Imagina Con Jimin ~Cayendo Por Ti.~

32

Capitulo 32
Pov's Hyeon-Jeong:

Subimos al coche con rapidez, Hyeon estaba decaída y eso me dolía mucho, me dolía verla sufrir y me dolía que estuviese en ese estado.

-¿Como te encuentras?-Pregunte obviamente con delicadeza, ella solo asintio lentamente mirando por la ventana del coche mientras conducía.-¿A que hora sale el tren?

-A las 20:30, llegaremos a las 22:15 a la estación de Busán y mi abuelo estará en el hospital, he reservado en el hotel del centro para unos días mientras todo se estabiliza en casa de mi tía.-Dijo en un suave murmullo, lo tenía todo planificado.

-Seguramente no haya sido nada... Tranquila, ella estará bien.-Dije con la mirada fija en la carretera, no sabia como actuar en una situación así.-¿Has llamado a mis padres?

Ella asintió con lentitud de nuevo, era previsible que lo hubiera echo.

-Me han dicho lo típico, que espera que todo se arreglara rapido y que no perdiera los nevios pero sobretodo querian que te dijera que fueramos a visitarles, tu hermano quiere verte Jimin.-Dijo mirándome por primera a la cara, su semblante serio y responsable descansaba sobre la palma de su mano.

-Los llamaré en el viaje, ahora mismo no tengo tiempo.-Dije cortante, hacia mucho que no veia a mi hermano.

-Como quieras...-Susurro dandome a entender que la conversación había terminado.

(...)

Subimos rápidamente al tren dejando las maletas a un lado, Hyeon-Jeong y yo nos sentamos sin articular palabra alguna, ningúno queria romper el silencio.

Agarre su mano con firmeza, no pensaba dejarla sola en un momento como este:

-Tengo miedo Jimin...-Susurro apoyandose en mi hombro.

-Estoy contigo pequeña, no lo olvides.-Dije besando su cabeza con cariño.

-¿Como olvidarlo? Ahora mismo, si ella muere... Solo te tengo a ti.-Murmuro, su voz se quebro a mitad de la frase dejando que una lágrima cayera sobre mi mano.

Limpie sus lágrimas con mi pulgar y la acune en mis brazos.

El viaje paso rápidamente, pronto estábamos en la estación de trenes de Busán. Bajamos de allí caminando hacia la calle donde nos esperaba un coche que nos habian mandado, subimos en el y este nos llevo al hotel en el que nos hospedariamos durante unos tres días.

El conductor me ayudo a sacar las maletas y estas fueron llevadas por el botones a la habitación, Hyeon estaba pensando en una sola cosa y lo sabia.

-Me voy al hospital Jimin, no me esperes.-Dijo cogiendo un abrigo y caminando hacia el hospital que se encontraba a tan solo unos metros del hotel, por eso ella escogió este.

-Claro que no te voy a esperar, voy contigo.-Dije siguiendola de cerca, su rostro lleno de sorpresa se giro hacia mi.

-¿Porqué quier...?-Intento decir esta última, pero yo la interrumpi hábilmente.

-Porque no pienso dejarte sola en un momento así, señorita "Nomeesperes".-Dije burlandome de ella ligeramente para que el ambiente se destensara ligeramente.

-Esta bien, habitacion 312 segunda planta... Vamos haya.-Dijo mientras retomaba el camino.

Caminamos por las frías calles de Busán en la noche hasta llegar a la entrada del hospital, Hyeon se quedo parada frente a ella unos segundos para después seguir el camino a paso firme. Admiraba su fuerza de voluntad para entrar en el hospital de aquella manera, estaba siendo muy fuerte.

Pronto vimos al abuelo de Hyeon, quien la recibio dandola un enorme abrazo. Al separarse, ella me dedico una última mirada antes de entrar de golpe dentro de la habitación de su Tía, su abuelo me miro con tristeza mientras caminaba en ligeros circulos.

-Me alegro de verte Jimin.-Murmuro hacercandose a mi.

-Lo mismo digo...-Espete sin mirarlo a los ojos.

-Los medicos han dicho que está mejorando, han visto pocos casos similares a este y eso les preocupa en exceso. Es mi hija, no quiero perder a la única que me queda...-Dijo explicando su situación.

Asentí con la cabeza, en ese instante paso por mi mente el como sería que Hyeon y yo tuvieramos hijos... Serían como ella, testarudos.

Mis pensamientos se interrumpieron por el llanto de mi novia, que se oía tras la puerta de la habitación.

(...)

Sali de la ducha rápidamente, Hyeon-Jeong se encontraba sobre la cama del hotel con la mirada clavada en las sabanas de tela marfil, color crema.

Me senté delicadamente sobre la cama a su lado, colocando la toalla que llevaba sobre los hombros en una silla que habia a su lado, ella me dedico una mirada fugaz y volvió a mirar hacia las sabanas, toqueteando la tela pausadamente.

-¿Como te sientes?-Dije apagando las luces de la habitación dejando solo las lámparas de noche encendidas.

-Como si todo lo que he conseguido no sirviera de nada.-Dijo negando con la cabeza cabizbaja.

-¿Que? Pues claro que a servido de algo Hyeon.-Dije sentándome junto a ella.

-Pero ella no está aquí para verlo, conmigo.-Dijo girandose para mirarme a los ojos con tono acusador.

-Ella esta aquí, pronto despertará y verá todo lo que has conseguido..
Pero ella no estaba orgullosa de ti solo por eso, estaba orgullosa simplemente por el hecho de que salieras adelante sin importar todo lo que hubiera pasado antes.-Dije acariciando su mejilla mientras la arropaba como a una pequeña niña.

-¿Tu crees?-Dijo inocentemente.

-Si, lo creo y lo se.-Susurre besando su frente apagando la lámpara de noche.

-Gracias Jimin.

Fue lo único que escuche antes de quedarme profundamente dormido, el viaje habia sido agotador en tren.

-De nada Hyeon...