daddy issues ✾ taegi/yoontae

33.1

Taehyung logró sonrojarse cuando el celular de Sooling terminó en sus manos; la historia incluso tenía sus nombres, y al tercer día de conocerse luego de chocar en el pasillo, Taehyung bebía un afrodisíaco. Unas pequeñas lágrimas de culpa se instalaron en sus ojos de sólo pensar que Yoongi hubiera llegado a leer eso.

—Papi, ¿Tú sabías lo que Soo hacía?— El nombrado dejó de presionar la almohada sobre el rostro del menor, con una mueca de horror. Jeongguk (quien le ayudaba dosteniendo al robusto muchacho por detrás) también detuvo su trabajo con intriga.

—¿Qué es eso?— Hoseok dejó de hacer la videollamada con su novio en la esquina del dormitorio para acercarse el dueño de la casa; cuando leyó la parte en la que estaba, él también se puso rojo hasta las orejas.—, Nammie nunca ha intentado esto... ¿Ustedes...?— Hoseok señaló al pastelito de chocolate, luego al pequeño agresivo sobre Soo. Yoongi le arrojó la almohada golpeando por acciente a Taehyung. Hizo una mueca y sonido adorable por ello.

—¡Degenerado!— Hoseok se cubrió el rostro, haciéndose bolita en la cama. Jeongguk se cubrió los oídos lo más rápido que pudo, liberando al chico robusto que a su vez fue a quitarles el móvil.

—Van a ver que cuando sea famoso van a arrepentirse de no hacer el ship real antes.— Sollozó, ya tenía varías ideas para comenzar el manhwa, sólo necesitaba inspiración.

—Me parece raro que no estén saliendo— Jeongguk se colgó sobre el brazo de Yoongi, pegando su mejilla contra la del mayor, que sólo le ignoró tras suspirar; su relación con Taehyung iba a irse a la mierda si les seguían presionando para algo que no quería.—, si TaeTae y usted no salen, ¿Puedo ser su bebé yo también?

Taehyung le arrancó la cabeza a uno de los caballos morados por accidente cuando le escuchó decir eso.

—Ya eres el bebé del grupo— Accidentalmente, también le arrancó la cabeza al caballo restante.—, deja que TaeTae sea mi único bebé, tú eres de todos.— Una sonrisa brillante salió de sus labios cuando el mayor murmuró eso. Se acomodó para que Hoseok le abrazara, y ambos continuaron la videollamada con el chico que el moreno presentó a todos como Kim NamJoon. Taehyung no tardó en llamarlo primo por tener su apellido.

—¡Está decidido!— Gritó Hoseok tras colgar sin avisarle a su novio.—, ¡Me mudaré a su escuela!

—¡Maldita sea...!— Gruñó SooLing, frustrado por tener que separar tan rápido a su nueva pareja en el libro. Cuando se percató de lo que dijo, Hoseok estaba cabizabajo con los ánimos por el suelo.—, me refiero a, ¿Cómo harás para ver a tu novio?— Otra sonrisa apareció en su rostro.

—Casi nunca lo miro, soy de GwangJu-do— Yoongi y Taehyung entrecerraron los ojos.—, él es de otra ciudad, así que nos daremos las mismas escapadas.

—¿De qué región eres?— Hoseok pasó saliva.

—¿No podemos finjir que todo Corea es el mercado hwagae?— Taehyung relajó su expresión, él sólo estaba bromeando.

—Todo Corea mira el mismo cielo.— Sonrió, Jeongguk recordaba haber escuchado eso en algún lado. También, por algún motivo, notó que Taehyung y Yoongi no habían tenido ningún contacto, y eso podría afectar los planes que había hecho para hacerles ver que todo el semestre (o lo que pasaron juntos de él) en el que se dieron ese trato, era porque tenían sentimientos más allá de los fraternales.

—Soy gay.— Mintió, gritándolo para llamar la atención de todos; esperaba que Yoongi o Taehyung se declararan de su bando, pero lo único que pasó fue ver como SooLing se desmayaba. Yoongi le tomó del hombro.

—Te apoyaremos en todo lo que necesites; si quieres que te lleve a buscar chicos, estoy dispuesto a acompañarte a los sitios gays a los que vayas para que nada te suceda.— Los otros mayores asintieron detrás suyo. Comenzaba a sentirse nervioso.

—Si tienes dudas sobre el sexo, puedo enseñarte lo que necesites, tanto de pasivo como de activo como de versátil. — Señaló Hoseok, buscando algo en su teléfono con expresión seria.

—Yo siempre tendré mis puertas abiertas, si alguien te hace sufrir, lloraré contigo.— Taehyung acarició su hombro. Jeongguk le vio con ojos entrecerrados, pues estaba seguro de que lo que quería era tener la mano de Yoongi entre las suyas. Una sonrisa inocente que escondía secretos perversos apareció en su rostro.

Sooling se enderezó en el suelo tras procesar la información dicha por el menor; no lo llegó a creer de él.

—Y me gusta mucho... Yoongi hyeong.

Soo volvió a desmayarse.