2 AÑOS DESPUÉS

25

Literalmente me quedé congelada en mi sitio, sentía toda la sangre estancarse en mis pies.
Por supuesto quería ser su novia, pero no sabía si era la situación correcta para llevar a cabo una relación amorosa, ya no éramos dos jovencitos.

Y después de mucho tiempo abogada en mis pensamientos, contesté:

-Estas seguro de que esto es lo que quieres?-Solté.

-No podría estar más seguro-Asentí.

-Está bien, sólo recuerda que ahora toda es distinto-

-Prometo no decepcionarte-Tomó mi mano, le sonreí.

En mi mente gritaba de emoción.
Fue un almuerzo muy agradable, quitando la presencia de ciertas personas, por supuesto.

-Mami!-Natalie corrió a abrazarme cuando llegamos, Rosa se quedó con ella mientras almorzábamos.

-Hola princesa, que tal estás cielo?-Repartí muchos besos en su mejilla.

-Rosa me ayudó a hacer un castillo de bloques-

-Si? Me lo muestras más tarde?-

-Claro!- Regresó al desastre de bloques que tenía en el piso, y pensar que yo tendré que recoger eso.

-Gracias por cuidarla Rosa- Le dije.

-No es nada, Natalie es un niña muy tranquila-Me dice sonriendo.

-Yo no diría lo mismo- Bromeé.

-Bueno, me esperan en casa- Dice despidiéndose, Matthias le pagó las horas extras.

Me senté en el sofa junto a Matthias,Natalie todavía jugaba con sus bloques.

-Natalie pronto cumplirá tres-Le digo.

-Uno de septiembre-Me confirma.

-Si-El pone su brazo alrededor de mi cintura.

-Qué planeas hacer?-Me pregunta.

-No lo sé aún-Contesto.

-Sam, tenemos una hija hermosa-Me dice.

-Es igual a ti-

-Entonces aceptas que soy hermoso?-

-Qué? Claro que no!-Empecé a reír.

-Ven acá-Me acercó a él, tanta cercanía me afectaba.
Sus labios tocaron los míos, un beso cargado de emociones, con ese beso me dijo cosas que no se podían decir con palabras.

-Qué hacen?!-Nat nos miraba impactaba.

-Cielo, los adultos hacen cosas extrañas a veces-Le conteste.

-Bueno-Dijo aún sin entender.

-Quieres algo de comer?-Dije levantándome del sillón.

-Quiero galletas-Me dijo.

-Y qué tal una manzana?-Quería que comiera menos dulces y más fruta.

-Pero no me gustan-Hizo un puchero.

-Qué tal primero las manzanas y después las galletas?-Ella asintió, si no hacíamos tratos nada funcionaba.
No me fijé en que Matthias se había ido, ahora tendría que asimilar el estar con el como pareja, no es que no quisiera, sino que me parece extraño después de separarnos.

Mi teléfono sonando me sacó de mis pensamientos, era mi tía Oliva.

-Olivia, qué tal todo por allá?-Dije.

—Todos estamos bien, sólo quería preguntarte si dispones de un momento para hablar conmigo-

-Claro, dime-

-Verás, tus padres eran dueños de una empresa, la cual a día de hoy maneja el hermano de tu padre. Y ellos siempre dijeron que esa empresa y todo lo que tenían era para ti-

-Vaya-Dije, me han dejado una herencia.

-Si, y como tú ya eres mayor de edad puedes hacerte cargo de la empresa-

-Vale, déjame asimilar esto y después te digo que haré-Le digo, no sabía que hacer en el momento.

-Adiós, cuídense mucho-

-Si, Igual-Colgué la llamada, necesito un consejo de Matthias en estos momentos.

Tomé el ascensor para bajar al piso de Matthias, y una sorpresa me encontré saliendo de su puerta.

-Celine?-

-Oh, vives aquí?-Me preguntó con burla.Detras de ella salió Matthias.

-Que está pasando?-Miré a Matthias.

-Que te lo diga él-Dijo mientras caminaba al ascensor- El siempre será mío-Me susurro antes de irse.

-Matthias...-No podía creer que otra vez algo malo pasara con nuestra relación.

-Sam, déjame explicarte-Me dijo acercándose, sin embargo retrocedí.

-Pero eras tú él que quería comenzar algo, y ahora que significa ella saliendo de tu apartamento?-Quería llorar, sin embargo no lo hice.

-Sam, tu bien sabes que yo no sería capaz de hacerte eso-

-Lo que acaba de pasar no dice lo mismo-Me giré para irme, pero su mano me detuvo.

-Sam, me vas a dejar explicarte?-Asentí, por lo menos quería saber que diablos pasaba.

-Bien. Celine vino y quería hablar conmigo, trataba de entrar a la fuerza. Como no quería lastimarla deje que pasara, y empezó a decirme cosas muy sugerentes-Asentí.

-Me dijo que me demostraría de ella es mejor que tú-No podía creer que ella dijera eso, zorra.
-Sabes que está obsesionada conmigo- Asentí de nuevo- Quieres revisar las cámaras para comprobar lo que te digo? Te juro que no pasaron cinco minutos antes de que la echara de mi departamento-

Me acerqué a él.

-No. Esta vez confiaré en tu palabra-Tome su rostro entre mis manos, y lo ví a los ojos, sabía que decía la verdad.
Lo besé, me encantaba juntar nuestros labios y olvidarnos de nuestro alrededor, sólo estar el y yo.
Sus manos fueron a mi cintura, provocándome escalofríos.Que alguien lo detenga porque yo no lo haré.

-Oigan, aquí viven niños. Hagan eso en privado-Una señora nos hizo separarnos. Dios que vergüenza.

-Claro, discúlpenos -Dijo Matthias, e inmediatamente ella se fue estallamos en risas.

-Oh hagan eso en privado, Oh que ofensa-La imitó exageradamente.

Después de eso le conté a Matthias lo que me había dicho Olivia.