C. Adele Scarlett Southerns

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ESA MISMA NOCHE, TODAS SOÑARON CON ALGO EN ESPECIAL

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ESA MISMA NOCHE, TODAS SOÑARON CON ALGO EN ESPECIAL.

Mientras haya
lo que hubo ayer, lo que hay hoy,
lo que venga
-Pedro Salinas

ADELE

Aún conservo la última conversación que escuché con mis propios oídos antes de quedarme sorda. Mi yo de seis años estaba sentada en una cama de hospital, la señorita Martin, bastante joven en aquellos tiempos me cogía de la mano y me decía que todo iba a salir bien. Yo sufría de meningitis, tenía fiebre muy alta, me dolía mucho la cabeza y el cerebro me daba vueltas. Todos sabíamos que podía pasar si perdía la batalla. Una era que podía quedarme sorda. La señorita Martin para mi siempre fue una especie de adivina, ella se esperaba que yo me quedase sorda, porque compró varios libros que enseñaban lenguaje de signos.

No me acuerdo de toda la conversación, porque pensando que no me iba a servir en un futuro —ingenua de mi—, no presté demasiada atención.

Pero si recuerdo la última cosa que me dijo. Sus ojos penetraban los míos y estaban cansados, cansados de largas noches en el hospital.

—Tienes que aprender a llevarte bien contigo misma —me dijo—. Porque debido a tu condición te vas a sentir sola, confundida, perdida y no te sentirás humana. Pero también tienes que recordar que tu vas a estar ahí contigo cuando nadie más esté. Tu serás la que te levante del suelo cuando te caigas, tú serás la que te sujete, la que te ayude. Tienes que confiar en ti, porque no podrás hacerlo en nadie más.

<< Tienes que confiar en ti, porque no podrás hacerlo en nadie más>>

Aún me acuerdo de esas palabras. Voy a empezar a tomármelas más en serio.

Un cosquilleo me recorrió las palmas de las manos.

El secreto de las brujas de Salem | ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora