Hermanastros| Zach Herron

20. Sentimientos escondidos.

Maratón

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Kendall's POV

2 semanas después...

-Kendall, esto parece una pocilga.- dice mamá entrando a mi habitación.

-¿Que dices?¡Claro que no!- me siento en la cama.- Así estamos bien, ¿no es cierto Reese?- no contesta- ¿Reese?

-Aquí estoy- la pequeña sale de unas sábanas que estaban tiradas en el suelo.

Mamá me mira y abre los ojos tanto que parece que se le van a salir- Si esto no está limpio para mañana se cancela el viaje a Nueva York.- me amenaza antes de salir.

-¡Pero mamá!- me quejo- ¡Es mi mugre!- Pero está ya no responde. Me tiro en la cama desecha y resoplo.

Shane Jones, alias mamá, me dio la noticia de que viajaríamos a Nueva York, pero iríamos en familia. Eso significa Zach, Ryan, Reese, Josh, mamá y yo. No me molesto tanto como creí que lo haría. Zach y yo ahora teníamos una buena relación y no me molestaba como otras veces. Es más, puedo decir que inclusive estuvo más distante estos últimos días.

-Supongo que tendremos que ordenar- le digo a Reese.

-¿Tenemos? La mugre es tuya, ordena tu.- Se levanta y se va dejándome con la boca abierta.

-Maldita niña...

Son las 11:38 am, a las 12:30 me iba a juntar con Chase a almorzar. Tenía tiempo suficiente para ordenar y luego arreglarme.

Junto toda la ropa desordenada en el piso y lo tiro al cesto de ropa sucia, luego extiendo las sábanas de la cama y acomodo las cosas que están sobre el escritorio. Se ve mucho mejor que antes, pero ese peculiar olor a muerto sigue sin desaparecer. Abro las ventas para que se ventile un poco la habitación.

-Perfecto- miro a mi alrededor sonriendo y sintiéndome orgullosa de mi misma. Voy hasta mi armario para descifrar que me voy a poner. ¿Un vestido? Nah. Saco una remara negra y unos jeans grises con mis zapatillas blancas. Me hago un rodete dejando expuesta mi asquerosa marca de nacimiento y abro la puerta de mi habitación encontrándome a Zach con el puño en alto.

Ahogó un grito y tocó mi pecho a causa del susto.

-Perdón...- baja su puño que hace un segundo estaba listo para golpear la puerta.

-No importa...¿Que necesitas?- digo aún asustada.

-Necesito hablar contigo. ¿Ibas a salir?- pregunta al verme vestida.

-Me iba a encontrar con Chase.- Su rostro cambia de repente -Pero si quieres le puedo decir que lo dejamos para otro día.

-No- sonríe algo forzado- Mejor olvídalo, no es tan importante después de todo.

-¿Estas seguro?

-Si, ve con Chase. No quieres hacerlo esperar...

-Okey...- lo rodeó y mientras bajo las escaleras lo miro. Tiene la cabeza gacha. Cada día se comportaba más extraño. Mientras cierro la puerta de casa recibo un mensaje de Daniel.