ΦXIΦ

820 59 5
                                    

  Ese es. Es el departamento de Wonho. Se sabe su número, el 303. Ha ido ahí para sorprenderlo y ser ella quién lo visite esta vez. Tocó un par de veces la puerta del departamento, y en otro abrieron la puerta. Era un tipo de más de treinta, un par de tatuajes en los brazos y sin camisa, cogiendo una bolsa de basura que había tirado a su espalda. Miró a Minah, comiéndosela con la mirada...

- ¿Qué haces por aquí guapa? – le dijo al cerrar la puerta de su departamento. Minah tragó saliva y trató de ignorarlo. - ¿te perdiste? – se rió solo, fijándose en la bonita falda que Minah traía debido al uniforme de su trabajo. – no quieres... - se le acercó un poco y Minah apartó la mirada sin discreción. - ¿compañía?

- ¿Quieres algo con ella, Joe? - Wonho abrió la puerta de su departamento. – aléjate ¿vale?

Joe soltó una risa ahogada, sin dejar de mirar a Minah como el plato favorito. Le asintió a Wonho y siguió su camino. De pronto se fijó en Minah. ¿Pero qué demonios hacía ahí? ¿Qué no sabía que terreno estaba pisando? No podía llegar así, de un momento a otro sin avisar. Joder... pero que inocente era...y eso lo podía percibir totalmente al mirarle los ojos... era preciosa, Inocente, Pura. ¿Cómo? ¿Cómo es que había llegado a estar entre los brazos de ese hombre? Él fuego, ella agua... distintos...

- ¿Qué haces aquí? – le preguntó él. Y parte de su enfado ahora, era por ella. Por la descabellada idea de aparecerse ahí sin antes avisarle.

- Quise venir a verte, salí antes así que...

- ¿Por qué no me avisaste?

- No pensé que te molestaría.

- Me molesta.- le dijo frío. Minah sintió una oleada fina de inquietud en su interior. – no me gusta que aparezcas sin antes a verme a visado.
Ella puso los ojos en blanco.

- ¿Por qué? – le retó, levantando una ceja y Wonho endureció los pómulos. Que dulce e insoportable podía ser cuando se lo proponía. – tú apareces en mi casa sin decírmelo antes, pero yo no puedo...

- Porque no y no quiero que vuelvas a hacerlo. Han podido hacerte de todo ahí afuera, este lugar es peligroso.

- No importa... - se le acercó lentamente. Las distancias se acortaron. Ahora estaban juntos y Minah podía percibir su olor una vez más. Jugueteó con los bordes de su camiseta y levantó la mirada para así poder encontrarse con los bonitos ojos de Wonho.

- Sí importa.

- ¿Estás molesto?

- No quiero que vuelvas a entrar a mi casa de esa forma.

Ella volvió a blanquear los ojos, esta vez rendida. ¿Pero qué le pasaba a Wonho?

- Si es por el tema de tu calle, yo sé defenderme muy bien sola.

Wonho se rio por dentro.

- Es por otra cosa.

- Tus amigos ¿cierto? Vale... no quieres que te vean conmigo.

- ¿Te has puesto a pensar en lo que dices? Se les caería la polla si me ven junto a ti. No se lo creerían.

A Minah se le subieron los colores. Sintió la mirada de Wonho por toda su anatomía al bajar la mirada.

- ¿Entonces...

- No me gusta que vengas, solo...solo eso.

- Vale, entonces tú tampoco te aparezcas por mi ventana nunca más.

- Tú no entiendes mis razones.

- ¿Enserio? – ella se rio sarcásticamente. – pues no quiero saberlas. – cerró los ojos con fuerza y al abrirlos se encontró con los de Wonho. Estúpido Wonho, Lograba sacarla de quicio rapidísimo. – no me aparezco más por tu casa. Y perdóname, seguro has estado follando con otra tía antes de que llegara. No quise interrumpirles. – Minah trató de irse, caminando en dirección a las escaleras.

TENTATION I | II | III | IV [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora