Destino Inseguro

Capítulo 24

Me miro en el espejo de cuerpo completo que hay en armario. me encanta lo que veo. El vestido se ajusta perfectamente a mi cuerpo, mis rizos están controlados y el maquillaje me quedo impecable. Me doy palmaditas en el hombro por el trabajo bien hecho. A través del espejo, veo a Steve aparecer en la habitación y se para a unos cuantos pasos de mí.

-¿Qué te parece? -Doy un giro y me paro frente a el. Sonrió para mis adentros la ver su reacción. Me mira de pies a cabeza con las pupilas delatadas y se humedece los labios con la lengua.

-Estas preciosa. -Acorta la distancia que hay entre nosotros y coloca un mechón de mi pelo tras mi oreja. -Por favor no bebas mucho y ten mucho cuidado con Verónica.

-Lo tendré, cariño. -Susurro y me premia con una enorme sonrisa de oreja a oreja. Oh. Le gusta que lo llame de esta manera. Lo veo por cómo le brillan sus impresionantes ojos verdes. -Te lo prometo. -Me inclino y le doy pico en los labios. -Además, estaré más concentrada en Verónica que en el alcohol.

Y hablo en serio.

-Bueno. -Suspira y me acaricia la mejilla. -Te acompaño hasta abajo.

Dicho esto, salimos del apartamento y nos metemos en el ascensor. Suspiro aliviada cuando no veo a Nick por ningún lado. Este hombre ya me eta poniendo los pelos de punta con sus repentinas apariciones y sus coqueteos. Sin mencionar que ya me a ocasionado varias peleas con Steve. Salimos del ascensor, saco mi teléfono del bolso y le mando un texto a Rose.

Yo: ¿Dónde estás? Ya estoy afuera esperándote.

Pulso "enviar" y jugueteo con el teléfono entre los dedos. Pasamos junto al botones que nos saluda con una amable sonrisa. Yo se la devuelvo junto en el momento en el que mi teléfono suena. Rose.

Rose: Estoy a unos cuantos pasos del edificio bebe. En tres minutos estoy ahí.

Yo: Bien. Te espero.

Guardo el teléfono en mi bolso con un suspiro y salimos a través de la puerta de cristal hacia la fría noche. Últimamente está haciendo mucho frio en la ciudad. Tiemblo ligeramente y Steve me rodea los hombros con sus brazos para darme un poco de calor. Miro detenidamente las calles y veo el coche de Steve esperándonos a Rose y a mí.

-Hace un poco de frio. Debiste haber traído una cazadora. -Steve mueve la cabeza negativamente y yo me estrecho contra el.

-Si. Hace un poco de frio, pero estoy bien. -Miro a todos lados en busca de mi pelirroja mejor amiga, pero no logro verla por ninguna parte.

-¿De verdad? Puedo subir y traerte una mía. -Steve interrumpe mi búsqueda y lo miro.

-Steve. -Le reprendo para zanjar el ridículo tema. Este hombre es un exagerado. Mira que subir otra vez hasta el apartamento a buscar una cazadora solo porque dije que tenía frio.

-Bueno. -Me da un beso en el pelo y mira a todos lados al igual que yo por si logra ver a Rose.

Rodeo a Steve por la cintura con mis brazos y apoyo mi cabeza en su pecho. Espero que cuando dice que va a estar aquí en tres minutos, sean tres minutos. Rose siempre usa esta táctica con los chicos cuando va a salir con ellos. Siempre les dice que estar lista en tres minutos cuando en realidad se refiere a quince, veinte o hasta media hora. Bueno. No me puedo quejar. Rose siempre ha sido puntual conmigo. Hasta ahora.

Trato de hacer un conteo mental de cuánto tiempo he pasado aquí afuera con Steve cuando de pronto la veo. Su flameante cabello rojo vivo jamás podría pasar de inadvertido. A medida que se va acercando a nosotros, veo que va vestida con un traje rojo ceñido sin mangas y algo escotado combinado con unos tacones negros. Esta impresionante. Como siempre.