Te odio (SAIDA) G!P

Las cosas en su lugar.

Sana.

Tendría que arreglar las cosas con Tzuyu. No sé como podría enfrentarla, mientras mi madre tenga en su cabeza que tengo que casarme. Ya me esperaba que eso sucediera, lo que ella como yo sentíamos iba demasiado lejos de ser llamado ''amor''. Ahora que lo recuerdo, ella fue la que en una fiesta se acerco a mi, todos la conocían menos yo. Cuándo Dahyun se fue teníamos solo una semana de conocernos, cuándo mi mamá la vio quedo encantada con ella, por formar parte de la familia Zhou...

En la oficina no había mucho trabajo, lo cuál me alegraba. No podía pensar en Dahyun y en como le pediría que se viniera a vivir conmigo a Japón ¿Debería comprar una casa? En verdad me sentía demasiado feliz.

  — Que raro es ver a la amargada Minatozaki sonriendo— Se burlo Nayeon.

— Tengo verdaderos motivos para hacerlo ahora ¿Qué necesitas

— Solo vine a que me firmes estos documentos— Me entrego los documentos los cuáles firme—  Otra cosa, su novia esta esperando a fuera, se ve molesta. Mucha suerte.

Por primera vez me había alegrado que llegará. Le pedí a mi asistente que me cancelará la cita que tendría en unas horas. Le di permiso para que dejara entrar a Tzuyu, realmente estaba lo que le seguía de molesta.

  — ¿Que significan estas fotos de ti con otra mujer?— Casi gritando— 

 —Pues como lo ves nos estábamos dando un beso— 

— ¿Y así de fácil lo dices? No sé te olvide que yo soy tú comprometida ¡conmigo!— 

Creó que es hora de ponerla en su lugar, me levanté de mi asiento, la sujete del brazo para llevarla a un lugar. Todos nos quedaban viendo por el espectáculo que Tzuyu estaba haciendo.  La empuje al auto para que entrará y cerré las puertas con seguro.

  — ¿Qué te pasa? Pudiste a verme lastimado. 

— Deja de ser dramática, si te hubiera querido lastimar, lo hubiera echo. Cállate que tú voz me irrita.

Me dio una mirada matadora al final. Seguía habloteando, comenzaba a desesperarme. Le había pedido a Dahyun la dirección de la tienda, así que me dirigía hasta allá. 

  — ¿Qué hacemos en esté lugar pobre?— Preguntó nerviosa.

— Sabes Tzuyu— Comencé hablar— Deberías de pensar en como se siente la persona de la tienda— Volteó a ver el lugar— Ella se ve una muchacha trabajadora que quiere salir adelante.

— ¿Porqué me estas diciendo esto?— Tartamudeo.

— Porqué yo sé la verdad. Se que tienes algo que ver con ella desde hace mucho. Siempre lo sospeché pero no tuve una idea de quién podría ser, ahora entiendo porqué... no es de nuestra clase— Suspiré— Me parece gracioso que siempre ofendías a Dahyun por su forma de vestir y porqué no tiene los recursos. Pero tú también estas enamorada de una ¿Oh me equivoco? ¿Ella sabe como tratas a las personas de su nivel económico?

No contestaba solo se limitaba a observar, salió la persona que llevaba viendo Tzuyu, se veía que era una persona amable, no entendía como podía aceptar todo lo que ella había echo. Yo no podría soportar el echo de saber que otra persona la tocara, el simple echo de imaginarlo me hacía enojar.

  — Nunca me había preguntando si realmente ella se sentía bien, creó que fui egoísta todo este tiempo. Solo pensaba en mi y en lo que mis padres vieron como una oportunidad. Creó que al final de cuentas, ambas buscamos el placer por nuestros errores en el pasado— Soltó un enorme suspiro.

  — Pero no es tarde para arreglar las cosas, yo creó que ella aún debe de sentir eso por ti— Le agarré la mano— No tomamos las mejores decisiones en el pasado pero podemos arreglar el presente.

  — Nunca pensé que reaccionarias de esta manera, creó que en parte me alegro. ¿Te puedo hacer una pregunta? ¿Cómo te enteraste?— Preguntó.

— Es secreto— Le guiñe el ojo— ¿Hay algo que tenga que saber?

Tomó un poco de airé, comenzó a rascarse la nuca. Solo quería escucharlo de su boca para poder ponerle fin a esto.

— Sí— Respondió— No estoy embarazada, todo fue una mentirá. Pensé que te estaba perdiendo... discúlpame— Miro el suelo del auto.

— No tengo nada que disculparte. Las dos debimos ser sinceraras— Le di una sonrisa.

  — La verdad es que yo si te llegue a querer pero me di cuenta que tú no amabas a nadie o eso creía. Esa chica pálida ¿Significa mucho para ti?— 

— Sí, tampoco lo supe, nunca le di la oportunidad— Le sonreí—Ahora no quiero perderla de nuevo.

— Pensé que eso era un mito— sonaba sorprendida— ¿Podría darte un ultimo beso?

No le contesté me acerque a ella para darle un último beso, con eso se cerraría esa relación tóxica que tuvimos todos estos años. Podía sentir su lengua explorar mi boca, pero me separé de ella, ambas teníamos la respiración agitada.

  — Creó que este es el adiós. Yo hablaré con tu madre, tú solo ve por la chica pálida, gracias por esto. Mucha suerte— Tzuyu me regalo una sonrisa y salió del auto dirigiéndose a la pequeña tienda que se encontraba del otro lado de la calle.

Ahora solo tenía que hablar con sus papas de ella, espero que me perdonen por mis errores del pasado, haré que me acepten. Ya nada nos podía separar, ya todo estaba bien. Mi madre al final tendría que aceptarlo.

Dahyun me había mandado una foto de que ya se encontraba con Senia, eran muy preciosas las dos. Serían mi familia y nada me hacía más ilusión que eso. Arreglaría todo para que en unos días pudiera viajar a corea,