capitulo 17

2.1K 123 15
                                    

Hoy era el gran juego, todos estaban emocionados. Yo más que nada por qué le daría una lección a Liam.

Conociendo a Don Juan, después del juego habrá una fiesta y no creo que vaya desaprovechar la oportunidad de acostarte con una chica así que se me ocurrió una idea.

Contraté a una chica, para que se acostara con el y luego de eso ponga en su espejo, "Bienvenido al SIDA".

Si se que no tendría que jugar con un tema tan delicado como es esa enfermedad, pero eso le dará una pequeña lección para que deje de ser mujeriego

Después de clases fui a una farmacia a comprar pastillas para dormir son para Liam, por lo que me han dicho, el muy desgraciado es resistente al alcohol así que para que se quede dormido voy a tener que intervenir en eso.

Ya estaba en casa, llame de nuevo a la chica para que no hayan  inconvenientes. En serio quería que esto salga a la perfección.

Faltaban 3 horas para el partido así que comencé a ducharme.

Luego de salir decidí ponerme un polo blanco ajustado que dejaba ver mi ombligo, una licra color negra, con unos botines plomos. Pinte mis labios, un poco de base y nada más.

Le escribí a Chase para que me viniera a recoger ya que quería estar temprano para darle ánimos a los chicos ya que sería su primer juego.

Antes de salir tome una chaqueta , las pastillas y salí

–Hola Hanna Montana–me saludo Chase cuando entré al carro

–¿Sigues con eso?– le pregunté con gracia.

–Si- prendió a el motor y comenzó a conducir.

El camino fue entretenido, hablamos cosas sin sentido como siempre. Prendió la radio y comenzó a cantar a todo pulmón.  Había una niña en otro carro y le saco el dedo medio y así fue como Chase dejo de cantar y yo estalle en risas.

Elegimos unos asientos que nos dejen ver toda la cancha. Ya habían varias personas.

–Bueno tú ve por la comida y yo a darle suerte a los chico· le avisé.

–¿Te gustas los nachos?- me preguntó .

–¿A quien no?- le dije con una sonrisa.

Luego que nos separamos. Me encamine  a los vestidores.

Entre como Juan en su casa. Los chicos ya estaban vestidos. Se notaba que ya querían jugar.

Me acerqué hasta donde estaba el 45, 68,34,20. Eran los números que les correspondían a los chicos.

–¡¡Idiotas!!- grite emocionada ellos voltiaron.

–¡¡Bleick!!- gritaron emocionados.

Nos miramos y ya sabíamos que se venía.

–¿Quienes somos?- les dije .

– Wallas- corearon los chicos.

–¿Qué hacen los Wallas?- pregunté

–Ganamos–

–¿Y que ganamos?-

–Lo que nos proponemos. Au au au ¡Wallas!- dicho eso nos chocamos de pecho.

Era algo que siempre hacíamos antes de que ellos jugarán un partido, y esta vez no seria la excepción.

–¡Chicos venid!- les grito el entrenador- y Bleick fuera de aquí los vas a distraer.

–Claro que no los voy a distraer, los voy a motivar–sonreí y el entrenador me miró confundido.

Me subí a una mesa y todos me miraron.

No Te Metas Conmigo Idiota(Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora