Capítulo 16 "Benévolo"

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Los personajes no me pertenecen. Le pertenecen al gran autor Akira Toriyama

Una amistad nace justo en el momento cuando alguien dice a otro: "¿Qué? ¿A ti también? Pensaba que solo me pasaba a mí" C.S Lewis.

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Paragus Gasu entraba a la empresa con un semblante nervioso, a paso veloz y con el celular en la mano. Estaba consciente de que había echado todo a perder. Caminó hacia la recepción y, luego, carraspeó.

—Licenciado Gasu— saludó Ranfan con su inusual amabilidad.

— ¿Bardock está en su oficina?

—Sí —Paragus suspiró—. El joven Vegeta está con él— puso los ojos en blanco ante esa revelación.

—Gracias, Ranfan.

Caminó hacia la rampa rumbo a las escaleras metálicas. Llegó al segundo piso y trotó a pasos lentos hacia el elevador. Una vez adentro, se desarregló la corbata. Respiraba agitada y rápidamente, era oficial y muy probable que lo despidieran. Las puertas del elevador se abrieron, pasó por el estrecho pasillo hasta llegar a las escaleras que conducía al lobby.

(...)

— ¿Ya está todo listo?— preguntó Bardock a su joven socio.

—Sí. Por cierto, ¿le pasó algo a Paragus?

—Después del mensaje que le mandé, no me ha respondido.

— ¡¿Qué?!

La puerta de la oficina de Bardock Son se abrió, un hombre de aspecto nervioso y temeroso se adentró al lugar. Paragus puso sus ojos sobre los dos hombres presentes.

—Bardock —saludó, mirando primero a éste y luego posando sus ojos a la persona que estaba sentada a lado suyo—. Vegeta.

— ¿Por qué tan nervioso, Gasu?— preguntó el joven Ouiji. Éste tenía el ceño más fruncido de lo normal y con su típica pose de brazos cruzados.

—Siéntate— le pidió Bardock haciendo un ademán con la mano hacia una silla. Paragus asintió y tomó asiento a lado de Vegeta—. Supongo que fuiste discreto, ¿no?

—Sobre eso... yo, les pido que me disculpen.

Eso es lo que el joven Ouiji no quería escuchar. Todo estaba echado a perder, se puso de pie rápidamente tomando a Paragus por el cuello de la camisa.

— ¡Eres un imbécil! —le gritó. Estaba eufórico.

—Tranquilízate —le pidió Bardock a la vez que estiraba el brazo y ponía una mano apaciguadora en el hombro del chico —. ¿Para qué te sirve el celular? —preguntó en tono demandante mirando, esta vez, al licenciado.

Gasu iba a responder, pero alguien llamó detrás de la puerta.

—Pasa—ordenó Bardock soltando un suspiro.

Lemlia apareció detrás de la puerta cuyo porte era tranquilo y profesional.

—Señor Son, Señor Ouiji. Los directivos ya están en la sala de juntas—anunció la mujer.

—Gracias, Lemlia. Atiéndelos y diles que no tardamos.

—Sí, señor. Con su permiso, me retiro— y, dicho eso, cerró la puerta detrás de ella.

"El amor de una amistad" +18 ~TERMINADO~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora