Colocó la mano sobre su barriga.Se preguntó cómo sería que una vida creciera dentro de sí.Al instante,sintió de nuevo náuseas y vomitó en el cubo que había junto a la cama.Cuando despertó,el sanador habló con ella para confirmar lo que Erika le había dicho.Estaba embarazada.Había sangrado por la violación,ya llevaba días con dolor,pero los síntomas a veces se presentan días después.
—Afortunadamente el bebé está bien.
El sanador sonrió satisfecho,pero en cuanto vio que Gyda apartaba la mirada de su barriga y la dirigía al techo de madera,supo que no era una madre feliz.Madre.Aquella palabra le sonaba demasiado fuerte.No,no quería tener a aquel bebé.
—Erika,no quiero tenerlo.No quiero tenerlo.
Asustada,preocupada,traumatizada y dolorida.Así se sentía.
—Es tu cuerpo Gyda,tu tienes la última decisión.
—No quiero tenerlo...
Rompió a llorar.Sintió en reconfortante abrazo de Erika,intentando consolarla,intentando que pudiera despertar de aquella pesadilla de la vida real;intentó que no notara que ella también estaba llorando,no podía verla así. ¿Quién se merece ser usada como un objeto y acabar de ese modo?
—Gyda,todos te apoyaremos en esto,no estás sola.
—Por favor—volvió a decir entre lágrimas—Necesito que esto acabe.Sanador necesito su ayuda...Quiero acabar con esto.
El hombre de mediana edad cuyas canas ya aparecían en su larguísimo pelo negro,la miró con ojos tristes.
—Me temo que no tengo esa capacidad Gyda,no estoy cualificado para hacerlo.Podrías morir si algo no sale bien.
Empezaba a temblar,sentía que de nuevo todo le daba vueltas.
—Estoy mareada,creo que...
Volvió a vomitar.
—Debes guardar reposo.Será mejor que no te muevas en los próximos meses.
—Tengo que ir a la guerra—volvió la cara para limpiarse la boca con su manga—¿Cómo voy a guardar reposo?
—Es un simple consejo.Si no quieres tener el bebé,adelante,es tu decisión,pero si haces vida normal corres un grave peligro tanto tú como el bebé.
Gyda intento levantarse pero tuvo que apoyarse en el brazo de Erika y el sanador la miró como reiterando sus palabras.
—Aquí me tienes si necesitas algo más.
Se quedaron solas en la cabaña.Ninguna de las dos dijo nada,pero sus mentes gritaban.
—Entonces,¿estoy obligada a tener un bebé que no quiero?
—No,te prometo que encontraremos una solución.
De pronto,la puerta se abrió y apareció Elias,que suspiró aliviado al ver que se había despertado.
—Estaba muy preocupado cuando te vi inconsciente.
Los fuertes brazos de Elias la abrazaron y dejó correr más lágrimas que cayeron en el pecho de su amigo.Le acarició el pelo con cariño,consolándola y susurrándole que todo iría bien y que saldría de esta con el apoyo de todos.A pesar de todo,podía ver en los ojos de cada uno la preocupación que sentían por ella,no sería fácil afrontar aquella situación.Pidió salir fuera,necesitaba sentir el aire fresco y en cuanto la brisa acarició su rostro,las náuseas desaparecieron y empezó a sentirse un poco mejor.Todo el mundo dormía,excepto algunos pocos que decidieron permanecer despiertos para ver cómo estaba su estado de salud.
ESTÁS LEYENDO
Indomable
FantasyTan sólo bastó un segundo para que la vida de Gyda cambiara por completo.Aquella noche,unos jinetes encapuchados asaltaron su aldea y la hicieron arder en llamas.Lo único que quedó del lugar donde creció eran las cenizas.Sus padres,su hermano y todo...