327. Diana

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Diana, 15 años

Hola de nuevo, en realidad, no sabía si escribirles a ustedes o a Claire pero fue gracias a esta hermosa iniciativa que comprendí muchas cosas y descubrí que puedo salir adelante (Ya saben, eso de "Si estás atravesando un infierno, sigue caminando"), por eso y mucho más estoy plenamente agradecida con ustedes.

Ahora bien, estoy teniendo algunos altibajos pero tengo fe de poder dejar todo atrás. Reitero mi historia: He sido acosada hasta en mis círculos familiares y me he sentido tan mal que he considerado hasta la forma más extraña de desaparecer.

Y sí, por desaparecer me refiero al suicidio.

No sé si estoy siendo exagerada pero en el momento en que tu hermana llora porque tiene hambre y no tienes para comer parece la mejor salida. Busqué definiciones, métodos y las diferencias del cielo y el infierno una y mil veces, pues siempre he creído en Dios y tenía miedo.

En mi caso, me refugié en mis creencias, seguí en mi colegio privado que dista mucho de ser perfecto con las mismas personas que conozco desde muy pequeña; seguí tratando una y otra vez de mejorar pero nada daba resultado.

Hasta que algo sucedió, mi mamá (la única persona en este planeta a la que le confiaría mi vida, mi razón de ser) se dió cuenta de lo que sucedía y no se rindió hasta hacerme hablar, porque cuando estás llena de cicatrices una alarma titila en la mente de quienes quieres y solo pocos siguen adelante.

¿Saben? Si hay algo que todos temen es la palabra suicidio, es considerada trágica y surrealista, como que nadie la toma enserio hasta que sucede. He aguantado hambre, me he quedado dormida a base de pastillas que no me causaron mucho más que fatiga intensa durante todo un día y muchas nauseas (anécdota real que, depende de como se cuente, es incluso graciosa); pero aún así nadie se había percatado de eso.

En fin, uno vive esperando ser rescatado cuando la verdad los únicos que podemos salvarnos somos nosotros y lo único que de verdad necesitamos es ser escuchados, cuando alguien te escucha sin juzgarte, te permite soltar lo que llevas dentro y te deja ser, es que aprendes a evaluar tus propios problemas y cómo solucionarlos.

Así que decidí que si quería tener mis cosas, las iba a conseguir yo misma. Que si quería ayudar a mi familia, debía encontrar la forma de hacerlo. Porque si hacemos lo mismo una y otra vez y no da resultado, tenemos que cambiar.

Saltar al vacío.

Puedes chocar o salir volando, pero por lo menos habrás dado un paso y si te caes tienes la opción de levantarte y seguir caminando.

Vivo en Venezuela, donde el sueldo mínimo está en 1.300.000bsf (cifras inexactas, hay profesores que ganan más/menos) y un kilo de carne cuesta 700.000, un cuaderno para las clases 400.000bsf.

La parte monetaria es un claro problema también, somos cuatro personas (dos de ellas niñas) y cada día es mas difícil seguir.

Aquí está mi primer cambio: Dejé mi Colegio (Da igual, mis mejores amigos se fueron a U.S.A), ahora estoy estudiando en un liceo nocturno cerca de mi casa.

Anteriormente daba tareas dirigidas, ahora estoy trabajando en una papelería todo el día y de allí me traslado a mi liceo.

No ha sido fácil, pero ahora puedo aportar mi parte para seguir adelante, ¿No?

Es frustrante, sí, el observar como el mundo en el que vives parece arder y las personas desaparecen a tu alrededor (hablo enserio, cada día más amigos y familiares se van del país); a veces siente que das y das.... ¿Para qué?

Pero seré sincera, no me había sentido mejor desde hace mucho; ver que puedes avanzar y que en el camino, cuando tomas tus propias decisiones y no te riges de lo que exigen los demás (claro está que los consejos no vienen mal), es cuando más realizado te sientes.

Estoy estudiando con personas mayores que yo, puesto que es liceo de adultos y jóvenes; pero he hecho mejores amigos que en lo que llevo de vida (sin menospreciar a los otros), quiero crecer, quiero avanzar, y no lo voy a lograr sentada llorando en mi habitación.

Ernest Hemingway escribió: "El hombre derrota. El hombre puede ser destruido, pero no derrotado"

Me he caído y me sigo cayendo, a veces lloro escondida en un rincón de mi habitación y siento que mi mundo se disuelve hasta que me siento nada, pero me arrastro, me apoyo en personas maravillosas a mi alrededor que poco a poco me ayudan a volver a ponerme de pie.

Sigue, sigue, sigue y no te rindas; esfuérzate, toma riesgos y apóyate en los puntos de luz a tu alrededor que te guiaran, nada es fácil, pero todo es posible.

Hoy me siento optimista, no sé mañana, pero sé que cuento con personas que me ayudarán y tú también lo haces, no estamos solos, tenemos el poder de comernos al mundo si queremos, solo tienes que creer, confiar en ti y esforzarte (porque con soñar no basta, tienes que trabajar por tus metas).

Nuevamente les agradezco de todo corazón y siempre pueden contar con mi admiración y apoyo.

Les quiere,
Diana.

P.D: No sé si ellas vean esto algún día, pero agradezco mucho a estas personas: Mi tocaya, Gabs, Isabella, Nao, Erik, Daniela, a mi prima Dani, a mi mamá y hermana (ellas si no tienen wattpad pero es lo justo). Son personas que siempre contaran conmigo y viceversa.

P.D de la P.D: (No lo resistí) Más que quererlas, les amu, son las mejores personas del mundo mundial.

BULLYING STOPS HERE #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora