maletas y que ella vestía casual. Era obvio que ella se había ido.
Sin duda la había perdido para siempre y fue mi culpa.

Amor AmarilloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora