¿Zerrie? ¿qué es eso? I Could Be The One. (Zayn Malik y Selena Gomez)

I promise you.

Selena:

Lo vi ahí sentado, y no me pude resistir a hacerle una broma. Además, se veía tan guapo...simplemente me quedé embelesada viendo su perfil.

Caminamos juntos hasta la central, para poder tomar la conexión.
De nuevo, nadie se había percatado de que estábamos ahí.
Tomamos el vuelo sin ningún percance.
En el avión, me recosté sobre él, preparada para pasar en esa posición las siguientes cinco horas.

Después de la primera hora, ya no sabía que hacer: había estado en un avión demasiado tiempo y para colmo de males, Zayn estaba dormido.

La única entretención que tenía era observarlo. Y sí que era entretenido: sus labios se encontraban ligeramente abiertos. Su rostro se mostraba apacible, no había ni un solo vello en su rostro. Se veía tan joven...muy joven, de hecho, a su lado, seguramente yo me veía como su madre.
Sus pestañas parecían acariciar sus pómulos; eran muy largas. Su mandíbula era fuerte y bien definida. Su cabello estaba organizado hacia arriba, y no había ni un pelo fuera de lugar. Su nariz era recta, y las aletas de esta apenas se movían cuando entraba aire. Su cuello era largo y delgado, me daban ganas de acariciarlo. En el comienzo de su pecho había un tatuaje de un beso con alas, que se alcanzaba a ver por entre su camisa gris. Obviamente yo lo había visto antes, pero hasta ahora se me ocurría que sería buena idea darle un beso al dibujo de ese mismo. Seguí bajando, mirando su ropa. Tenía una camisa de cuadros por encima de la gris con los puños remangados dejando ver todos sus tatuajes; mis dedos picaban por poder acariciarlos, pero seguramente estaba cansado, de otro modo, seguro no se habría quedado dormido tan rápidamente...Así que solo me podía deleitar mirando.
Volví a subir a su rostro, y unos ojos café grandes, me estaban observando, curiosos.

-¿viste algo que te gustara?-

-absolutamente todo-

Él sonrió; eso era lo que me más me gustaba de él.
Su sonrisa era hermosa, porque lejos de tener todos los dientes perfectamente alineados, la forma en la cual esto se estaban acomodados, era armónica, sin seguir un patrón exacto. Sus colmillos eran más grandes que los incisivos laterales, pero más pequeños que los frontales. Sus dientes de adelante estaban juntos, y eran muy infantiles, demasiado tiernos.
Me encantaban.

-repito, ¿tengo comida o algo así?-

Parpadeé fuertemente.

-mierda, Zayn, tú sí que dañas los momentos...- suspiré, mientras subía los ojos, -no, solo que me encanta tu sonrisa-

Él sonrió más fuertemente, y no pude evitar darle un casto beso. De un momento a otro, me acordé de lo que había pensado hace unos pocos minutos.

El tatuaje del labio con alas.

Comencé a bajar mis labios por su rostro, hasta llegar a su cuello. Cuando terminé con este, llegué hasta su pecho, y repasé con mis labios su tatuaje. La respiración de Zayn se había agitado, pero ahora parecía que no respiraba; dejé un beso sobre el tatuaje. Era curioso, porque mis labios estaban rojos, y el tatuaje era también rojo, así que simplemente había acentuado el color de su tatuaje...con un vistazo rápido sería casi imposible notar que había algo raro en el pecho de Malik. Subí los ojos para encontrarme otros curiosos vigilando cada uno de mis movimientos. Sonrió.

-me hiciste falta-

Dijo, como si hubiera estado esperando para decir esas palabras y yo simplemente le hubiera dado una excusa para que finalmente las dijera.
Sonreí.

-tú a mí- le respondí.

Él me acomodó en sus piernas, y puso la barbilla sobre mi cabeza. Comenzó a tararear.