Alcanzando metas

Capítulo 27

Narra Tom

Tras insistirle desde ayer finalmente aceptó salir conmigo, teniendo en cuenta que tuve una pequeña ayuda extra, la de su madre. ¿Hay alguna razón para que insistiera tanto? Si, quería ser su amigo. Al principio el camino fue en silencio pero después una vez que empezó a hablar fue cogiendo más confianza y a soltarse más. Me enseñó el pleno centro de Madrid; la puerta del Sol, la plaza mayor, Callao, la zona de los musicales y los teatros que no me acuerdo como se llamaba; de ahí nos fuimos para el Retiro, este parque ya lo había visto antes en la tele pero era más grande y bonito verlo en persona que en la pantalla. Caminando por el parque se me iluminó la bombilla al ver las barcas, me disculpé un momento mientras iba a hablar con el señor que llevaba esto.

Tom: disculpe, ¿podemos montar en las barcas?

Señor: estamos a punto de cerrar

Tom: por favor, quiero sorprenderla-me inventé lo primero que se me ocurrió-esta es nuestra primera cita

Señor: ¿sabe cuántas parejas vienen aquí?

Tom: imagino que muchas

Señor: imagina bien

Tom: por favor, es la mujer de mi vida-le supliqué

Señor: mm, está bien-accedió-solo una vuelta y largo

Tom: muchas gracias-había colado, algo era algo

Obviamente sospechó de mi tardanza, no me creyó que solo le dije que no le había dicho nada  pero eso ya es otro tema. La ayudé a montar en la barca y me encargué de remar, dimos la vuelta al lago lo más despacio que pude controlando la hora, el señor era capaz de dejarnos ahí donde estábamos. Se la veía muy relajada contemplando el paisaje, estaba para una foto así que disimuladamente saqué el teléfono haciendo que miraba la hora.

Lore: ¿me estás haciendo una foto?-preguntó riendo

Tom: estaba mirando la hora

Lore: ya, ya

Tom: si tanto quieres nos hacemos una juntos

Lore: hazte un selfie

Tom: por favor, solo una foto y prometo dejarte en paz

Lore: ¿de verdad?

Tom: si-nos pusimos para la foto, se sentó a mi lado mirando para el lago de forma que quedábamos en una posición bastante graciosa-quedó bonita-refiriéndome a la foto

Lore: salgo contigo obvio que queda bonita-dijo egocéntrica

Tom: ¿quién es ahora la egocéntrica?

Lore: tú

Tom: es la hora-remé lo más rápido que pude para volver a la orilla. Era bastante tarde y mañana lunes, aunque no quisiera teníamos que regresar a casa.

El camino lo dedicamos a hacer el tonto, más bien por mi parte pues ella lo único que hizo fue reírse de todas las estupideces que se me ocurrían. En el metro estábamos tan cansados que hubo un momento en el que recostó su cabeza sobre mis hombros, instante que aproveché para acercarla a mí.

Lore: ¿te estabas tardando?

Tom: es para no perder la costumbre

Lore: será eso, estoy agotada

Tom: a lo tonto caminamos casi cuatro horas

Lore: pues cumplí mi parte, ahora te toca a ti no tocarme las narices

Tom: hasta mañana

Lore: me has engañado...

Tom: no te engañé, te dije que te dejaría en paz pero no especifiqué hasta cuando-resopló

Lore: tuve que verlo venir

Desde la parada del metro hasta nuestras casas la distancia era poca, así que en menos de cinco minutos llegamos a nuestro destino.

Tom: gracias por haber salido conmigo hoy

Lore: ¡de nada! En el fondo he de reconocer que me lo pasé mejor de lo que esperaba

Tom: te lo dije

Lore: todavía no me dijiste porque has insistido tanto

Tom: si te lo dije, nos lo pasamos mejor en las barcas

Lore: haré que te creo

Tom: quiero ser tu amigo

Lore: vas por buen camino

Tom: ¿eso es qué te caigo bien?

Lore: estás en proceso de caerme bien-hice un gesto raro

Tom: descansa gatita. Y no sueñes conmigo

Lore: sería una pesadilla

Tom: sabes que no

Me fui acercando a ella hasta darle un beso en la mejilla, noté que se ruborizó y volví a darle otro beso en la mejilla

Tom: cuando te sonrojas estás preciosa-le susurré

Lore: buenas noches Tom-entró en su casa, acto que imité con una sonrisa en la cara

Nuevo capi! Aquí está la continuación de la cita, ¿qué os parece? Mañana el siguiente