012

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013.

Demonios.

«Estoy aquí para protegerte,
no para hacerte daño».

Recuerdo habértelo dicho,
recuerdo haberte besado.

Recuerdo haber sentido
suavemente tus labios sobre los míos.
Recuerdo que siempre recordaré.

Recuerdo haberlos saboreado con paciencia,
y robarme cada suspiro dócil que se te escapaba.

Recuerdo haber sentido tu calor, tu dolor, tu sabor...

Recuerdo tu compañía,
tus brazos,
tu mies.

Y también me recuerdo a mí;
Que como sabueso te olía,
recorría cada rincón de tu piel,
desde el más visible,
hasta el que nadie ve.

Recuerdo haber besado tus sombras,
recuerdo haberme refugiado en tu pecho
y en pleno paraíso
haberles hecho el amor a tus demonios
más siniestros.

Recuerdo haber jugado el escondite contigo;
justo ahora, en este escaparate polvoriento,
lleno de cucarachas y polvo,
recuerdo haberme perdido cuando te encontré.

Roma. © II EN FÍSICO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora