10. Towers

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Colocar audio cuando avisé .

Estar con ellos cuatro por las calles de España me había hecho olvidar todos mi problemas, me iba a meter en problemas pero valía la pena.

—Todo esto es culpa tuya christopher.

—¿Porqué mía? —grita en tono ofendido y su respiración agitada.
Miro hacía atrás y me paro un segundo sintiendo como joel me hala.

—No te pares, nos van a linchar.

Corrimos algunos tres kilómetros más hasta que encontramos un camión de basura y nos escondimos detrás de él hasta que no habían restos de las fans que llevaban media hora siguiendonos y todo por culpa del frenton de Christopher, si, solo porque se detuvo a pedirle el numero a una chica que le gustó, maldito gato.

Luego de que no habían restos de chicas locas corriendo detrás de nosotros salimos hacia la calle y pedimos un Uber para que nos llevará a donde se haría el concierto de esta noche.

En fin, el conductor casi nos tira por el alboroto que hicimos, cual de todos más inmaduros.

El único que traía teléfono era Zabdiel y por lo tanto este reventaba con llamadas de Renato, pero ningunas fueron contestadas por medidas de seguridad hacia nuestro pellejo.

Unos minutos llegamos al Barclaycard Center luego de pagar, entramos y de inmediato vemos a Renato votando chispas por los ojos.

—¿ Donde rayos estaban malditos mocosos? ¡Solo faltan dos horas para el concierto! —gruñe dejándonos perplejos, este tío era tan gruñón.

No podemos evitar estallar en carcajadas, se veía tan gracioso pero nos callamos al ver como nos fulminaba con la mirada.

—Jessica encárgate de ellos —escuchar ese simple nombre me hizo que se me revolteara el estomago.

Me dí cuenta que ella estaba pegada como garapata de erick, quien me veía con mala cara, entonces recordé que desde esta mañana no lo veía y es suficiente para que mi sangre hierva.

—¿Ahora ella es niñera?, digo ya que se encargado de cuidar a erick todo el dia —el ambiente se puso tenso. Ella me ve burlona, erick serio.

— Olvídalo —masculla Renato rendedio, seguro quería evitar otra pelea como la de antes de ayer —vallan a cambiarse por el amor de Dios y tu t/n también acompáñame, jessica encárgate de lo que te dije— suspira.

Mucho mejor.

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Colocar audio babys.

—Te has pasado todo el maldito día con ella, luego de que me dejaste que ni podía moverme.

—Por favor cállate, me duele la cabeza y estoy cansado.

Tiro un grito ahogado por toda la rabia que tenia acumulada.

Ya estábamos en la habitación y eran como las dos de las mañanas, pero veníamos todo el camino discutiendo y hasta que no se me quitará esto que sentia no iba a callarme.

—¿Acaso eso me importa? O acaso te ha importado lo que me ha dolido a mi, estoy harta erick, demasiado harta.

Las lagrimas comienzan sin permitírselo, me sentía devastada.

—Te lo estoy advirtiendo, no me hagas enojar ¡Joder!

—Adelante, ven y golpeame una vez más hasta que me dejes sin aire y hecha mierda, hazlo.

Rueda los ojos y se entra al baño, pero soy más rápido y me pongo delante de la puerta prohibiéndole el paso, el toma una bocanada de aire.

—No me dejes hablando sola.

—¡Me tienes harto! —esa fue la gota que derramó el vaso.

—Ahh estás harto —exclamó sarcástica — pero yo no, yo no me harto de tus malditas humillaciones, de tus golpes, de este maldito infierno que estoy viviendo ahora, de cómo me pegas los malditos cuernos en mi propia cara, yo no me harto ¿Verdad?.

—Coño, ya basta...

Mi mano se estampa en su mejilla, no me importaban las consecuencias.

—Dejé toda mi maldita vida por ti y así es como me pagas hijo de puta —grito, él se queda mirando hacía bajo mientras acaricia su lado golpeado pero no hace nada —dejé mi familia, dejé mi sueño de ser diseñadora, todo mi futuro por seguir el tuyo, dejé absolutamente todo por ti y diez cachetadas al día es lo que recibo de tu parte.

Ya no soporto mas, lloro sin piedad.

Viendo como nosotros eramos torres que se derrumbaban cada día más.

Salgo de la habitación y camino por todos los pasillos hasta bajar al lobby, ignoro la voz de los seguridad de la banda y las de el.

Camino sin rumbo y sin importarme los riegos que me puedo encontrar a las tres de las mañanas en un país que desconozco, caminó hasta que veo un lugar de donde proviene música y veo el letrero que reza Torero de un color carmesí y brillante, sin pensar me adentro. Hay una pequeña pista con algunas parejas bailando, hay varias mesas y el Licor-store (La barra) que esta a la derecha, me dirijo hacía ella y me siento haciéndole unas señas al baltender.

—¿En que te puedo ayudar?—pregunta él chico sonriendo, tenía un acento argentino y era de tez blanca con unos ojos azules muy lindos, me acorde de erick, Dios.

—Quiero Vodka, la botella entera si es posible — él me mira sorprendído pero no objeta nada, solo la busca y la pone frente a mi con unos pequeños vaso de shot, sal y limón, también me regala una sonrisa apenada.

Ahogar las penas es lo único que me queda.

Narra Joel.

Continuara...

Amoressss perdón por la tardanza pero prometo recompensarlas connnnnnn

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Maratooooon, la próxima semana ya que salgo de vacaciones de la universidad y tengo esa semana libre uhuuuu.

1| UN MATRIMONIO DESTRUIDO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora