Capítulo 21 "Redención"

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Los personajes no me pertenecen. Le pertenecen al gran autor, Akira Toriyama.

"Hay tres cosas difíciles de hacer: Guardar un secreto, perdonar y aprovechar el tiempo" Benjamín Franklin.

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Abrió los ojos cuando escuchó la leve armonía que hizo eco dentro de la cabina. Las puertas se deslizaron y salió precipitadamente del ascensor con la certeza de encontrase con Ouiji. A pesar de tener un semblante tranquilo, la ansiedad de su cuerpo delataba su nerviosismo; trataba de relajarse y serenarse, tenía que mostrarse como la mujer fuerte e intrépida que tiempo atrás había sido. Siguió caminando por el largo pasillo hasta llegar al fondo donde subió las escaleras que conducía al lobby. Al entrar a la pequeña estancia, se percató que ignoraba en donde se localizaba la oficina de Vegeta. Las pocas veces que había visitado la empresa, solo conocía la sala de juntas, la oficina de Bardock y el lobby donde ella se encontraba. Bulma maldijo por lo bajo, sin más remedio tuvo que preguntarle a la secretaria. Lemlia la reconoció de inmediato, y con su inusual amabilidad la condujo hacía la oficina de Ouiji. Tuvieron que caminar por otro pasillo mucho más estrecho y oscurecido, que daba un aspecto tétrico y añoso; no había puertas ni ventanas, mucho menos cuartos de intendencia. Era irrebatible que Vegeta había tomado la decisión de arraigarse en una zona muy solitaria; él prefirió trabajar en aislamiento antes que usar la oficina de su padre. Ambas mujeres se detuvieron frente a una puerta grande y de color ocre con la perilla de un tono ambarino. La secretaria estaba a punto de tocar, pero Bulma la detuvo a tiempo diciéndole que ella lo haría. Lemlia se vio muy agradecida por eso, así que agradeció y caminó con pasos veloces directo a su zona de trabajo. Claramente la ojiazul especuló que nadie en esta empresa le gustaba tratar con el joven Ouiji. Sacudió la cabeza ligeramente, soltó un profundo suspiro mientras acercaba su mano a la perilla. Ya estaba ahí, así que no había marcha atrás; repitiéndose a sí misma que lo que estaba a punto de hacer era lo mejor para ella... y también para Bunny. Sacrificaría mucho, pero ganaría demasiado. Era el precio que tenía que pagar ante las estupideces que había hecho en los últimos días; de tan solo recordarlo, una enorme ola llena de vergüenza se extendía por todo su ser. Aún le dolía, su corazón seguía sin sanar la herida que Vegeta le inculcó con esas humillantes palabras de rechazo. La punzada ardía todavía, como si tuviera una daga clavada en su pecho y que en cada milisegundo se hundía más en su interior. Sabía perfectamente que tomaría mucho tiempo en que sus heridas de dolor se cicatrizaran gracias al olvido; esa era la incógnita ¿Olvidarlo sería lo mejor? Su respuesta: ¡No! No sería una buena opción a estimar, como tampoco dejar de amarlo, mucho menos odiarlo. Estaba segura que Ouiji tuvo sus motivos para tomar esa execrable decisión, muy difícil por cierto, ¿Cómo lo sabía? porque pudo ver la verdad en esos ojos negros azabaches, los cuales eran casi imposibles de leer. Lo conocía perfectamente, referente a esa personalidad y a esos sentimientos ocultos tan propios de él. Y por esos y otros motivos incalculables, se negaba a odiarlo; sin embargo, se debatía del amor que aún le tenía con tanto afán.

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Bulma salió del laboratorio dispuesta a asistir a su siguiente clase. Estaba consciente de su inmadurez; decirle a Vegeta la más grande de las blasfemias ¡Qué idiotez! En las últimas horas no había hecho otra cosa más que derrumbarse y compadecerse de ella misma. Era comprensible esa tristeza e ira interna que la embargaba más y más. El día anterior había recibido esas dolorosas declaraciones por parte de Ouiji como un bofetón, pensando con desesperación que era solo una broma de pésimo gusto, pero... no resultó ser así. Fue demasiado para ella, tanto, que echó a la mierda su orgullo para suplicarle a Vegeta que no la dejara; le reclamó, le lloró, lo golpeó ¡Se derrumbó frente a él! De solo recordar ese suceso la vergüenza y el repugno la abrumaban por completo; ella era una mujer fuerte: "La gran Bulma Brief".

"El amor de una amistad" +18 ~TERMINADO~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora