DESCENDIENTES 6 Érase Una Vez

EL PODER ES NUESTRO

-muy bien, es bueno saber que en Auradon saben seguir ordenes- dijo Uma burlona- ahora escucha harás lo que se te diga o tu mini Mal deja de respirar, toma! Y no intentes nada estúpido!- advirtió mientras le entregaba la joya que acababa de quitarle a Mabel, el resto del salón se mantenía en silencio y sin moverse, Mal, Andrew y los demás miraban tensos hacía la tarima temían hacer algo si Ben y su hija se encontraban en aquella posición. El rey tomo la joya y esta brillo con su característico tono azul, tal como Uma había leído las joyas solo funcionaban con sus herederos directos pero eso cambiaría en unos minutos.
- ahora repite lo que yo diga...- dijo Uma tranquila por tener el control del asunto, Ben la miro dudando sin decir nada- no es necesario que te recuerde que esta en juego verdad?
El padre de Mabel miro a su hija con la ahora espada de Zevon en su cuello, mientras una gota de sangre salia del cuello de una decidida Mabel pues esta decía- no hagas nada papá!!!... no lo valgo!
-cariño yo por ti y tu madre daría todo....- dijo Ben bajando la mirada tristemente, Uma con los ojos en blanco espeto- basta de cursilerías! Repite conmigo Ben!- este asintió sin mirarla y repitió lo que la joven decía- Realidad del día, viento, fuego tierra y mar por la magia de esta gema harán mi voluntad! Ahora las joyas reales a cualquiera obedecerán!

Una vez que Ben profeso estas palabras la joya en su mano destello intensamente y una onda expansiva de luz azul salida de esta invadió todo el salón, recorriendo todo Auradon desde el desierto de Agrabah hasta la Isla de los condenados, la risa de felicidad de Uma rompió el silencio de la gran estancia, le arrebato la joya al rey dio una señal a Zevon que arrojo a Mabel junto a su padre con una patada de la tarima- este es el principio de su fin!

-no lo creo Uma!- grito Jay armado con una espada y acompañado de Carlos y Andrew subieron a la tarima mientras los guardias los encerraban en un círculo, la gente aprovecho para huir de aquel lugar, Ben y Mabel se levantaron con ayuda de Henry y Mal- no! esperen chicos!- advirtió Ben alarmado.
-Ben que pasa?...- pregunto Mal en un tono semejante
- su majestad con todo respeto mi padre y los demás los superan en número y...
-no lo entiendes Henry, Mal...- dijo mirándola-Uma y sus secuaces tienen ahora dos joyas! Por que crees que son tan jóvenes!- Mal comprendió al instante lo que significaba y miro preocupado hacia la tarima donde Gil y Carlos peleaban contra C'J y Harry.
-Mabel saca a tus amigos de aquí, sus padres y yo nos encargaremos!- ordeno Mal preocupada.
-pero...Madre...yo no...
-Mabel ahora!! Obedece!-urgió Mal molesta.
-vamos Mab- dijo Henry tomando del brazo a su novia mientras iban en busca de los demás.
Mientras tanto debajo de la tarima, en suelo de la pista de baile Andrew estaba enfrascado en un duelo contra Zevon y Uma intentaba escapar pero los guardias les cerraron el paso, la experiencia y la fuerza de los amigos de Mal como adultos superaba a las de su rejuvenecida tripulación- demonios!- grito Uma.
-alguna otra gran idea?!- dijo C'J mientras se levantaba del suelo y se unía a los demás.
-los mocosos se escapan!!- dijo Zevon desesperado mientras observaba a Mabel y su grupo huir hacia la puerta.
-ahora que capitán?!- inquirió Harry cansado y con un hombro herido gracias a la espada de Jay.
- rindanse Uma y tal vez Auradon les tenga piedad!- dijo Andrew apuntándole con Excalibur- entregense y devuelvan lo que robaron...- Uma sonrió y saco la joya color púrpura mientras gritaba: tomen mi hombro ya!- estos obedecieron sin miramientos y la chica continuo gritando- Tiempo, día, viento y mar el tiempo por diez minutos aquí congelaran!!- antes de que Andrew y sus soldados dieran otro paso hacia ellos el salón nuevamente quedo en sumo silencio, Zevon abrió los ojos que había cerrado y observo como una cúpula de energía púrpura encerraba todo el edificio.
-impresionante!!
-rápido idiotas tomen las joyas, tu Gil ayúdame, pondremos a los reyes en medio de estos soldados será muy divertido cuando el efecto se termine- dijo Uma contenta de que todo su plan se estuviera completando y al cabo de siete minutos, sus compañeros ya tenían en su poder las cuatro joyas restantes.