Momentos confusos.

151 26 57
                                    



El Error.


Parte II.



ENCUENTROS CASUALES, RARAS POSIBILIDADES.



"Cómo un largo sueño,

cómo una estrella

yo esperaré por ti.

Nadie más en este mundo,

nada es mejor que tú. "



Kiss kiss / Kim Hyun Joong



Capítulo 6. -Momentos confusos.



La universidad no era muy grande. Al menos no tanto cómo la había imaginado. La habitación que compartiría con algún chico (aún no le habían asignado uno al parecer) era agradable. Respiró hondo. Sus trámites prácticamente habían finalizado. Sólo le restaba confirmar su clase extracurricular y listo. Se encaminó hacia la oficina de inscripciones concentrado en la serie de papeles que llevaba en las manos. Alguien pasó a su lado pero no prestó atención. De pronto se detuvo en seco. Levantó la vista, ansioso, cómo si alguien hubiese susurrado su nombre muy suavemente. Su corazón vibraba agitado, ¿qué era eso? ¿Acaso sería...? Buscó con la vista. Siguió a su instinto y caminó hacia la oficina. Su corazón no frenaba. Buscó ansioso con la mirada, pero sólo estaban la secretaria y un muchacho de cabello largo atado en una coleta, a quién miró de espaldas. Seguramente acababa de llegar. - ¿Cómo van las inscripciones a vocalización? - preguntó el chico. No escuchó la respuesta. Volvió a salir pero la sensación había pasado. Regresó a la oficina. La secretaria se encontraba ahora sola. Levantó la vista y le sonrió. Jun volvió a buscar con la vista. Con una extraña emoción en el pecho. Estaba seguro que su alma gemela se hallaba muy cerca. Pasó saliva, la secretaria comenzaba a verlo extraño. - ¿Puedo ayudarte en algo? - Preguntó. Jun recordó entonces a qué había ido hasta ahí.


- Oh, sí. Vengo a inscribirme a las clases de teatro.


- Oh, lo siento - dijo la secretaria con un gesto compungido - pero los lugares a esa clase ya están llenos, sólo queda lugar en vocalización.


- ¿Qué? ¿En serio? ¡Pero yo quiero teatro!


- Ya te lo dije, hijo, sólo hay lugar en vocalización, lo tomas o lo dejas.


Hyung Jun suspiró. Necesitaba forzosamente una clase extracurricular - ¿vocalización? ¿Qué clase de materia es esa?


- ¡Omo! El profesor es muy bueno, puede que descubras que te gusta más de lo que imaginas. Así que ¿te inscribo?


Jun suspiró, no le quedaba otra opción. Se inscribió y salió de ahí, dejando que sus pies lo guiaran por la universidad.



*******


Salió de la oficina por una puerta contigua, ensimismado. Los sueños volvían a ser frecuentes y él creía que ya habían pasado. Dejaban un hondo pesar en su pecho. Una tristeza que parecía aniquilarlo. Intentó hacer de lado ese asunto, concentrándose en sus clases. La secretaria le había dicho que no había muchos interesados, pero que ella le ayudaría a tener el mínimo de alumnos. ¿Vocalización? Vaya materia. Sólo a él se le ocurría. ¿A quién le interesaba cantar? Sonrió con tristeza. No lo entendía. La tarde anterior por fin le había pedido a Sun Hee que fuera su novia y ella había aceptado. Era la chica más bonita de la escuela. Inteligente y cualquiera estaría loco por ella. También él. Se le declaró y la besó. Y no hubo mariposas, ni luces artificiales, ni la necesidad de retenerla para siempre. No hubo nada de eso que había dicho Hyun. Pero ¿él que sabía? No había tenido una relación seria en años y todas esas cosas eran patrañas de novelas. Las cosquillas en el pecho, la electricidad recorriendo el cuerpo, nada de eso sucedía. Una relación era una relación y punto. Se fortalecía con la convivencia y quizás con el tiempo se llegaba al amor. Quizás. Pero no entendía esa congoja en su pecho. Tenía ganas infinitas de llorar. Cómo si algo perdido no pudiera ser encontrado. Sus pasos lo guiaron a través de los pasillos. Llegó a unas aulas que en esos momentos se encontraban vacías. Se puso frente a un gran ventanal y se recargó en el borde. Su imagen se reflejaba sobre la superficie del cristal, pero no quería ver su rostro lleno de tristeza. Un susurro llevó su nombre. O tal vez lo imaginó. Aun así levantó el rostro. Entonces lo vio. A través del reflejo de la ventana. A aquél chico con rostro sorprendido mirándolo fijamente. Sus ojos se cruzaron y pareció una eternidad. Iba a volverse cuándo sintió a alguien tomando su mano. - Jung Min, te estaba buscando. - Era Sun Hee, quién se lo llevó tras ella sin percatarse que (cómo sucediera hacía muchos años) Jung Min volvía el rostro intentando mirar de nuevo a aquél chico del reflejo.

"El Error"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora