Nuestra historia de dos

A ver, bésense

Una agradable noche de pijamada con sus amigos, Yuu sonreía abiertamente riendo de las bromas que estos hacías y disfrutaba de la comida que en la cama reposaba; comida chatarra, cabe recalcar.

Allí, en su casa y en su amplia alcoba se encontraban Mitsuba, Shinoa, Yoichi, Kimizuki, Lacus, Rene y Mikaela; este último desde que empezó a ir a la escuela había sido su mejor amigo en toda la vida; lo quería muchísimo, más de lo que debería.

—Ahora que lo pienso —murmuró Shinoa—. Mika, tú que vienes de fuera, ¿sueles saludar de beso a Yuu? —cuestionó la pelipúrpura muy al tanto de los sentimientos que ambos albergaban el uno por el otro —. Te pregunto sobre Yuu porque es el único chico con el que eres tan cercano; si fuese una chica no tendría mucho caso preguntar.

—Aquí es inusual, por lo que no, no tiendo a saludar a Yuu-chan de esa manera — no fue muy sincero—. A mi familia sea hombre o mujer sí suelo saludarle de esa manera —espetó, aunque había dicho la verdad a medias, porque cuando niños sí solían besarse en las mejillas.

—¿Te atreverías a besar a Mika, Yuu? —interrogó picarón Lacus; expectantes todos miraron a los dos mencionados, pues realmente había sido una pregunta interesante.

—Sí, es mi mejor amigo, ni siquiera eso: es parte de mi familia —aprovechando que el rubio se encontraba justo a su lado, se inclinó y besó su mejilla.

Por un momento, Mika llegó a pensar que besaría sus labios y sus nervios fueron demasiado intensos. No obstante, que besase su mejilla tampoco fue algo que le calmase; al contrario, sus mejillas se tiñeron de rojo levemente, igual que las de Yuu. No tenía idea este último de por qué había hecho aquello. Es decir, solo había necesidad de responder la pregunta, no de comprobar los hechos a menos que le llamasen cobarde, pues en esa situación demostraría la validez de sus palabras.

El silencio lo decidió romper Kimizuki, quien también disfrutaba de molestar a Yuu así como la mayoría de sus amigos incluido el de ojos cual zafiro.

—A ver, en los labios.

El azabache se sorprendió ante lo pronunciado por el de lentes, provocando que se cayera de espaldas mientras soltaba una exclamación por el susto.

—¡K-Kimizuki! —renegó sonrojado.

—Yuu-chan es mi mejor amigo, Kimizuki; los mejores amigos no se besan de esa manera —aunque lo deseaba.

Las palabras de Kimizuki dejaron tan pensativo al rubio que ni siquiera ayudó a su mejor amigo a reincorporarse y mucho menos se dio cuenta de cuando volvió a su sitio.

Aquello que salió de los pálidos labios del mayor lograron entristecer un poco a Yuu, sin embargo lo disimuló con una sonrisa, y pasó su brazo por el cuello de Mika.

—Es cierto, somos mejores amigos, solo eso —articuló con aún aquel deje de tristeza.

Absolutamente todos pensaron en la idiotez que había cometido Mikaela. Incluso Yoichi, pues todos se daban cuenta de que aquel ojiazul moría por Yuu así como este por el rubio.

—Bueno... ¿Qué les parece si vemos una película? —Propuso Mitsuba ante la tensión que se formó entre Mikaela y Yūuchirō. Porque el primero se dio cuenta de que el tierno ojiverde había caído en desánimo. Y odiaba aquello, porque su mejor amigo siempre portaba una sonrisa sincera en su rostro.

—Me parece una excelente idea —concordó el castaño de ojitos aceituna.

—¡Vayamos a ver entonces! —musitó la más enana del grupo.

—Yuu-chan... —Llamó el rubio cuando sus amigos fueron a escoger las películas que verían aquella noche.

—¿Qué pas-...—no se dio cuenta de cuando Mika se había acercado tanto, ni de cuando había correspondido a su abrazo a medias; por ello, cuando volteó a verlo sus labios quedaron a un suspiro de tocarse. Con rapidez el de ojos jade se alejó, carraspeando ante la sorpresa —¿Qué pasa, Mika?

—Dije algo que te hirió, ¿cierto?

—¡Ah! No, nada de eso, solo...

—¿Fue por lo del beso? Te besaría si me lo pides, pero es extraño que dos mejores amigos lo hagan; ad-

—Bésame —interrumpió, cruzándose de brazos—. Si es que te atreves —sonrió de lado.

—Ah... ¿Qué?

—Te da miedo besarme, o asco. Una de dos.

—¡Yuu-chan! Esto es... Eres mi mejor am-

—Dijiste que me besarías si te lo pedía. Bésame.

Antes de que Mika volviese a renegar, Yuu volvió a tomar la palabra.

—Sé que soy un chico, no tienes que hacerlo. Solo quiero corroborar qué tanta validez tienen tus palabras y qué tan manipulable eres —con aquello último había bromeado e intentó disimular sus sentimientos, por si Mika no sentía nada por él.

—¿Estás seguro?

—Si no lo estuviese no te lo hubiera dicho. ¿Lo harás?

No respondió con palabras; se acercó a Yuu y besó sus labios.

Todos sabían que debían dejarle espacio a aquellos dos, por lo que decidieron que se tardarían y al último terminaron teniendo una maratón de películas en la sala mientras Mika y Yuu tenían una maratón de besos, preguntas y confesiones.

Sin duda, había sido la mejor pijamada de sus vidas.

Ya casi subo el especial de 100 one-shots ;u;

Weno, espero les haya gustado este, nos leemos después ^^