Capítulo 122

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Narra Alba

Lo que no camino normalmente a diario lo caminé hoy todo junto, menuda caminata nos pegamos los dos, podemos resumir que fue el día de visita a museos aunque en el museo británico aprendimos cosas interesantes. En el de cera nos reímos un poco ya que había algunas figuras que no se parecían en nada. Después de todo el día volvimos para el hostel a eso de las ocho de la tarde, hacía frío, estamos cansadas y hay hambre, al menos por mi parte. Claro que no contaba con que el de recepción de ayer nos preguntara que tal el día, ya que en la habitación no hay wifi pues decidimos quedarnos por la sala de estar/bar que es donde están las mesas.

Chico: ¿qué tal el día?-la conversación transcurre en inglés

Lore: ¿es a nosotras?-asintió-pues bien

Chico: ¿visitasteis mucho?

Alba: lo que nos dio tiempo

Lore: sobre todo museos, estoy deseando ver el London Eye mañana

Chico: esa zona es la más bonita de Londres-mirando para mí, ¿qué carajos mira?

Alba: mañana hablamos-dije cortante

Lore-mirándolo con pena-: lo que quiere decir es que mañana cuando lo compruebe por sí misma ya dirá

Chico: ah vale, si necesitáis algo me toca el turno de noche

Alba: lo tendremos en cuenta

Lore: hasta luego

Una vez que se fue a atender a unos que llegaban suspiré aliviada, precisamente confianza no me transmite este individuo, encima tengo la sensación de que no me quita el ojo de encima.

Lore: tía te has pasado, sólo vino a preguntar qué tal

Alba: me da mala espina

Lore: si tendrá nuestra edad o un poco más

Alba: me da igual, no me fío

Lore: sonaste muy borde, hasta para mí que te conozco perfectamente

Alba: no quise hablarte mal, lo sabes

Lore: lo sé-nos abrazamos-¿prefieres salir a cenar?

Alba: mis tripas llevan sonando desde hace rato-no exageraba, me moría de hambre-tanta caminata pasa factura

Nos decantamos por probar el Nando's, mucho oímos hablar de esta cadena. Hay de todo y tiene unos precios asequibles para todo el mundo, la comida deliciosa, el ambiente como en casa, me quedo con este bar, sin dudarlo. Tras hablar con mi madre, resumirle lo que hicimos durante el día, en seguida nos dormimos, tocaba madrugar para dar aprovechado el día. Misma rutina que ayer, por lo que otra vez a las 10 listas para seguir descubriendo nuevos lugares. Cogimos el metro hasta Westminter, nada más salir hacia la calle dimos de frente con el London Eye y el Big Ben.

Alba: esto es impresionante

Lore: es lo mejor que he visto en mi vida

Alba: foto, foto

Sacamos un montón de fotos, fotos que en breve colgaría en las redes sociales. Caminamos dando de frente con la mejor noria, teníamos entrada para subir pero era después de comer por lo que nos dedicamos a pasear por la zona. Al lado del Támesis, el puente Bridge, ese puente que siempre sale en las películas ingleses donde se ve el río, pues este. Hacia el otro lado encontramos el Big Ben, casi pegado al palacio de Westminter, con el famoso cambio de guardia, sólo que nosotras habíamos llegado tarde, caminando encontramos la abadía de Westminter, la Casa y plaza del Parlamento.

Volvimos para atrás para cruzar el río, no a nado, por si acaso pero si dimos con Trafalgar Square, la plaza del centro de Londres donde la armada inglesa venció a los franceses y españolas durante la Guerra y seguimos con Piccadilly Street, zona de los teatros, y comercios, donde se encuentra Fortnum&Mason, uno de los grandes almacenes más espectaculares de Londres, finalizando nuestra mañana viendo Burlington Arcade, una de las primeras galerías del mundo.

Todo esto nos llevó medio día, el mejor momento es ahora, que estamos en lo alto del London Eye, arriba del todo, viendo todo Londres. Llevaré este momento grabado en mi memoria para siempre, es espectacular. Las cabinas son enormes, cogemos unas 28-30 personas con el suficiente espacio para moverse dentro todos sin parecer sardinas en lata, además para los que tienen miedo a las alturas o incluso vértigo, va tan despacio que es imposible marearse.

Alba: quiero quedarme aquí

Lore: yo también

Alba: ¿tienes pensado el sitio para la beca? Porque estaría de lujo estar cerca de aquí

Lore: para de leerme la mente-nos reímos-estoy pensando en Inglaterra

Alba: chachi. Creo que los tres seremos muy felices aquí

Lore: ¿qué tres?

Alba: Tom, tú y yo

Lore: te has confundido, en tal caso _____, tú y yo

Alba: bueno cuatro pero no me he confundido

Lore: como se entere mi hermana que te has olvidado de ella, espera y verás

Alba: no se tiene porque enterar. Además tiene preferencia el francés

Lore-riendo-: lo que digas

El tiempo pasaba demasiado rápido, tan sólo nos quedaban unas horas por estas tierras y ya quería llorar, sin dramatizar, pero han pasado demasiado rápido los dos días. En cuanto pusimos un pie en el hostel ahí estaba el chiquillo de recepción esperándonos, o eso nos dio a entender cuando nos preguntó cómo nos había ido y que se estaba preocupando por la hora, todo el rato mirándome con su mejor sonrisa, para no variar. Ten amigas para tus desgracias puesto que no paró de reírse hasta que entramos en la habitación.

Alba: maldita sea mi suerte

Lore: tampoco es para tanto

Alba: claro, cómo está encima de mí

Lore: bueno mujer, será que le has gustado

Alba: no me llega con un pesado en la uni para que ahora venga este a tocar las narices-suspiré resignada

Lore: ¿será qué prefieres al español?

Alba: por supuesto que no...-dije mirando para otro lado. Tenía claro que no me gusta ese, aunque a comparación de los dos, uno me da mejor espina, siento cómo que no quiere sobrepasarse conmigo y lo agradezco

Lore: si dices que no será que no

Alba: última cena, ¿a dónde vamos?

Lore: ¿McDo?-asentí entusiasmada

Por fin probaríamos comida que no fuera precisamente inglesa, McDonalds hay en todas partes del mundo. Lore se pidió un big mac pequeño mientras que madame se pidió un mac pollo y una cheese burguer de bacón de tamaño mediano más el postre, las dos cenamos a gusto, analizando estos dos días. Sin duda repetimos la experiencia, y algo me dice que más pronto de lo que imaginamos, total en la uni nos queda otro cuatrimestre, más bien son tres meses sin contar mayo, que es cuando son los finales.

Últimos instantes antes de marcharnos para el aeropuerto, aprovechando que teníamos que ir a Liverpool para coger el autobús dimos una vuelta rápida, sin alejarnos mucho ya que arrastrábamos las maletas. Nos quedó pena por no poder ir hasta Abbey Road y poder ver el paso de peatones de la portada de The Beatles pero nos consuela saber que al no poder ver todo de golpe tenemos una excusa para poder volver. Sin darnos cuenta ya estamos aterrizando en Madrid, a lo que tras llevarnos casi 40 minutos cruzar el aeropuerto desde donde nos dejó pudimos coger el metro de vuelta a casa.


Sorpresa! Por ser San Valentín os dejo un regalito, capi nuevo. Al partir de los siguientes ya empieza la acción 

Alcanzando metasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora