Te odio (SAIDA) G!P

¿Que siento por ti?

Dahyun.

Sana no había regresado, la última vez que la habían visto fue saliendo de la oficina de Momo. Tampoco se había acerdado a mi, normalmente siempre busca pretextos para hablarme. Eran un poco más de las 7 de la noche, me encontraba caminando a casa. No me preocupaba de la florería ahorita porque chae se encargaba de todo, porqué me pasaba casi todo el día en el hospital. Senia no había despertado aún, pero tendrían que hacerle unos exámenes más para ver si la pueden operar mañana mismo. Me sentía feliz porque había un mínimo de esperanza.

Mi departamento se sentía vació sin sus risas, sin verla corriendo por todas partes. Me metí a bañar, prendí un rato la tele para distraerme un poco, mañana tendría que despertar muy temprano, sería un día pesado. Estaban pasando una película romántica, me encantaban, siempre me imaginé una historia así, pero la realidad era muy cruel. 

Un ruido extraño me saco de mis pensamientos, pensé en ir acechar que era pero decidí ignorarlo hasta que alguien toco a mi puerta, parecía que quería tirarla. Abrí un poco y alguien cayo encima de mi, apestaba demasiado alcohol. Sana estaba borracha.

  —Dahyun perdóname por todo— Comenzó a llorar y abrazarme.

No sabía que decirle, su estado era muy lamentable, me hizo recordar todas las veces en el que siempre llegaba borracha. Me moví un poco para poder pararme pero me di cuenta que alguien nos había fotografiado, esto traería problemas pero era lo menos que importaba ahora. Logré que se parara, me preguntó cuanto se habrá tomando, no me sorprendería que todo el bar.

Su cuerpo se había puesto pesado, la tenía que llevar a mi habitación para recostarla. Parecía una niña pequeña haciendo su berrinche para no ir a dormir, me parecía muy gracioso. La acosté a un lado, le quite sus zapatos, le desabotone el chaleco que tenía y la tape un poco. Me fui a la sala para apagar la tele, tendría que dormir en el sillón pero era demasiado incomodo. No creó que pase nada malo por dormir a su lado.

Me acomode al otro lado, viendo hacía la ventana, me moría de la vergüenza, no entendía porqué. Tomé un poco de sabana para taparme, pensé que había cambiado su habito de moverse demasiado pero seguía igual. Cuándo ya estaba apunto de conciliar el sueño, sentí que unos brazos me rodearon la cintura y me pego a su cuerpo, podía sentir su erección. Me había puesto roja, porqué la tenía tan dura, que diablos estará soñando.

  — Siempre me gustó tú perfume— Susurro.

Pensé que estaba despierta pero solo hablaba dormida, me había asustado. Me voltee para quedar frente a ella, se veía demasiado vulnerable durmiendo y no tenía esa mirada de una Sana antipática todo el tiempo. Podía sentir su respiración, no había cambiado nada, seguía siendo hermosa, si no que lo era aún más. Aún recuerdo cuándo Senia nació, siempre los doctores me felicitaban por que en verdad era muy hermosa, todos decían que el papá seguramente era muy apuesto y me causaba demasiada gracia. Siempre fue una viva imagen de ella, se podía notar que era su hija, me sorprende que Momo y Mina que eran sus amigas no lo sospecharan, era difícil de creer que sana se fijara en alguien como yo. Cuándo intente darme la vuelta un movimiento hizo que nuestros labios se tocaran rápido, mi rostro se puso rojo, intente levantarme para ir mejor a dormir en la sala pero sus brazos no me lo permitieron, tenían demasiada fuerza, termine rindiéndome al final hasta quedar dormida.

Sonó la alarma de mi celular, ya eran las 7 de la mañana, me paré de golpe y así cayendo al suelo.

  — ¿Por qué tanto ruido?— Mientras abría los ojos— ¿En dónde estoy? ¿Me acosté con alguna mesera del bar?—Dijo confundida restregándose los ojos.

  — Para tú mala suerte no y estas en mi departamento— Contesté levantándome del suelo.

— ¿Dahyun? ¿Cómo llegué aquí? No recuerdo mucho.

— No lo sé, solo tocaste a mi puerta y te desmayaste.

Por la expresión de su rostro se veía que tenía dolor de cabeza, me gustaría darle una aspirina pero lamentablemente no tengo.

— Deberías cambiarte, tenemos que ir al hospital— Dije.

— Tengo que ir a comprar algo de ropa primero— Rio.

— Si gustas te puedo prestar algo de ropa, no es de marca nada más te aviso.

Ella acepto, le presté una camisa y unos pantalones que solo me había puesto una vez, entro a bañarse, mientras preparaba algo rápido para desayunar. Cuándo la vi salir, realmente le quedaba bien esa camiseta con esos pantalones rasgados. 

— ¿Tengo algo en mi cara?— Dijo burlándose de mi.

— Yo lo siento, he preparado el desayuno si quieres— Sonreí.

Se sentó en la mensa y comenzamos a desayunar rápido. Tomé un baño rápido, me aliste y cuándo estábamos a punto de irnos, me llego un mensaje de Chaeyoung. Ya me había jodido, era la foto en dónde estaba con Sana, tenían de encabezados ''La nueva chica'' ''Quién será esta mujer'' ''¿Le ponen el cuerno a la modelo Zhou con una pobre chica?'' ''¿Que pensará la novia de esto?'' La quedé mirando, ella me sonrió, me acerque para mostrarle las fotos. No podía creer que estuviera en todo este escandalo. 

  — ¿Quién diablos tomo estas fotos? Seguro ya se entero mi madre, no dudo que ya tenga varias llamadas de ella— Dijo irritada.

— Había una persona pero no vi quién fue, no pensé que lo subirán tan rápido, lo siento— Dije apenada.

  — No pasa nada, no es tú culpa. Luego veré como lo arreglo— Me sonrió.

Comenzamos a caminar para irnos al hospital, no había nadie al rededor, creó que verla vestida así no pensarán que es la famosa Minatozaki, se veía con una adolescente normal, sencilla pero hermosa. No íbamos juntas, yo me adelante un poco pero Sana me alcanzó, me sonrió y no pude evitar pensar en las palabras que me dijo en la madrugada.

¿Porqué me pones nerviosa?