La casa del árbol

17

Cuando empezaron a llegar, la gente se amontonaba y hacía mucho quilombo, Austin nos protegía de los empujones, vi a los chicos y cada uno tenía una chica abrazándolos, miré a Ludmila que miraba con cara de orto a Gabriel.

-Vámonos-dije y Austin asintió, fuimos a su auto, manejó una cuadra para alejarse de toda la gente.

-¿Por qué no me dijiste que estaba acá?-le preguntó a Austin, no entendía de lo que estaba hablando.

-No me preguntaste-dijo viendo su celular, apareció una llamada de Adam en la pantalla, respondió-¿Si?... si... Ludmila la vio... a una cuadra...Okey.

Después de unos minutos a cada lado aparecieron dos motos la de Gabriel y la de Adam, solo que Adam estaba acompañado por una chica, se me revolvió la panza.

-Ludmila baja-dijo Austin, ellos se quedaron mirando un rato y Ludmila bajó molesta, Austin baja la ventanilla.

-Creo que Gabriel va tener una noche difícil, llévala a casa y quédate afuera cuidando, la vieron muchos-le ordenó Adam, Gabriel se fue con Ludmila.

-No necesito una niñera-dije pasándome al asiento de al frente, me miró y después a Austin.

-Te quedas en la puerta-volvió a decirle.

-¿Y por qué no la cuidas tu?-dice Austin burlón-hola Ash-saluda a la chica, que era la que estaba con Adam en la fiesta.

-Esta noche me cuida a mi, Austin-dice la chica riendo, rodé los ojos y me vio-¿Tienes algún problema conmigo?

-Todos sabemos que no te va a cuidar-dije sonriendo.

-La llevo a casa-dice Austin cortando la tensión, subió la ventanilla y empezó a manejar-ponte el cinturón.

-No hace falta que te quedes afuera vigilándome-dije poniéndome el cinturón.

-Mira, Adam tiene razón, te vieron los de acá y van a intentar averiguar quién eres.

-No entiendo.

-Que si a partir de hoy te sientes muy observada o que alguien te persigue no dudes en mandarle un mensaje a alguno de los tres, por las dudas-dice intentando no asustarme.

-No creo que sea buena idea que estes en el auto toda una noche-dije viendo las cuadras que conocía, estábamos cerca de casa-puedes entrar...

-No puedo entrar a tu casa-dice desorientado.

-Duermes en el sillón, Gabriel no te va a matar-dije rodando los ojos.

-No puedes invitar a cualquiera a tu cuarto-dijo mirándome y volvió la vista a la calle-ademas... no creo que le guste a Gabriel ni a Adam.

-Que la chupe Adam-me miró sorprendido-Perdón-me disculpé.

Estuvimos hablando, cosa que se me hacía muy raro, nunca lo escuché por mucho tiempo, su voz era rasposa, termino entrando a mi cuarto, le acomodé el sillón y hablamos de cualquier cosa.

-¿Cómo conociste ese lugar?-pregunté bostezando.

-Tengo un conocido que es de ahí.

-¿Adam?

-No-se rió-yo lleve a Adam ahí, creo.

-¿Cómo que crees?

-Él era nuevo en eso y nos conocimos ahí, solo que él pasó por accidente y se quedó mirando, después nos dimos cuenta que íbamos al mismo colegio y nos hicimos amigos-él estaba jugando con su pulsera.

-¿Como hacen para ganar Plata ahí?

-¿Quieres empezar a estar en la carreras?-se ríe y yo también-las apuestas y los trabajos.

-¿Que clase de trabajos?-intenté sacar información.

-Trabajamos para un grupo de personas que nos pagan si ganamos-pensé en ese mismo instante que mi primo estaba metido en una mafia-son buenas personas-me quiere calmar.

-¿Y si son buenas personas por qué me tienes que cuidar?-dije sentándome.

-Porque hay gente mala que quiere hacer caer a la gente buena-se volteó tapándose con la frazada-me gusto como le respondiste a Ash, es una loca que piensa en Adam 24/7.

-Y Adam un idiota que la ilusiona.

-Adam le dejó las cosas en claro, que la chica no lo quiera entender es otra cosa, Adam no está para esas cosas.

-¿Para qué cosas?

-Para estar en una relación, aunque me gustaría verlo en pareja, pero bueno, nunca se da tiempo para él siempre está trabajando.

-¿Desde cuando trabaja?-él me miró.

-Deberías dormir-sabia que no me quería decir, sé que tenía algo que ver con su padre o su madre ausente-¿Por qué tanto interés en él?

-No sé en lo que está metido, pero mi primo lo sigue y está poniendo en juego su relación...

-Gabriel puede decidir por si solo y Ludmila lo conoció así, Gabriel cambio muchísimo también, él era el más arrogante y peleador, Ludmila lo calmó pero no puede obligar a dejar algunas cosas.

-¿También ayudas a Adam?

-Para eso estamos los amigos, para ayudarnos.

-¿Que pasó con Zack?-pregunté y se sentó-Ludmila me dijo que antes eran amigos de él.

-Su familia adoptiva no quiere que estemos con él o lo llevan al otro lado del mundo-dijo y se paró, buscó su campera.

-¿A donde vas?-me paré.

-Estoy empezando a creer que no solo me invitaste a dormir si no a cuestionarme-me puse en frente de él.

-No hago más preguntas, en serio-dije parándolo-me voy a callar-escuchamos unos pasos cerca de mi cuarto-metete al armario-dije, lo hizo y yo me puse el celu en la oreja.

-¿Que haces despierta a esta hora?-preguntó mi papá abriendo la puerta y miró la cama.

-Estaba hablando con una amiga.

-¿Tu amiga no se iba a quedar a dormir?

-Si, pero se fue con Gabriel...

-Descansa que mañana tenes colegio-dijo y se fue.

-Pa, mañana un chico va a llevarme al cole-dije y mi papá volteó.

-¿Él que vino a ver una peli?-hizo comillas con los dedos.

-No papá-dije algo avergonzada-y solo vimos películas, viene un amigo de Gabriel.

-Esta bien, mañana no trabajo así que intenta levantarte temprano sola-dijo y asentí, cerro la puerta, escuché como abrió la puerta de su cuarto y cuando la cerró fui al armario.

-¿Sabes que nadie se creyó eso de que vino a ver una peli?-dijo riendo.

-Cierra la boca.

-Deberías cerrarla vos-dice saliendo del armario y acostándose en el sillón.

Me acosté en mi cama y me quedé mirando su espalda, apagué la lámpara y me dormí.