Segunda Generación #MUGC4

Capítulo XXIV

Viernes, 17 octubre 2036

Los días habían pasado algo lentos y monótonos, pero sabíamos que nos quedaba poco para las vacaciones, o eso queríamos creer. Bachiller era algo más complicado que la ESO pero no me estaba yendo nada mal. Mis padres siempre nos habían ayudado a la hora de estudiar, haciéndolo menos pesado. Faltaba poco para llegar a la universidad y tenía que esforzarme al máximo. Al llegar un nuevo día, me desperté con ganas ya que era viernes. Tendría por fin el fin de semana para descansar y la fiesta de las mellizas para disfrutar. La ducha me reconfortó y me espabiló del todo. Me vestí rápidamente y baje a desayunar. El desayuno fue muy agradable, mi padre me contaba sus anécdotas de profesor. En cuanto bajo mi hermana, me marche con Leo y Paula. En su casa, Paula estaba discutiendo con su madre sobre alguna tontería. Llego Ruben y la discusión se aplazo, ya que Paula centro su atención en nosotros.

Paula: Mi madre no se cansa de reñirme, se ha tenido que convertir en su deporte preferido.

Leo: Sois las dos igual de cabezonas, como se nota que sois madre e hija.

Yo: Eso se lleva en los genes por lo que se ve, menos mal que no tengo que pelear con mi madre.

Ruben(Jr): Ya tienes bastante con las peleas de tu hermana. Que cansancio nada más pensarlo.

Yo: Pues imagínate en mi puesto, estoy más que cansado de mi hermana y de mi tío.

Leo: No entiendo por qué Aitor está pasando tanto tiempo en tu casa si no aguanta a tu madre.

Ruben(Jr): Lo hará para poder estar más tiempo con Cris, es su protegida desde siempre.

Yo: Lo hace por mis abuelos, a ellos les gustaría que se llevaran mejor.

Paula: Misión imposible, a tu madre no le hace gracia la vida que lleva Aitor y lleva algo de razón.

Yo: No sé cómo puede aguantar esa vida de fiesta, un día va a tener un susto gordo.

Ruben(Jr): A él le gusta su vida y eso no se puede evitar. Ya cambiará con el tiempo.

Paula: A mi tampoco me hace gracia que esté todo el tiempo con Cris. Él apoya todas sus ideas aunque sean una locura.

Leo: Lo que faltaba, alguien que le diera más mecha a Cristina. Como si ella no tuviera bastante.

Yo: Aitor es insoportable, yo no lo aguanto. Estoy deseando que se acabe la tontería de pasar tanto tiempo en casa.

Paula: Se cansará dentro de poco, Aitor no es de costumbres y en casa de tus abuelos está más cómodo.

Ruben(Jr): Para no estarlo, tus abuelos le permite todo. Creo que no se ha llevado una bronca en su vida.

Yo: Alguna sí que se ha llevado, sobre todo por parte de mi abuelo, pero no ha servido de nada.

Paula: ¿Se cansara Cris de él? Apenas me hace caso y la noto algo molesta.

Yo: Habla con ella, a ti te hace algo de caso. Eres como una hermana para ella.

Paula: Está molesta conmigo, lo intuyó. Creo que es porque ya no la apoyo en sus ideas contra Silvia.

Ruben(Jr): No tienes porque aguantarlo, te puedes venir con nosotros siempre que quieras.

Paula: Gracias pero no puedo dejarla sola, ella siempre ha estado conmigo cuando lo he necesitado.

Mi primo Leo le dio un beso y Paula cogió sus cosas para marcharse. Nosotros nos marchamos a continuación, haciendo nuestra ruta diaria. Los ambientes estaban animados, se notaba que todos deseaban que llegase la fiesta de por la noche. Las clases no fueron del todo malas, nos sirvieron de ayuda para los trabajos y los exámenes que estaban por llegar. En el momento en que sonó la última campana, salimos todos corriendo como si de una carrera se tratase, mezclandonos entre el bullicio de los pasillos. Salimos a la puerta y empezamos a conversar mientras caminábamos.