Te odio (SAIDA) G!P

Mi familia.

Sana. 

Ya era de mañana, despertar a lado de cualquier mujer se siente bien, pero despertar con lo más importante de tú vida es simplemente perfecto. Me intente levantar para no despertar pero Dahyun ya se encontraba despierta.

  — Buenos días ¿Y mi beso de buenos días?— Hice un puchero.

— Pues pedirle a cualquiera de tus conquistas que te lo de— Bromeó.

Comenzamos a reírnos, se acerco para darme un tierno beso. Senia seguía durmiendo, así que nos levantamos para preparar el desayuno las dos. No tenía muchas cosas, así que hicimos un desayuno pequeño. En verdad su departamento era demasiado pequeño... Senia ya se encontraba desayunando junto ambas, se podía notar su sonrisa a kilómetros, nos veía a su madre y a mi al mismo tiempo, como si no pudiera creer lo que estaba pasando.   

  — Senia— La cargué.

— ¿Qué paso Mami?— Dijo regalándome una hermosa sonrisa.

— ¿Me permites desposar a tu mamá otra vez?— Le guiñe un ojo.

— Solo a ti te lo permitiría ¿No te volverás a ir?— Puso su mirada curiosa.

  — No, tú y tú mamá son lo más importante para mi— Le di un beso en su frente. 

Dahyun solo se reía de ambas, levantamos los platos y me ofrecí a lavarlos pero se negó rotundamente a que lo hiciera. Así que lleve a Senia a ver un rato la tele. Vi que se fue a cambiar y la seguí dejando a senia viendo televisión muy entretenida.

— ¿A dónde vas?— Pregunté curiosa.

— Tengo que ir a ver a Chaeyoung, para ver que haremos. Nos mudamos mañana, es mi último día aquí.

— Tienes razón, déjame acompañarte y luego podríamos ir a comer algún lugar con nuestra pequeña. 

Había aceptado, así que nos comenzamos a cambiar, tomamos un pequeño baño. Primero fuimos a dónde se encontraba Chaeyoung, su florería era bonita pero humilde, ella costruyo esto sola, me sentía muy orgullosa de ella. Nos felicito por nuestra boda, le dio un beso a senia y le regalo un abrazó a Dahyun y a mi. Fuimos arreglar unos papeles en el hospital en dónde tendría que hablar con Momo, así que yo me quede en la sala de espera.

  — Hola de nuevo— Toco EunHa mi hombro— Escuche que ya no te vas a casar.

— Hola preciosa— Bromee— En realidad sí, me volveré a casar.

— ¿Con Dahyun?— Pregunto picara.

— Sí, con ella— Sonreí.

— Que tal si te doy tú despedida— Dijo coqueteándome.

Cuándo estaba apunto de contestar, Dahyun salió enseguida con momo. Se acerco a mi para darme un beso, el cuál nadie pudo ignorar, Eunha menos... ¿Porqué hizo eso?

— Hola Dr. Eun Bi— Le sonrió.

— Hola, creó que mejor me voy.

Se fue y yo me comencé a reír, si que era una celosa.

— Hola Sana— Pauso momo— Lo siento por lo del golpe.

— No pasa nada, me lo merecía ¿Amigas otra vez?

Nos dimos un pequeño abrazó. Ya había recuperado a mi amiga. Se despidió de nosotras, no sin antes darme un pequeño golpe en el brazo.

— No la vuelvas a lastimar.

Tomé de la mano a Dahyun quién se encontraba con Senia alado. Las dos se encontraban muy sonriente. Le habían dado una hoja para que pueda continuar sus chequeos en el mismo hospital pero ubicado en osaka. Ya era un poco más de las 2 de la tarde, así que las llevaría almorzar.

Fuimos a Macdonalds, senia apenas entro, quería ir corriendo por todas partes pero Dahyun no se lo permitió porqué podía salir lastimada. Se quería ir de inmediato a la sala de juegos pero con la condición que comiera primero algo. Compramos una cajita feliz para cada quién, solo para que se quedaran los juguetes, comió rápido su hamburguesa y se fue corriendo a jugar. Así que esto es salir en familia y divertirse. Yo nunca pude hacer esto con mis padres. Una lagrima comenzó a caer de mi mejilla.

  — ¿Qué pasa? ¿Porqué lloras?— Pregunto asustada Dahyun.

— No es nada es solo que recordé algo que me hizo sentir triste.

Me tomó de la mano y comenzó acariciarla, me sentía más tranquila cada vez que me tocaba. Era como ese cigarro que prendía cada mañana para sentirme tranquila, solo que este no me hacía daño, si no todo lo contrario. Nos quedamos una media hora más para que Senia pudiera jugar a gusto. Tomamos un taxi, aquí podía hacer cosas que en Japón no se me permitiría y tenía que disfrutarlo. Ya era de noche, platicamos un rato las 3, me contaban pequeñas cosas del pasado y uno que otros problemas que tuvo que pasar, era una persona admirable. Senia se quedo dormida en el regazo de Dahyun.

  — Me voy a poner celosa de mi propia hija— Bromee.

— No seas boba Sana— Me dio un leve empujón—.

  — Mañana comenzará una nueva vida para ambas. Tendré esa familia que siempre soñé— Le di un beso en su mejilla que hizo que se sonrojara.

No me importaba dormir en esa cama pequeña, ni vivir en este pequeño departamento lleno de cosas viejas, antes no hubiera querido entrar a un lugar como este pero ahora era diferente. Renunciar a los lujos, renunciar a muchas personas falsas y ser quién eres sin ser juzgado. Estar aquí con ustedes sin importar el lugar esta bien... 

— Te amo Sana.

— Te amo Dahyun.