La Chica De Cabello Pelirrojo

Capítulo 18: Queriendo huir de la realidad.

- ¿Aquí? - Señalé un bar.

- Prefiero comida rápida, los bares con más caros.

- Te voy a invitar yo tacaña.

- Da igual que seas tu o yo.

- Vale ¿Una pizza?

- Sí, me parece buena idea.

- Yo quería comer un salmorejo o una presa ibérica contigo.

- Bueno vale Dieter, pero luego invito yo al postre.

- Yo solo quiero un postre y eres tú.

- ¿Estas drogado?

- No, te hablo enserio quiero saborear cada parte de ti.

- ¿No prefieres un helado?

- Sí está sobre tu piel, vale; sino no lo quiero, tengo antojo de ti.

- Y de presa ibérica que va a salir muy caro el comerlo en el bar.

- Para eso he ahorrado todo un año.

- Cómo quieras vamos a comer ahí dentro.

Entramos, tomamos asiento y pedimos una presa ibérica, me sonó el WhatsApp y tenía un mensaje de Eva.

**Eva (Mi Mue)**

- ¿Donde estas? Ven a casa ya.

**

La deje en visto y volví a hablar con Miryam, que me contaba que su primo le contó anoche que le gustaba Diana y que quería estar con ella enserio, nos acabamos la comida y fuimos a caminar por el parque que había enfrente, ir de su mano por aquel lugar era un sueño.

- Me gusta esto.

- A mi me gustas tú.

- ¿Que tengo yo que no tiene Eva?

- No quiero que hablamos de ella, en este momento no.

- ¿Por que?

- Por que quiero estar bien contigo viviendo un cuento durante un rato, sin hacer pausa a esta realidad que es una mierda.

- ¿Tan mala es tu realidad?

- Te parece poco estar colado por una chica y que no puedas estar como te gustaría.

- Al menos no estás enamorado de alguien con pareja y que hasta que él quiera para tenerlo tienes que ser la otra.

- Me esta entrando ganas loca de mandar todo a la mierda, y que todo el mundo sepa que te quiero a ti.

- Pero no tienes huevos de hacer eso.

- No te quito la razón.

- En el fondo no se por que acepto ser la otra, es más sabiendo que lo nuestro no duraría mucho.

- ¿Por que?

- Por que no aguantarás, la distancia y que quiero llegar virgen al matrimonio.

- ¿Es enserio?

- Sí.

- Pues nada a pan y agua. -Me deprimi.

- Me temo que si, si quieres estar conmigo.

- La espera merecerá la pena, por que tu la mereces, me gustas mucho pelirroja.

- Tengo calor.

- Volvamos al hotel, estaremos fresquitos y cómodos.

○● Miryam ●○

Entrar en el hotel fue un alivio ya que en la calle hacia demasiada calor, nos sentamos metidos en la cama para ver una película.

- ¿Te gusta la película?

- Sí calla. ¡Shhhhh! -Lo mande a calla.

Dieter me echó encima de su pecho y me abrazo, sentí mucha tranquilidad en ese momento, sus latidos eran muy calmados.

- ¿Hasta cuándo estaremos aquí?

- Hasta que tu quieras.

- Y si no quiero irme hasta mañana.

- Nos quedamos, aún que me la corten.

- ¿Correrías ese riesgo?

- Sí claro, ya te dije que merecías la pena.

- No tanto como para que la dejes.

- Sí la dejo ira a por ti y es eso lo que no quiero, ni quiero que me este dando por culo con volvamos y todo ese rollo.

- Eso pasará de todos modos.

- Cuando volvamos ella y yo iremos a distintas universidades.