Paso a pasito.

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Capítulo 20.- Paso a pasito.


- ¡Oppa! ¿Es que vamos a estar todo el día siguiendo a ese chico?



- ¿Seguirlo? Claro que no, linda ¿por qué habría de seguirlo? Coincidimos en los mismos sitios, eso es todo.


- ¡Pero oppa!


Jung Min no hizo más caso, aunque Sun Hee tenía razón. En el tiempo que llevaban en el parque, no habían hecho más que "coincidir" con Hyung Jun y Bae Hwa. Ante la exasperación del primero y la inconformidad del segundo. Aún así, Jung Min no cejaba en su empeño. No iba a dejarle el camino tan fácil a Bae Hwa. No lo haría.


- ¿Pasa algo?



Jung Min, vio irritado, como Hyung Jun se colgaba del brazo de Bae Hwa. Estaban ante la casa de los sustos, y al parecer era el juego al que pretendían subir.


- La verdad, Bae Hwa, me da miedo.


El chico se creció hasta las nubes sintiéndose valiente. El muy idiota. Jung Min no lo soportaba ni de lejos. - No te preocupes Jun, conmigo estarás a salvo. - Rodeó sus hombros y se dirigieron a la fila. Jung Min crispó los puños.


- Linda, asustémonos un poco.


- ¡Pero yo no quiero subir a esa cosa!


- Anda linda, no tengas miedo. - Y sin más la llevó con él. Quedaron formados justo detrás de los otros dos chicos. Jun, al verlo, hizo una dengue de disgusto. Al llegar a los carros que los pasearían por dentro de la casa, cada pareja eligió el suyo. Sun Hee y Jung Min se hallaban ya juntos, pero Bae Hwa estaba aún de pie buscando algo en los bolsillos. - Por aquí lo tenía... - murmuraba.


Jung Min evaluó la situación. Bae Hwa, dentro de esa casa, podría aprovecharse de un asustado Hyung Jun. No podía permitirlo.


- ¡Una araña! - Gritó de pronto y se levantó, poniéndose a resguardo de Bae Hwa.


- Aish... ¿Ahora qué? - Preguntó el chico, molesto.


- Le tengo fobia a las arañas, ¡mátala! - Y le metió un empujón hacia el carro donde Sun Hee veía todo con furia.


- Mejor me voy aquí. - Se sentó junto a Hyung Jun y antes de que Bae Hwa pudiera protestar, el encargado del juego le advirtió que subiera, pues iba a empezar a funcionar.


- Pero...


- Suba...


Bae Hwa no tuvo más remedio que subir con Sun Hee. Lanzando a Jung Min una mirada de pocos amigos. El juego comenzó a moverse, yendo el carro de Jun y Jung Min por delante. Entraban a la casa uno por uno, para así lograr el objetivo de asustar. El recorrido fue tan bobo que a Jung Min le hubiese aburrido si no fuera con Jun, quién al parecer no pensaba lo mismo, pues con cada personaje que saltaba de la nada, lanzaba un grito y se aferraba a su suéter. Después de un zombie, Jun mandó su renuencia al demonio y ahora estaba ahí, colgado del brazo de Jung Min y oculto en su hombro. Jung Min sonrió triunfal. Eureka.

"El Error"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora