Estaba en el colegio y Gabriel ni sus dos amigos aparecieron, Ludmila andaba con sus amigas, mientras que yo andaba con Peter y Zack, estábamos en el comedor y Peter se fue a pedir otra cosa para comer.
-Hay algo más que amistad entre ustedes dos-dice Zack viendo a Peter y después a mí-se nota desde la china.
-¿De que hablas? Solo somos amigos-me reí.
-Y yo nací ayer-se ríe-están muy pegados últimamente-sonríe mordiéndose el labio, miré para otro lado sonriendo y no entendía porqué-¿Te gusta?
-Cállate.
-Ya no hay más polenta-dice Peter sentándose a mi lado, me sonrió y me guiñó un ojo, se puso a comer las papas que se compró.
Miré a Zack y alzó las dos cejas sonriente, rodé los ojos, Zack se daba cuenta de muchas cosas.
-¿Sabes donde están los chicos?-preguntó Zack, me estaba mirando, no entendía.
-¿Que chicos?
-Adam, Austin y Gabriel.
-Ni idea, Adam no viene desde la semana pasada y los chicos no me dicen nada.
-Estarán metiéndose en problemas-agarra su celular y frunció el ceño.
Toda la semana Adam y Zack no estuvieron en el cole, pregunté a Gabriel sobre Adam y no me decía nada, le mandaba mensajes a Zack y no me contestaba, pero si iba a las clases de Ballet y me esquivaba las preguntas de porque no fue al cole. Por un lado con Peter cada vez que íbamos a la biblioteca, yo buscaba libros mientras él escuchaba música y de vez en cuando nos besábamos a escondidas entre los estantes, era divertido y cursi al mismo tiempo.
Fui al lugar donde trabajaba Adam, ya que no fue a trabajar en mi casa, el chico de la caja me sonrió al verme y fui directo a él sonriendo.
-¿Adam sigue trabajando abajo?-pregunté lo más inocente.
-Adam está en el hospital-dijo inspeccionándome-¿No lo sabias?-negué.
-¿En donde? ¿Por qué?
-Esta información no te la debería dar pero esta en el Hospital Rivadavia, está ahí desde el domingo, no entendí bien porque pero mi padre me dijo que fue de Urgencia.
Salí del local y busqué el hospital en Google maps, necesitaba saber si estaba mejor, estaba preocupada por él como si fuera mi hermana de quien se tratara, por suerte tenía la tarjeta para los transportes y me fui en colectivo, me dejó al frente del Hospital, me comí una hora de viaje. Al entrar en el Hospital fui directo a la sala de recepción, fui hacia la mujer que estaba sentada atrás del mostrador.
-¿En que puedo ayudarla?-preguntó toda simpática.
-¿Hay un tal Adam?
-Debe darme el nombre y apellido del paciente señorita, hay un montón de personas llamadas Adam.
-Tiene los ojos verdes, pelo negro-nunca me dijeron el apellido de Adam y lo único que podía hacer era describirlo.
-Lo siento, no veo a los pacientes, solo tengo los nombre...
Miré a lo lejos a Zack y sabía que él venía a ver a Adam, que ya no se junten no quiere decir que él no se preocupe por su amigo, fui hasta Zack y se sorprendió al verme ahí.
-¿Que haces acá?-preguntó.
-Quiero ver a Adam-dije cruzándome de brazos.
-No te preocupes ya está bien, mañana le dan de alta, ve a casa.
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La casa del árbol
Teen FictionVi dos pasajes y pensé que mi papá se iba de viaje con su esposa, nunca pensé que era un cambio tan enorme. ¿Será para mejor? ¿Los cambios son buenos? ¿Los secretos son buenos? ¿Las mentiras son buenas?