Mi Señor.

C A P Í T U L O 45

Quiero enfrentarlo, en verdad quiero hacerlo. Quiero decirle que lo he descubierto y que jamás va a poder quedarse con Yifan porque ese hombres mío. Él me prefiere a mí.

Oh Dios, Yifan estaba diciendo la verdad. Me ama.

Las manos me tiemblan inrreflenables, siento que la furia se apodera de mí y quiero gritarle, golpearlo o algo parecido, mas no puedo enfrentarlo, mis pies me sacan de ese lugar y antes de que me dé cuenta estoy derramando lágrimas silenciosas. ¿Estoy llorando por dolor?

No. Es furia, estoy furioso.

Estuve a punto de dejar que él se quedara con el hombre que amo, estuve a punto de decirle adiós a mi felicidad y todo por una persona que jugó conmigo y mis sentimientos de la forma más ruin que puede existir. Joder, él era mi amigo, lo amaba tanto.

¿Por qué?

Embarazado, Yixing está embarazado.

Eso no es justificante para lo que hizo, me grita mi subconsciente y estoy de acuerdo con ello. Se comportó como una maldita perra y la voy a destruir. Voy a hacer que desee no haberse metido conmigo.

[Necesitamos hablar]

[Es urgente]

[Mucho]

[Wu Fan: Ocurrió algo]

[Sí, descubrí que tan perra es Yixing]

[Wu Fan: De qué hablas, amor]

[Esa puta está embarazado y planeaba decir que es tuyo!!]

[Wu Fan: Dame cinco minutos para terminar la clase y hablamos]

[Ok]

Suspiro aliviado y no sé muy bien en que momento me hayo en el suelo con las rodillas contra mi pecho y vuelto un mar de lágrimas. En esa posición me encuentra Luhan y su voz de alarma solo hace que llore con más fuerza. Sí, soy un maldito llorón ¿Y qué?

–¿Qué pasó, Zitao?

–Es una zorra, Luhan, Yixing es una maldita zorra. El peor de todos.

Escucho a Luhan suspirar y me aprieta más contra sus brazos, creo que escucho la voz de Sehun diciendo que debemos salir de la universidad y hablar de lo sucedido así que niego. No puedo irme sin mi señor. Entonces suspiro e intento que las lágrimas dejen de salir.

–Está embarazado, Luhan –Susurro, siento que mi voz suena tan rota que me hace pensar la verdadera razón por la que estoy llorando. –Está embarazado y... –Callo, lo hago porque realmente no sé si este es un buen momento para confesarle a Luhan mi relación con Yifan.

–Huang Zitao, debes contármelo todo, no permitiré que me sigas ocultando las cosas. Eres mi amigo y quiero lo mejor para ti. –Dice y yo asiento, tiene razón Luhan si es una persona de confianza, siempre lo ha sido. Me lo ha demostrado.

Y le digo todo, cada suceso tal y como lo he contado aquí. Le comento lo enamorado que me tiene ese hombre y lo enamorado que él parece estar de mí. Le digo lo que sucedió con Yixing y con Daesung, como descubrí hace un par de minutos que él está embarazado y que planeaba decir que es de Yifan. Luhan solo jadea ante todo lo que escucha.

–Huang Zitao, estoy decepcionado de ti. Meterte con el mismo hombre que tu mejor amigo no estuvo bien y no lo está. No lo apruebo –Dice, su voz sonando tan seria hasta el punto de hacerme encoger. Tal cual si fuera un niño siendo regañado. –Pero no hay nada que hacer y supongo que podemos aplicar eso de que en el corazón no se manda. Estoy enojado contigo, mucho, joder.

–Lo siento.

–No lo sientes, por supuesto que no lo sientes –Recrimina él y es verdad. No lo siento en absoluto. –Pero de nada sirve que yo me enoje contigo cuando ya todo está hecho, ambos se equivocaron horriblemente y eso no podemos cambiarlo ¿cierto? –Suspira. Sé que está buscando las palabras correctas para decir. –Tienes razón, Yixing se ha comportado como una maldita perra y luego de que ustedes arreglen sus problemas va a tener que escucharme.

–¿Zitao? –Murmura una voz ronca y estoy completamente seguro que la tercera guerra mundial puede desatarse.

–¡Usted! –Grita Luhan a Yifan –Maldito.

–Joven Lu qué le...

–Ya lo sé todo, idiota, no se haga. Solo le advierto una cosa: haga llorar a Zitao de nuevo y tenga por seguro que pierde los huevos.