Por ti - Chriserick (Segunda Parte)

Capítulo 10

- Ya te dije que no hice nada - intentaba convencer a Richard.

- ¿Me lo juras?

- Te lo juro.

Dejamos el lugar para terminar esta noche, procuré no beber tanto ya que tenía que conducir y de por sí, si ya me dificultaba ver, con alcohol en el cuerpo era choque seguro.

Me estacioné al llegar al departamento de Rich, no podía dejar que se vaya sin hacerle una pregunta.

- Necesito un consejo - hablé.

- Claro dime bro.

- ¿Recuerdas que ayer Erick no fue a la cena? - asintió - bueno, resulta que estaba en mi departamento. Cenamos y luego estuvimos juntos de nuevo.

- ¿No que estaba enojado?

- A eso voy. De un momento a otro su actitud cambió radicalmente, pero no sé que creer.

- Mira, yo quiero mucho a ese chamaquito pero ten cuidado - advirtió.

- ¿Cuidado?

- Si loco, el rencor no se olvida de la noche a la mañana y él ya demostró que si lo tenía hacia ti. No sé men pero presiento algo y no es bueno.

- Caigo muy fácil con él, me tiene loco como un idiota.

- Lo quieres mucho ¿verdad? - tomó mi hombro.

- Demasiado, volví por él y sus juegos me hacen tener dudas. Aún así lo quiero.

- Trata de no volverte dependiente de él, hasta que estés seguro de que en verdad te perdonó - aconsejó.

- Está bien, gracias por escucharme - le di un abrazo para luego despedirme.

Richard tenía razón, debía tener cuidado. Lo peor es que ya me estaba volviendo dependiente de él.

Sentí el vibrar de mi teléfono, alguien me estaba llamando. Estaba tan metido en mis pensamientos que no ví quién era y solo respondí.

- ¿Sí?

- Hola Chris.

- ¿Erick? Qué haces despierto a esta hora.

- No podía dormir ¿Dónde estas?

- Ya voy a mi casa, salí con Richard.

- Uhm.

- No hice nada, no te preocupes bebé.

- ¿Puedes venir a dormir mañana acá?

- Como decirle que no al más bello del mundo.

- Jajaja te espero mañana.

- Ahí estaré, adiós.

Desvíe mi camino para dirigirme a una farmacia por condones, no es que lo iba a dejar embarazado, pero por temas higiénicos era bueno utilizarlos de vez en cuando.

No era por presumir, pero ocupaba buenos condones, Erick debía ser un agradecido por eso.

Estaba cansado por el baile, me senté en el sofá y ahí quedé sin saber nada por esa noche.

..........

Sentí golpes en la puerta produciendo que me despertara, aún tenía sueño.

- Porqué no respondes el celular.

- Lo siento, estaba dormido - besé sus labios.

- Chris son las cinco de la tarde.

- ¿Qué? - miré el reloj y estaba en lo cierto - me baño y nos vamos.

- Apúrate que nos esperan para comer.

No me explicaba como es que había dormido tanto, no bebí mucho y tampoco llegué tan tarde. Quizás fue por el motivo que llevaba tiempo sin salir.

- Estoy listo, ahora llevo ropa y esto - le enseñé los condones.

Rió nervioso - que preparado.

- Claro que sí, prepárate - le di una nalgada.

Quería besarlo en todo momento, por la presencia de sus padres no podía hacer nada y me desesperaba. Solo deseaba que mi amiguito no cobre vida antes de la noche.