Surf.

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Zayn:

Seguramente me había enamorado de una loca, estaba cien por cierto seguro de eso.

Ah, así que ¿aceptas que te enamoraste? Le di un golpe con la mano a mi voz interna y la ignoré.

Selena agarró las dos tablas, e hizo un movimiento con la cabeza indicándome a que la siguiera. Tomé mucho aire.
Maldita sea, ni siquiera sé nadar, ¿Como pretende que haga surf? Ella me pasó una tabla roja y se quedó con la azul.

El mar estaba totalmente claro, se veía el fondo, y cerca de unas pierdas, a nuestra izquierda, se podían ver unos cuantos corales, muy pequeños, de colores.

-el primer paso es simplemente tirarla al piso-

-¿qué? Hermosa, ¿para qué quiero tirar una tabla de surf al piso?-

-pa pa pa pa, ¿quien es la que sabe montar?-

Preguntó, poniendo cara de suficiencia, a la espera de mí respuesta. Sonreí.

-tú...-

-¿quien no sabe?-

-yo...-

-entonces haz lo que te digo y tira la tabla al piso-

Subí las manos, como rindiéndome y solté la tabla. Ella hizo lo mismo con la suya, y se montó encima.

-¿Qué haces?-

-tú sólo haz lo que yo haga-

Dijo ella.

Me monté encima de mi tabla.

-me siento más idiota que cuando hice de Verónica....-

Mascullé.

-así que ¿prefieres vestirte de mujer que aprender a montar tabla con tu novia? Repito, ¿me debería preocupar?-

Preguntó con una deslumbrante sonrisa en el rostro.

Ella puso los dos pies sobre la tabla, y comenzó a hacer movimientos de como si estuviera surfeando. Yo la imité...juro que más de diez personas se nos quedaron mirando, seguro pensando que éramos idiotas.

-¿ves lo que hago con mis brazos? Es para el equilibrio-

Dijo, mientras agitaba sus brazos de arriba a abajo. Yo traté de hacer lo mismo.

-bueno, teniendo claro eso, vamos al agua-

Ella se lazó al mar, dejando que su abdomen cayera en la tabla, y comenzó a bracear. Mi respiración se aceleró y comenzó a hacerse irregular. No podía, no, ni en sueño iba a hacer eso. Sin embargo, verla sola en ese gran charco de agua salada, hacía que el corazón se me encogiera. Quizá ella tenía razón: no sabría si me gusta, si no lo intentaba.

Dejé la tabla en el mar, y me monté en ella. El agua estaba tibia, y la sal hacía que mis ojos ardieran. Selena me sonrió desde la distancia. Y yo braceé como ella lo había hecho...o por lo menos traté. Finalmente llegué hasta donde ella.

-bueno, ahora sólo hay que esperar una ola y montarla-

¿¿Qué??

Una gran ola se nos aproximó y ella se levantó sobre la tabla, con las dos plantas de los pies sobre la madera.

-bueno, paso 2, 3, 4 y 5: no te caigas, y si te caes, agárrate rápido de la tabla, para que no se la lleve la marea, ¿listo? vamos-

-¿¡qué!?-

No le entendí nada de lo que decía, yo solo me agarraba a la tabla como si de ello dependiera mi vida...lo cual era justo de lo que dependía. Mierda, me iba a ahogar, me iba a morir, y Selena nunca sabría que yo no quería a Perrie. Me iba a comer un pez, y de eso escribirían historias: de como el idiota cantante ingles, Zayn Malik, se ahogó por tratar de hacerle caso a su novia.

Ni siquiera a su novia, sino a la cantante Selena Gomez que quizá se encontró en la playa, dijo mi voz interna.

Eso me puso a reflexionar...si me pasara algo, nadie sabría que yo estaba con Selena, solo Niall, pero él no contaba. Me daban ganas de gritarle al mundo que yo estaba con ella, con la hermosa chica montando tan bien esa ola. Hablando de eso, ¿no se suponía que venía una ola o algo así?

Quizá...

No pude seguir pensando ya que una ola gigantesca se me vino encima, y me tumbó de la tabla. El agua hacía que mis ojos ardieran mucho, y no podía agarrar la tabla.

Era oficial: me iba a morir.

Traté de chapotear hasta la superficie, pero simplemente no podía. Mis manos se movían por todas partes tratando de buscar algo a lo que me pudiera agarrar, pero no alcanzaban nada. Finalmente unos dedos delgados se deslizaron por los míos, y me jalaron hacia arribar. Mis pulmones agradecieron el gran respiro de aire que tuvieron, ya que estaba plagados de agua. Mis ojos trataron de enfocar a la linda chica que me había salvado.

-te dije que no te dejaras tirar...-

Dijo ella, tratando de hacerse la enojada, pero era más que claro que estaba preocupada.

-¿estabas asustada?-

-obviamente, maldita sea, no salías del mar. Nos vamos ya para el hotel-

-no, quiero tratar de nuevo-

-no, Zayn, no siempre te podré sacar de la maldita agua, ahora vamos a la orilla-

-Selena, no, quiero tratar de nuevo-

le dije con voz seria. Ella alzó los ojos.

-¿qué te sucede? Prevé que tuvieras un complejo por ser el príncipe Eric y que yo te salvara como Ariel. Te digo algo amigo: no eres ningún príncipe-

-mis fans dicen que me parezco a Aladín-

Dije, sonriendo de la manera en la cual ella me había dicho que deslumbraba a la chicas.

-pues bien, Aladín no se muere ahogado-

-sólo déjame intentarlo una vez más, Sel-

-no te vuelvo a salvar, Malik, en serio que no lo vuelvo a hacer-

Se acostó en su tabla, y comenzó a bracear hasta la orilla.

Subí los ojos, y sonreí. Estaba preocupada. Por mí.

Me subí a la tabla, y traté de hacer lo que ella había hecho, y con mucha sorpresa, vi que no me caía de la tabla.
Ja, que buen equilibrio.
Me volteé, y vi que venía una pequeña ola. Me preparé para recibirla.
Tomé bastante aire, y miré hacia la orilla. Estaba Selena, sentada en la playa, sobre la arena. Le guiñé el ojo, y ella desvió la mirada. La ola hizo que al tabla se moviera, y finalmente, ocurrió lo inevitable...y caí en las profundas aguas del mar Egeo...de nuevo...

Esperé unos segundos, hasta que de nuevo, unos delgados dedos me rescataron. Pero bueno, esto ya estaba comenzando a volverse vergonzoso.

Apenas la vi, ya sabía cuales iban a ser sus palabra, antes de que las pronunciara:

-vamos al hotel, ya, Malik-

¿Zerrie? ¿qué es eso? I Could Be The One. (Zayn Malik y Selena Gomez)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora