DESCENDIENTES 6 Érase Una Vez

EL LEGADO DE LAS JOYAS

A medida que la comida avanzaba el ambiente en el gran salón se ponía cada vez mas animado pues la música había tomado un ritmo mas actual y las bromas del Genio habian llenado de vivacidad el evento. De manera que cuando llego la hora del postre; que consistía en un esponjoso Budín de chocolate acompañado de una bola de helado de fresa silvestre y decorado con hojas de menta, ya todo mundo reia y bromeaba mientras afuera comenzaba a obscurecer y en medio de la pista de baile Mabel noto que un par de jóvenes camareros montaban una tarima pequeña con un podio y un micrófono

- ay no...comienzo a pensar que Janine tenia razón...

-tranquila Mab no estamos seguros de nada okey?- su novia asintió sin decir mas pero por mas cara tranquila que pusiera no lo estaba para nada.

Cuando la mayoria había terminado su postre el rey Ben nuevamente se puso en pie y advirtio que nadie mas se levantara, miro a algunos de sus invitados mas próximos mientras caminaba hasta el podio y coloco el micrófono que tenia en la mano, hizo una señal y entonces Jane y Andrew dejaron a Evie y Carlos en sus respectivas mesas para acompañar a Ben que una vez con estos a su lado carraspeo y comenzó a hablar mientras las luces se apagaban, dejando una sola y tenue luz para enfocar al podio- Damas y Caballeros de la corte quise aprovechar el festejo del aniversario del reino para hacer un homenaje a un grupo de jóvenes que ha demostrado que la amistad y el amor son primordiales en el estilo de vida de Auradon, estos jóvenes son Antony, Jacob, Janine, Henry y mi pequeña Mabel....vengan chicos pasen al frente por favor...-la chica se hundió en su silla mientras las miradas se fijaban en ella y sus amigos desperdigados en todo el salón, sin embargo esto no era lo que incomodaba a la chica si no que cada conjetura que había formulado con sus amigos la tarde anterior habían resultado ser ciertas, Mabel y su grupo se acercaron tímidamente encabezados por Henry y miraban al rey desde abajo de la tarima, este les dio una sonrisa solemne que les inspiro confianza y continuo hablando- se que el joyabileo se lleva a cabo normalmente en Octubre pero dado sus recientes hazañas- miro a Mabel- el consejo real, la corte y yo discutimos que no pasa nada malo si les hacemos este homenaje entregándoles sus joyas reales familiares, amor por favor....- hizo una seña y Mal subio rápidamente a acompañar a su esposo solo para alcanzarle una pequeña caja con cerradura dorada a Jane que nerviosa la tomo y la abrió, dentro de ella 5 brillantes joyas brillaban distintivamente.

Andrew tomo la joya de color negro e hizo subir a la hija de Carlos que tan nerviosa como su madre se acerco hacía el general- la primera joya es para ti Janine por demostrarnos que el conocimiento es poder...- la chica tomo la joya y esta resplandecio de manera extraña, se escucharon varios aplausos y Ben siguío hablando mientras Jacob y Antony tomaban lugar en la tarima- la siguiente joya será entregada para un par de jovenes que saben que a veces la mayor fortaleza que tenemos es nuestra unión - los chicos agradecidos tocaron la pequeña joya dorada a la vez y esta brillo, sonrieron y los aplausos también les siguieron, Andrew sonrío mientras Henry subía a acompañar a sus amigos y Ben continuo hablando- que mas se puede decir del hijo del valiente general de las fuerzas armadas de Auradon y de una de las mejores modistas del reino, el padre del chico tomo la joya roja en forma de corazón y se la entrego a Henry que al tocarla sintio cierta calidez en sus dedos, aun mas aplausos sonaron en el salón pero se silenciaron cuando Ben siguío con su discurso- y finalmente mi pequeña Mabel que me recuerda a diario que el amor todo lo puede...-la chica nerviosa como nunca antes en su vida subío acompañando a sus amigos y el padre de Henry le entrego con una sonrisa su joya, Jane cerro la caja y se la puso bajo el brazo mientras Mabel sentía un cosquilleo al tomar la joya que le dieron, esta brillo y la rubia se sorprendio al notar que no era un brillo esmeralda si no uno color azúl...aliviada de cierto modo Mabel sonrio mientras aplaudían y alzo la mano donde tenía su joya, sus amigos miraron atonitos la joya de su líder y la imitaron levantando sus joyas que brillaron intensamente con sus 5 colores invadiendo el salón- Gracias chicos!... y bueno sigamos festejando!- dijo Ben tomando el brazo de su esposa y asi juntos abrieron el baile.

Los invitados no esperaron mas y en cuestión de segundos la pista de baile estaba llena, Mabel y sus amigos se mantuvieron
unidos mientras observaban a varias parejas, entre ellas sus padres, bailar.
-okey Janine lo admito, no estabas equivocada- dijo Henry.
-es la primera vez que odio tener razón- contesto la chica mirando su joya- debemos ser cuidadosos con estas cosas...
-mi pastelito tiene razón, oye Jacob quién debería guardarla?
-creo que tu, sabes como soy conservando cosas pequeñas- dijo despreocupado a su hermano.
-no me vuelvas a decir pastelito!- reclamo Janine sonrojada a Antony- esa debe ser la joya de tu padre...no es así?...
-supongo...-contesto Mabel pérdida en sus pensamientos- soy solo yo o a alguien mas le recorrío una especie de energía por el cuerpo cuando tocaron sus joyas?...
-ahora que lo dices...si yo sentí algo al tocarla- comento Henry.
-nosotros también, fue extraño- dijo Jacob terminando la bebida de su copa hasta que Helena llego rodeandolo de la cintura y lo llevo a bailar dejando el tema de las joyas de lado, Antony no tardo en imitar esto y se llevo a Janine a la pista de baile dejando solos a la princesa y su nervioso novio- esto...quisieras....tu sabes...
Mabel lo miro inquisitivamente, hasta cierto punto la situación le parecía divertida, lo tomo de la mano no fue hasta que llegaron al centro de la pista que la chica hablo- llevamos algun tiempo juntos y aun te pones nervioso?...no es digno del hijo del general...-bromeo la chica mientras el joven sonrio, despúes tomaba su cintura y no dejaba de mirarla- al menos soy mejor bailarín que tu...- Mabel sonrio y estos continuaron bailando al ritmo de la música mientras una chica de piel morena y un cerdo albino en los brazos los miraba desde el otro extremo del salón.