Taehyung fue obligado a permanecer en la cocina cuando el mayor le regañó por rehusarse a aprender algo que no sólo le ayudaría a sobrevivir toda su vida, sino que parecía un estúpido excusándose con ser un hombre.
—¿Obligas a tu madre a cocinar para ti todos los días?— Yoongi soltó, algo curioso conforme le daba forma a la masa de arroz, sin darse cuenta de como el menor se encogía de hombros.—, ¡Cierto! ¿Dónde están tus padres?— Taehyung bajó la mirada, subiendo las piernas a la silla, se rascó la muñeca derecha.
—Mi padre está trabajando, y mi madre fue a ver a mis abuelos a la capital, están con unos tíos.— Asintió un par de veces. Los chicos estaban en el cuarto de Taehyung mirando alguna serie en la laptop del moreno porque no tenía televisión en la sala.
—¿Volverá pronto?— Un pequeño sonrojo apareció en sus mejillas, agradeciendo estar de espaldas al otro.—... Me gustaría conocerla.— El menor casi se ahoga con su saliva al oír eso. Sus ojos se llenaron de lágrimas; estaba muy sensible desde el día anterior.
—No— Soltó con fuerza, su voz agravándose. El mayor se desconcertó un momento.—, no te gustaría, a mí tampoco.— Yoongi le miró por encima del hombro; Taehyubg aún se rascaba la muñeca.
—Entonces no— Carraspeó, tratando de calmar al menor con un tono suave.—, ¿Quieres que ponga un poco de mermelada de fresa dentro de tu pastelito?— El sonido de la piel siendo dañada comenzaba a molestar sus sentidos, era horrible, incómodo. El otro siquiera le escuchó.—, ¿Taehyung?— Bajó la velocidad, sus ojos de cachorro mirando a Yoongi desde abajo.
—¿Qué pasa, papi?— Algo en el estómago de Yoongi se revolvió hasta casi inducirle al vómito.
—Mermelada de fresa, ¿Quieres que rellene tu pastelito con mermelada de fresa?— La mirada del alto se iluminó de a poco, antes de caer de nuevo al semblante incómodo.
—No tengo.— Yoongi rió un poco, mirando de nuevo la masa de arroz, leche y trigo, luego el azúcar, platano, miel y aceite de oliva.
—Toma el dinero de mi mochila, dile a Soo que vaya contigo... Hay una tienda cerca, ¿Verdad?— Taehyung se cohibió en su lugar, antes de suspirar para ponerse de pie. Le miró salir arrastrando los pies, con una mueca desganada.
Pasaron unos cuantos minutos, los escuchó salir con unas risitas por lo bajo.
—Tae cree que eres genial— SeokJin manoseó uno de los panecitos, haciendo molestar al pálido; aún no entendía por qué al fantasma le gustaba aparecer de esa manera.—, ¿Te gusta?— Yoongi ignoró la pregunta del alto, concentrándose en seguir con su labor, mientras escuchaba a los otros dos menores salir por la habitación para sentarse en la sala a hablar con NamJoon.—... ¿Hace cuánto? ¿No has pensado en decirle?
—No me gustan los chicos, Taehyung no es mi tipo.— Sacudió sus manos; iba a preparar el relleno de los pastelitos.
—Yoongi, no trato de ofenderte, pero a kilómetros se nota que no bateas al sitio correcto, ¡No lo digo por tu cara! Lo digo por tu forma de pensar; alguien tan liberal y considerado necesita libertad.— Esparció con molesta la azúcar en el plato ondo mientras rodaba los ojos.

ESTÁS LEYENDO
daddy issues ✾ taegi/yoontae
Random『 Me encanta que tengas traumas paternales, y yo también los tengo.』 Yoongi tiene ese quién sabe qué, Taehyung lo nota, y sobre todo lo siente, porque con Yoongi puede refugiarse de una manera en la que nunca pudo hacerlo en casa. Y Taehyung es todo...