Let me love you [Yoonmin] ©

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El centro comercial se encontraba más que lleno. Otras veces eso no habría sido un problema, pero sí ese día, ya que me encontraba con Jimin. Al ver a toda la gente que nos rodeaba, él no podía evitar sentirse incómodo. Tomé su mano, y él me miró.

—¿Qué haces?

—Tomo tu mano, ¿Por qué?

—Hay... mucha gente.

—Por eso mismo ¿Y si te pierdo?

—Yoongi... nos están viendo.

—Es que son unos envidiosos. Ya quisieran tener la misma suerte que yo al pasear contigo.

Jimin rió negando con la cabeza.

—¡Eso es ridículo!

—Lo sé, ¿No es verdad? De nada sirve que sientan envidia. Jamás tendrán a mi Jiminnie —solté su mano y lo abracé de costado.

—No vas a parar, ¿Verdad?

—A menos que tú así lo prefieras, no.

—Es que... la gente te ve con--

—Si sigues pensando lo mismo, entonces repetiré lo que hice en la cafetería de la universidad, pero aquí mismo frente a todos.

—Está bien, te entendí —musitó.

—Aquí es.

Me detuve. Por ende, lo hizo él también, ya que aún lo seguía abrazando. Jimin miró con atención el local frente a nosotros y después posó sus ojos en mí. Hizo una mueca con sus labios.

—¿Es realmente necesario?

—Lo es.

Espió disimuladamente el interior del local.

—No pasa nada. Ven conmigo. Ya te dije que si no te gusta y no te sientes cómodo, puedes romper todo después.

Tras haber suspirado, me acompañó. La pequeña campana ubicada sobre la puerta de aquel local de fotografía sonó en cuanto entramos, y la mujer que atendía allí nos recibió con una sonrisa.

—Buenos días, ¿Puedo ayudarlos?

—Buenos días. Sí, me gustaría imprimir las fotos de mi cámara, por favor.

—¿Todas ellas?

—Sí.

Busqué en mi mochila el dispositivo y se lo entregué. Mientras ella hacía su trabajo, miré a Jimin, quien movía sus pies, nervioso.

—¿Estás bien? —pregunté en un susurro.

—Ella... va a verme en las fotos —respondió en el mismo tono que yo.

—Te está viendo ahora también —me encogí de hombros—, y no hay nada de malo con eso.

—¿Y qué pensará de eso?

—Qué bonitos.

Ambos giramos nuestras cabezas para ver a la mujer, quien sonreía a la pantalla de la máquina reveladora de fotos.