¿Zerrie? ¿qué es eso? I Could Be The One. (Zayn Malik y Selena Gomez)

Grande

Selena:

Cuando llegamos al hotel estábamos empapados. La lluvia seguía afuera.

Ese había sido el mejor beso de mi vida. No había comparación.

Subimos hasta mi cuarto, y me use una falda, y una camisa corta de velo. Me cambié las sandalias, que estaban empapadas, y me puse otras, secas. Agarré mi licra y salí del baño. Zayn estaba sentado en una silla de plástico, para que no fuera a mojar nada.

-explica esto- le dije, mostrando los grandes hoyos que habían en mi licra.

-yo...eh- se comenzó a rascar la parte trasera de la nuca. Subí los ojos, y sonreí.

-la próxima, por favor ten más consideración con mi ropa-

-créeme que dudo tenerla-

dijo sonriendo un poco apenado. Los dos reímos.

-¿no tendrás entre tus vestidos, alguno que me quede o algo así?-

Dijo, bromeando.

-de hecho sí, tengo entendido que ya vestiste de mujer en un video... ¿me debería preocupar?- dije riéndome.

-¡perdí una apuesta!- dijo en broma.

Le tiré un saco gris de lana extra grande que tenía y me puse una chaqueta negra de cuero.

-igual, tenemos que ir a tu hotel por tu maleta, vamos-

Se levantó de la silla donde estaba y me agarró la mano. Sus dedos se enredaban fuertemente contra la parte delantera de mi mano, entre mis nudillos. Un sentimiento bastante extraño se formó en mi abdomen. Era como si esas mariposas imaginarias que se supone que hay en tu estómago cuando estás enamorado, hubieran aparecido. Sentía que una sonrisa estaba a punto de asomarse en mi rostro.

Si todo esto pasa con agarrarme la mano, no entiendo cómo sobreviví a el beso...

Malik comenzó a acariciarla con su pulgar, procurando ser casi sutil. Me encantaba que hiciera eso. Nos montamos al ascensor aún agarrados de la mano. Miré al espejo frente a nosotros, casi sonriendo. No podía creer lo bien que nos veíamos.

Nunca pensé ser de esas que andan de la mano con un chico y pensar en cuan bien se ven juntos...sin embargo, era justo lo que estaba haciendo; me gustaba ver nuestro reflejo, porque veía algo diferente estando junto a él.

La verdad es que no veía a la misma Selena de ayer en el espejo: me veía casi radiante.
Había estado rogando por un cambio y Zayn era justamente lo que necesitaba.

La campana del elevador anunció que habíamos llegado. Le sonreí, solo para darme cuenta de que él me había estado mirado, desde antes que yo volteara el rostro.
Salimos del ascensor, recogí mi maleta de la recepción y nos montamos en mi Audi.

-créeme, lo que siento hacia ti, Zayn Malik, tiene que ser grande, de otro modo no dejaría que te montaras mojado a mi auto-

Paré en un semáforo. Lo siguiente que sentí fueron unos labios contra los míos. Sonreí. Seguimos con el beso hasta que una bocina detrás de nosotros, lo hizo alejarse de mí.

-¿eso por que?-

-para pedirte perdón por lo de la licra y lo del auto-

-si así son tus disculpas, entonces puedes dañar cuanta ropa quieras-

Una sonrisa pequeña se formó en sus labios, casi creando un hoyuelo.

-eso pretendo-

Lo miré y puse los ojos en blanco. Me encantaba ese pensamiento.