Capítulo 2 "Gustos peculiares"

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A la mañana siguiente Flor se levantó como nunca. Una sonrisa dibujaba su cara y sus energías estaban a tope. Tenía uno que otro tics, pero sabía que no era a causa de nada malo. Eran debido a las ansias que tenía de ver a su nueva vecina. Mientras preparaba el café miró por la ventana que daba a la Gloria. Esperaba ver a la pelirroja desayunando, pero no fue así. Las ventanas de la Gloria estaban cerradas y no se notaba movimiento en su interior.
Al pasar de las horas la sonrisa de Flor se fue borrando. No había señales de Jazmín y eso la molestaba de alguna forma
¨No vemos¨ esas palabras resonaban en su cabeza. Quería verla, deseaba volver a verla, aunque sea para hablar por unos segundos. Entonces fue cuando las palabras de Javo vinieron a su mente ¨ella nunca está en casa¨.
Se encogió de hombros ante esto y resopló desilusionada. Algo le decía que no iba a ver a la colorada ese día.
Pasó la noche y volvió el sol. Pero esta vez las hermanas estrellas no fueron despertadas por los rayos de este. Sino por el fuerte sonido de una música que las hizo salir de sus sueños.
Flor se llevó las manos a la cabeza y luego a los oídos. Tenía sueño y esa endemoniada música la volvía loca. No sabía bien qué era ¿Rock? No sabía distinguirlo por el estado de sueño que tenía.
Fue entonces que oyó la voz enojada de su hermana y un portazo tras esto. Ahí supo que debía levantarse.
Carla no era de muy buen temperamento y más si la despertaban de esta forma, por lo cual a Flor no le pareció extraño verla salir de la casa a toda velocidad, aún en pijama.
La siguió hasta alcanzarla en la puerta de La Gloria, desde donde para su sorpresa provenía la música
-Carla, ¿Qué vas a hacer?- dijo preocupada. Lo que menos quería Flor era que su hermana se buscara un problema y menos con esta chica
-¡Cagarme en todo!- le dijo Carla para volver a tocar con fuerza en el portón de la casa
De pronto la música se apagó y se oyeron unos pasos acercarse al portón. No pasó ni un segundo y ya la colorada estaba frente a las dos Estrellas.
Estaba despeinada y su cara confirmaba que aún dormía ¿Cómo podía dormir con esa música? Pasó por la cabeza de las dos hermanas. Flor la miraba de arriba abajo algo hipnotizada. Debía confesar que le alegraba ver a aquella chica, a pesar de las condiciones.
Jazmín llevaba un short corto, y una remera larga… al parecer ese era su pijama. Su pelo colorado estaba subido, pero debido a su estado de despeino se salían varias hebras de su cabello, que caían de una forma casi perfecta sobre sus hombros.
-¿Qué pasa?- dijo Jazmín tocándose la cabeza. Al parecer también tenía resaca
Flor solo se limitaba a mirarla, al parecer la chica aún no había notado su presencia. Pero de pronto sus ojos se posaron en la morocha, la cual sonrió al darse cuenta
-Hola, Flor- dijo casi en un susurró
-Hola- se limitó a decir la chica, a la cual su hermana miraba confundida
-¡¿Cómo qué que pasa?!- dijo Carla volviendo al tema que las había traído ahí - ¿La música? ¡¿Eres sorda?!-
-¿Eh? Ah, sí, perdón. No fui yo, estaba dormida-
-¡Bueno, mientras vos estabas dormida esa música lleva torturándome durante horas!-
De golpe la música volvió a sonar y las tres miraron hacia dentro
-Será imbécil- murmuró Jaz mirando hacia la cocina -¡Elena!- gritó con un tono bastante enojada
Al grito apareció una chica bastante joven en el salón. Al igual que ella llevaba un short y una remera, pero mucho más corto. La rubia caminó hacia ellas, permitiéndole ver a Flor sus ojos azules.
-Sí, ¿Amor?- le dijo apoyándose en el hombro de Jazmín, pero esta lo apartó disimuladamente
¿Amor? Esa palabra resonaba en la cabeza de Flor. ¿A Jazmín le gustaban las mujeres? Y lo más importante ¿Esa era su novia?
-¿Qué te he dicho yo de la música?- le dijo bastante enojada
-Sí, es que…- trató de decir la rubia
-Es que nada, Elena. Te lo advertí-
La rubia asintió – Supongo que es hora de que…-
-Sí, hazlo- le dijo Jazmín señalando las escaleras
La rubia subió sin dejar de mirar a las espectadoras. Se notaba algo triste, mientras que Jazmín parecía ignorar el efecto que había causado en la chica
-Les prometo que no se volverá a repetir- dijo muy seria
-Eso espero- le dijo Carla
Los ojos de Flor seguían puestos en la figura de la colorada, pero ahora no la miraba con fascinación sino con intriga. Con la intriga de saber si esa chica era su novia o no. ¿Jazmín era lesbiana?
-¿Flor?- dijo Carla haciéndola salir del trance
Ahí fue cuando Flor se percató de cómo su hermana ya estaba fuera del porche mientras ella seguía de pie frente a la chica. La cual no dejaba de mirarla ni un segundo.
-Sí, ya voy- dijo sin apartar la mirada de Jazmín, la cual le dedicó una sonrisa
-Nos vemos, Flopy- fue lo último que dijo antes de cerrar la puerta de su cabaña
Con más de mil preguntas en su cabeza Flor se unió a Carla en el camino hacia su porche
-¿Estás bien?- dijo Carla al notar la cara de su hermana
-Sí, sí… es por el despertar. Me hace mal no dormir bien- mintió. Estaba así por Jazmín, o más bien por la compañía que tenía en su cabaña ¿Qué estarán haciendo ahora? Esa pregunta resonaba en su cabeza
-Lo mismo digo- aportó Carla –Che, ¿Te diste cuenta?-
-¿De qué?-
-Es…- dijo Carla haciendo gestos de tijera con las manos
-Ay, Carla, eso no me importa- dijo Flor tratando de evitar el tema
-Esa chica era su novia, claramente- Flor no supo muy bien por qué, pero estas palabras hicieron que su corazón se estrujara un poco
-¡TIJERAS!- exclamó –Perdón, perdón-
-¿Vos la conoces?- curiosa
-¿A quién?- dijo Flor nerviosa
-¿A la chica? Te saludó por tu nombre-
-¿EH? Sí, ayer me la topé en la entrada y hablamos un poco- dijo Flor abriendo la puerta de su casa
-Cuidado, ¿Eh? No vaya ser que te enamores- dijo Carla riéndose
-¿Qué dices? ¡BOLUDA!- exclamó Flor y sin querer hablar más subió a su habitación.
Ahí se dejó caer en la cama, donde los pensamientos comenzaron a fluir. Un sentimiento muy parecido a rabia ocupaba su cuerpo ¿Pero rabia por qué? Ella ni conocía a la chica, solo la había visto una vez para ponerse así. Se repitió una y otra vez que no le gustaba, que no le podía gusta una chica. Pero el hecho de que verla con novia la hacía temblar de celos no podía negarlo

Summer (Flozmín)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora