Capítulo XLV

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Domingo, 15 marzo 2037- Narrado por Aitor

Mi dolor de cabeza aumento en cuanto me desperté, la fiesta de la noche anterior había sido brutal. No sabía cuantas copas había bebido para celebrar mi cumpleaños. Aparte de que no se cumplían 22 años todos los días. Olía a alcohol, así que me tome una pastilla y me metí en la ducha. Sabía que mis padres me esperaban para ir a la casa de mi hermana a celebrar mi cumpleaños con la familia. Ilusión tenía poca pero no podía hacer nada. Mi hermana me caía fatal, era una sabelotodo y perfecta en todo lo que hacía, menospreciando a los demás. A mis padres les tenía comiendo de su mano, por eso llevaba la organización del estudio. Mi sobrino no se quedaba atrás, idolatraba a su madre y no veía las fallas que tenía. Menos mal que Cristina era diferente y que defendía su verdad con uñas y dientes. Al bajar, mis padres ya tenían su cara larga y sabía que me iba a tocar aguantar su riña cansina.

Norykko: Buenos días mi niño, ¿a qué hora llegaste ayer? No te escuche entra.

Yo: No me acuerdo mamá, estuve celebrando mi cumpleaños y no fijándome en la hora.

Santaflow: Si para ti celebrar tu cumpleaños es beber hasta no poder más, eso no es vida.

Yo: Papa no empieces con tu charla de siempre, yo sé lo que hago con mi vida.

Santaflow: ¿Y quieres que te crea? Estás yendo por el mal camino y me preocupo por ti.

Yo: Dejame en paz, ¿vale? Bastante tengo con tener que ir a casa de Cristina a comer.

Norykko: Es tu hermana y debería dejar de pelear con ella, Cris te quiere mucho.

Yo: ¿Me queréis dejas en paz de una maldita vez? Sois muy pesados.

Santaflow: Somos una familia y deberíamos estar unidos, solo te va a quedar ella cuando nosotros faltemos.

Norykko: Que pasará dentro de mucho, pero algún día pasará ya que no somos inmortales.

Yo: Por mucho que me lleve mal con mi hermana, siempre tendré a mi lado a mi sobrina.

Santaflow: Pero Cris va a querer estar con sus padres y su hermano, ¿la vas a separar de ellos?

Yo: Claro que no papa, no sería capaz de ladearla solo porque yo no aguante a su madre.

Norykko: Pero es que las cosas se pueden arreglar, no es tarde para que habléis.

Yo: ¿Queréis hacerme un buen regalo por mi cumpleaños? Dejar el tema y vámonos ya.

Salí hacia el coche y mis padres me pillaron la indirecta, ya que salieron detrás de mi. El camino fue silencioso y mi cabeza lo agradeció. En cuanto llegamos, mi sobrina vino a felicitarme y a darme un abrazo. Era a la persona que más quería, desde pequeña era mi princesa. Luego vino Paula, Noe y Ana, muy amables las tres. Me tuve que acercar a los demás y recibí las felicitaciones correspondientes. Mi hermana miro de reojo a Carlota y a Mónica, sin saber lo que pasaba. Abrí todos los regalos juntos pero no entendí el regalo de mi hermana, con todos los regalos que me podía regalar, me regaló un llavero. Mi hermana no era tacaña, aunque no nos llevábamos bien, siempre me había hecho regalos muy buenos. Comimos todos tranquilos, sin ninguna pelea de por medio. Al terminar, mi prima Carlota me pidió que fuéramos a la salita para hablar, apareciendo mi hermana, mi tío y mis primos Ana, Marco y Mónica, haciéndome una encerrona.

Yo: ¿Qué he hecho ahora para que me tengáis que hacer esta encerrona?

Aitor(Sr): No es eso, ¿quieres escucharnos antes de juzgar? Esto es algo positivo.

Marco: Bastante castigo debes de tener con la resaca que debes tener por todo lo que bebible ayer.

Ana(Sr): ¿Otra vez, Aitor? ¿Cuándo te vas a controlar con el alcohol?

Segunda Generación #MUGC4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora