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El náufrago en Robinson Crusoe

Robinson Crusoe, obra creada por Daniel Defoe en 1719, es una de las obras más conocidas y citadas de la literatura universal, teniendo mucha influencia en diversos temas como literatura, animación, cine, comics, economía, etc. La obra, originalmente titulada La vida e increíbles aventuras de Robinson Crusoe, nos presenta a un empresario ingles llamado Robinson Crusoe que decide hacer real su sueño de ser viajero a tierras extrañas y exóticas, a pesar de la oposición de su padre, metiéndose en varias desventuras de las cuales logra salir con vida gracias a su inteligencia y por no perder la esperanza.

La obra no solo enseña los típicos valores como la amistad, la igualdad, la persistencia y nunca perder la fe, sino que también es una crítica social al modo de ver el mundo de los europeos del siglo XVII y XVIII, ya que estos creían firmemente que el resto del mundo no conocido debía ser igual a ellos, no respetando ni valorizando la cultura y creencias de los demás territorios, representándose en la figura de Viernes, el indígena que se hace amigo de Robinson, aunque más que amigo, es en realidad un sirviente.

Pero el tema que ha llamado siempre la atención en la obra y que se tratara en este ensayo, es la del náufrago perdido en una isla remota que, al principio, parece estar deshabitada, y que este fue antes de dicho incidente, algún viajero importante o aventurero en busca de tierras exóticas. El concepto de náufrago, al parecer, surgió y evoluciono de esta obra hasta ocupar un lugar fundamental en la cultura popular, que se ha extendido a lo largo de los siglos y que es una figura muy tratada actualmente.

La figura del náufrago no se trató con tanta profundidad como en Robinson Crusoe hasta el surgimiento de esta novela. Anteriormente, el náufrago no fue nunca tratado en ninguna novela anterior a Crusoe, siendo una figura desconocida para el lector y el escritor. Nunca tuvo tratamiento ni idea por parte de españoles, portugueses o prusianos (actual Alemania) en esos años, ah ninguno de estos se les ocurrió que podían tratar el tema de un hombre o marinero que se pierde en una tierra remota o extraña, y como este sobrevive usando su inteligencia e instinto de supervivencia para superar varios retos imposibles, estando los escritores de estos países más enfocados en tratar temas como cuestiones morales de la sociedad, crítica social, obras en honor de su majestad, y seres fantásticos o mitológicos.

Defoe al escribir la novela se basó en la experiencia de un marinero escocés llamado Alexander Selkirk, que fue rescatado en 1709 tras pasar cuatro años en una isla desierta tras naufragar. También fue fuertemente influida por la novela del siglo XII, El filósofo autodidacta del árabe Ibn Tufail, en la que habla como el hombre puede salir adelante por sí mismo y sin ayuda externa.

Revisemos punto por punto. El protagonista, Robinson Crusoe, se pierde en una isla deshabitada, que luego se rebela que tiene como habitantes a caníbales, donde tiene que aprender a sobrevivir por su cuenta, recolectando cocos, frutas, ostras y madera, pescando peces para comer, fabricando armas para defenderse de posibles peligros y pescar, construir una especie de choza o lugar donde pueda dormir, sin perder la esperanza que algún día pueda regresar a la civilización. Todas estas actividades reflejan perfectamente el instinto de supervivencia del hombre, que lo llevan a construir un lugar seguro, fabricar armas y recolectar su propio alimento.

Gracias a Defoe, el concepto de náufrago es actualmente es uno de los conceptos más usados cuando de ficción o historia de aventuras se trata, teniendo de ejemplo en el cine a las películas Naufrago de Robert Zemeckis, protagonizado por Tom Hanks y basada en la obra, y La laguna azul de Randal Kleiser, incluyendo sus desastrosas secuelas o intento de estas. En los comics, el superhéroe de DC, Green Arrow o Flecha Verde, se pierde al principio de su historia en una isla deshabitada, donde aprende a sobrevivir fabricando de madera de palmera su arco y flecha que luego lo ayudarían a luchar contra el crimen. También se han creado parodias y caricaturas con el concepto de náufrago, teniendo en común todos estas obras, que los protagonistas usan su ingenio, inteligencia y persistencia para sobrevivir en un ambiente inhóspito, y de no perder las esperanzas de regresar a la civilización, tal y como hizo Crusoe en esa isla deshabitada.

Concluyendo, la novela de Defoe, Robinson Crusoe, creo el concepto de náufrago, y lo popularizo hasta llegar tal y como es el día de hoy, siendo uno de los referentes más conocidos y populares de la literatura moderna, siendo tratado casi siempre en novelas de aventuras y/o viajes.