Violet

Capítulo 31 Peleas casi callejeras

Termino de atar el lazo y me miro en el espejo. Un mono de pantalón corto color verde oscuro con un montón de flores con un lazo en el escote y las converse bajas. Cojo la mochila y corriendo salgo por la puerta, ya que Nora ya está en la parada. llego a tiempo y cogemos el autobús.

–Buenos días Nora! –digo dándole en el brazo con la mano.

–Buenos dias para ti, para mi solo son días. –dice con la cara pegada al cristal.

–¿Estás bien? ¿Que pasa? –digo perdiendo la sonrisa para mirarla.

–Nada, simplemente es muy pronto y estoy cansada, ayer por la tarde J me dejó en casa y se fue, llevo bastante sin verle.

–Nora, llevas unas horas. –digo con una medio sonrisa.

–Puede ser. Le echo de menos.

–Yo también a Ethan. –contesto en bajo.

–Pero a ti ayer te dio lo tuyo y lo de tu prima, nunca mejor dicho. –dice sin darle importancia.

–Serás bestia!

Nos bajamos del autobús y subimos los pocos pasos que nos quedan hasta estar frente al instituto. Puede parecer un infierno, y depende de cuando lo mires lo es, pero sinceramente a mi me encanta, conozco a casi todo el mundo que viene aquí y son buena gente. Al menos la mayoría.

A lo lejos veo a Ethan con los cascos puestos y las manos en los bolsillos, lleva unos tejanos y una camiseta de color negro de cuello redondo. Sin esperar salgo corriendo y justo cuando estoy frente a él y me ve, sonríe intensamente y abre los brazos para que salte encima suyo, cosa que hago para llenarle el rostro de besos.

–Buenos dias terremoto. –dice cogiéndome con una mano de los dos mofletes para hacerme pucheros y plantarme un beso en los labios.

–Buenos días. –contesto con una sonrisa.

Me bajo y caminamos el uno al lado del otro hasta llegara a su taquilla. Coge algunos libros y deja otros junto a cuadernos. Llegan Alan, Kelly, Blake y Dana hasta nosotros. Nora se ha quedado en la entrada porque acababa de llegar Justin, y Rory en el médico.

–¿Como es que no está Justin contigo? –pregunta Alan.

–Porque aquí la terremoto ha salido corriendo de las ganas que tenía de verme hasta hacerme papilla con esas piernas. –dice Ethan a mi lado sonriente.

–Es mentira. –contesto yo.

–¿Exactamente que parte? –pregunta Kelly.

–La parte de que le he hecho papilla.

–Es cierto, me encantan tus piernas. –dice intentando darme un beso en el cuello, pero se lo impido.

–Tengo que irme a clase, y os recuerdo que hoy dudo que vea a nadie, las dos primeras horas están ocupadas y luego me voy a tercera a la biblioteca. –digo apartandome.

–Quedamos en las taquillas frente a la clase de biología, que siempre es Daniel el que más tarda en coger las cosas. –añade Dana

–Por mi vale. –contesto caminando hacia el aula.

–Luego te veo. –dice Ethan guiñandome un ojo.

Me doy la vuelta y comienzo a andar hasta sentarme en mi mesa.

Las primeras dos horas pasan rápidas, incluso la primera media hora en la biblioteca, pero es entonces cuando suspiro de cansancio y apoyo la frente en la mesa. Gracias a Dios en la biblioteca del instituto hay unas pequeñas aulas individuales para grupos que puedes reservar, cosa que hice yo a primera para estar tranquila. Las cuatro paredes son de cristal pero con unos estores color gris y una mesa en medio con un montón de sillas alrededor.