Señor Malik

27: continuación

No sabía que decir, simplemente toda esta situación me había dejado descolocada. ¿Es que alguien sería capaz de ocultar a su propia hija?
Me quiero golpear. Tengo una madre que me vendió, no sé porque me asombra. El mundo cada vez está más perturbado.

Alex limpio rápidamente sus lágrimas y se puso de pie, imite su acción y me levanté sin entender su reacción, pero cuando ví a Mave llegar a mi lado todo cobro sentido.

-Lograste convencer a Jade de que no entrara a clases- dijo sonriendo con maldad- eres muy hábil amigo- río y golpeó a Álex en el hombro. Este asintió y río sin mucha gana.

-No es tan así, ella ya se iba- dijo y me sonrió. Se acercó a mí, beso mi mejilla y me rodeo por los hombros en un cálido abrazo- grácias- susurro en mi oído. Asentí y lo rodee por la cintura, devolviéndole el abrazo.

-Una gran pena, tenía pensado que podríamos salir a dar una vuelta- levantó una ceja y nos observo fijamente.

-Ya déjala en paz, tiene que ir a sus clases- le reprochó mientras me soltaba y me empujaba levente para que me fuera. Me despedí con la mano y me retiré de ahí en silencio.

Durante las clases no pude dejar de pensar en lo que alex me había contado. Pensaba y pensaba en una forma de poder ayudarlo, pero simplemente no pasaba una idea lo suficientemente buena como para poder ayudar.

Narra Alex:

-¿Es que acaso te interesa?- preguntó Mave sosteniendome con fuerza por el brazo cuando quise pasar de él.

-¿Te volviste loco?- pregunté soltandome con fuerza de su agarre- Sabes que mis ojos están puestos en otra parte- lo empuje- también sabes que solo quiero cuidarla de ti- caminé por su lado llendome lejos.

-Nada de esto durará mucho, Smith, lo sabés- gritó y me gire a verlo, parecía feliz con todo lo que estaba sucediendo- tarde o temprano caera- susurro y una sonrisa malévola apareció en su rostro. Inale con rabia y me acerque a él.

-Sabes que tiene esposo y a él no le costará mucho acabar contigo- sonreí porque me hacia feliz la idea de alguien destruyendolo.

-Sabes que me importa una mierda- río y se fue dándome la espalda.

¿Cómo es posible que de un momento a otro alguien se vuelva tan insoportable? ¡Ah, si! Por el dinero, el estúpido dinero.

Flashback

-entonces la mujer rubia me ofreció mucho dinero- sonrió- solo por acostarme con Jade- se encogió de hombros y se lanzó sobre mi cama.

-¿estás loco?- pregunté mientras caminaba hacia él. Esto era totalmente absurdo- espero que no estés pensando en aceptar- lo observé  y no estaba seguro de su expresión.

-Es mucho dinero- se puso serio- a diferencia de ti, yo no tengo un padre multimillonario que me pague la universidad- se levantó y comenzó a jugar con una foto familiar que tenía sobre mi mesa de noche- no todos tenemos la dicha de ser hijos de Miguel Smith- sonrió irónicamente y dejó la foto en su lugar.

-Esa no es una excusa- coloque la foto de forma correcta- sabes que te podría ayudar con eso, no tienes que hacerle daño a las demás personas solo por tu beneficio- coloque mi mano sobre su hombro, pero él se alejó.

-No quiero otra de tus limosnas- su expresión era tan extraña para mi y eso era raro, ya que lo conozco desde siempre- ¡no quiero seguir viviendo a tu sombra!- grito mientras tomaba nuevamente la foto y la lanzaba lejos.

-¡Quiero que salgas inmediatamente de mi casa!- grite más que enfurecido, esto ya había excedido todos los límites de nuestra amistad- ¡no quiero verte nunca más! ¡Tampoco quiero que te acerques a las chicas!- lo empuje con fuerza, logrando moverlo hasta la puerta.