Te odio (SAIDA) G!P

¡Una oportunidad!

Ya había pasado una semana, el festival del día del padre estuvo bien, bailaron unas canciones y nos obsequiaron una pequeña tarjeta, podía ver su sonrisa radiante pero se que no estaba del todo feliz. Todos necesitan un padre pero ella tenía dos madres ¿Que fácil es explicarle eso a tú hija que va a cumplir 6 años? Cada vez sus preguntas eran más frecuentes, tarde o temprano tendría que saber la verdad pero no por el momento. También me hacía muchas preguntas sobre sus abuelos o si tenía alguna prima, esto cada vez era más complicado. Entre más crecía más tenía curiosidad.

Hoy iba tenía que ir hablar al nuevo hospital, tenía que platicar con la directora. Deje a Senia al cuidado de Chaeyoung, la quería como a una tía al igual que a Mina. El día estaba un poco nublado al parecer llovería pero no le tomé importancia. Cuándo estaba por llegar se podía distinguir el enorme edificio. A dentro el lugar se veía demasiado lujoso podría jurar que la entrada era más grande que mi casa. Ni ahorrando en esta vida ni en mi otra vida podía tener algo así. Seguro mi cara era de asombro porqué una de las enfermeras se acerco a preguntarme que necesitaba, me contesto amable que la oficina de la doctora Hirai estaba en el último piso, sin más me dirigí allá.

Veía a muchas personas esperando, podía ver lo fascinadas que estaban al igual que yo. Salió una enfermera con una lista de nombres y fueron pasando uno a uno. Luego de esperar 2 horas por fin me nombraron e ingresé a la oficina. Me imaginaba a la doctora como una señora de unos 40 años pero era joven, era bonita ¿Que diablos ando pensando?

  — Tomé asiento señora Kim— Dijo mientras alzaba la vista de los papeles que leí— ¡Oh disculpe! ¿Usted es la hermana de Senia?

 —  ¿Hermana? No, yo soy su madre— Aclaré.

 — Eres demasiado... ¡Joven!— Rió— Entonces Senia tiene leucemia. Lo único que les pedimos a los papás es que se comprometan con nosotros. Los pagos son accesibles.

  —  De eso no habrá problema, muchas gracias doctora Hirai— Le di la mano de despedida.

Salí de su oficina, ya la semana que viene Senia comenzaría con sus quimios entonces ya podría estar tranquila. Estaba muy fuerte la lluvia, mi batería del celular se había agotado. Ahora tenía que esperar a que la lluvia parara, realmente tengo mala suerte. 

Ya había pasado una hora aproximadamente y la lluvia no paraba, estaba comenzando a cansarme pero no podía hacer nada, era esperar o mojarme.

  — Señora Kim ¿Todavía aquí? ¿Qué espera?— Preguntó la Dr. Hirai.

— Sí, estoy esperando a que la lluvia paré— Dije vencida— 

— No creó que paré, bueno no ahora— Rio— Debería decirle a su esposo que pasé por usted.

— Y-o no teng...— Rasqué mi cabeza— Soy madre soltera— Solté al final.

— Lo siento, yo no sabía— Dijo nerviosa— Si no tiene problema, la podría llevar con gusto a su casa.

— Yo no quiero ser una molestia— Dije tímida.

— No será una molestia llevar a una de las mamas más lindas de aquí— Su voz fue coqueta.

Pensaría que esta coqueteando conmigo pero eso sería imposible. Me hizo seguirla hasta llegar a su auto, me abrió la puerta y entre, por dentro el auto era sorprendente. Me pidió que le diera la dirección de en dónde me llevaría, le indique por dónde quedaba la florería, puso algo de música lo cuál me relajo bastante, no me agradaba esos silencios incómodos.

— Perdón que te pregunte esto. Se que es algo fuera de lugar pero quería saber ¿Qué paso con el papá de Senia?— Preguntó sin quitar la vista del camino.

  — El no sé quiso hacer cargo— Mustié— Realmente no me gusta hablar del tema.

  — Ya veo, discúlpame— Contestó— ¿Tienes pareja?

— ¿A que vienen todas estas preguntas?— Pregunté confundida. 

— Simple curiosidad. Eres muy bonita alguien como tú no creó que este del todo sola— Me miró y guiño el ojo.

— Yo no tengo pareja— Respondí con sinceridad.

— Si no tienes pareja ¿Me aceptarías ir por un café o lo que tú quieras ahora?

— ¡EH!— Dije sorprendida— Yo no sé, se vería muy fuera de lugar y se podría mal interpretar.

— Claro que no, acepta por favor...—Seguía insistiendo.

— Porqué no— Dije sin más.

No estaría mal divertirse un rato, le envié un mensaje a Chaeyoung para pedirle el favor de cuidar un poco más a Senia, me contesto que no habría ningún problema.  La Dr. Hirai era una persona muy amable, en todo el camino no dejo de verme. Comenzaba a sonrojarme un poco, la verdad es que era muy linda. Yo no sabía a dónde nos dirigíamos exactamente pero no le tome mucha importancia hasta notar un pequeño restaurante, no era muy grande pero se veía costoso. Estaciono el vehículo, me abrió la puerta para que yo saliera. Ella tomó mi mano para ir a la entrada, sentía demasiada vergüenza ante ese acto pero tampoco hice nada para evitarlo. 

Nos sentamos en una mesa que tenía vista a la playa, el lugar era maravilloso pero la comida si que era bastante cara. Tuvimos una que otra plática random, me contó que era soltera, que tenía 26 años y que ella vivía sola aquí en seul. Me la había pasado muy bien, fue muy atenta conmigo, me sentía feliz, nadie me había tratado así. Cuándo terminamos le pedí que me llevará a casa de Chae y resulto que ella conocía a mina e incluso era una de sus mejores amigas.

  — Llegamos, gracias por el día de hoy— Dijo muy sonriente— Me gustaría repetirlo.

— No agradezcas, gracias a ti. Llevaba tiempo sin tener un día así— Reí.

  — Oye, no sé si es mucha molestia pero después de la inauguración del hospital abra una fiesta... Estén ¿T-e gustaría ser mi pareja— Su voz fue tímida y pude notar sus mejillas rojas.

  — Y-o no sé si encaje en un lugar así— Dije apenada— Pero sería un honor acompañarte.

— ¿E-en serio?— Dijo emocionada.

— Claro, eres una persona amable— Le sonreí.

No sé porque había aceptado tan fácil pero creó que ya era hora de darme una oportunidad de conocer a más personas. Llevo 6 años dedicándome totalmente a mi pequeña, no me arrepiento pero podría ser bueno y no desaprovecharía la oportunidad.