Kirishima despertó una noche por un pequeño ruido.
Una explosión.
Sus ojos se abrieron con lentitud y la oscura noche junto al brillo de la Luna lo acogieron con calidez, parpadeó con confusión por haberse tenido que despertar del mundo de sus sueños, también notando que su balcón no estaba del todo cerrado, pero todo quedó aclarado cuando otra explosión más fuerte que la anterior se escuchó.
Y la única cosa que se le pasó por la cabeza fue una persona.
Bakugou.
Sus cobijas quedaron regadas en el suelo y sus pies descalzos recorrieron su habitación hasta llegar a su puerta y salir con rapidez, todo para encontrarse ahora en la entrada de la habitación hermana de la suya.
Tocó con delicadeza y preguntó. —¿Bakugou...? ¿Estás bien?
Solo hubo silencio.
Tocó otra vez.
—Bakugou... —Volvió a llamar insistente, pero esta vez a su llamado se escucharon pisadas dentro del cuarto, para que luego de unos incómodos segundos el rubio le abriera la puerta.
Y Kirishima se asustó
Vio a la persona que más quería con lágrimas secas en las mejillas, bolsas negras bajo sus ojos producto de noches en vela, mirada perdida y su ceño naturalmente fruncido ahora neutro, aquellos ojos orgullosos heridos...
Le dolió.
—B–Bakugou...
—Qué quieres ahora Kirishima.
Su voz también...
No pudo aguantar mucho, se adentró en la habitación como si fuera propia y de un salto sus brazos rodearon el cuello de su amigo, quien solo pudo crisparse ante el tacto tan suave.
— ¿¡Qué...!?
—No necesitas hacerte el fuerte conmigo. Y lo sabes bien Bakugou.
Sus uñas se clavaron en la espalda.
Y ligeras gotas mojaron sus hombros.
—Maldición... Eijirou...
Esa noche Kirishima se enteró de los miedos de Bakugou.
Esa noche Bakugou se abrió completamente hacia Kirishima.
Esa noche entre palabras de aliento y besos dulces se asfixiaron, disfrutando de la cercanía, queriéndose, amándose, viviendo de la tranquilidad que podían sentir cuando se juntaban en una simple cama solitaria.
Porque a Kirishima no le importaba despertar de madrugada y consolar todas las noches a aquel orgulloso chico.
Porque a Kirishima no le importaba ser un pañuelo de lágrimas.
Porque a Kirishima le gustaba Bakugou.
Y porque a Bakugou... le gustaba también.
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Hecho de Explosiones de Roca
Random━¿No hacemos un buen equipo? ━¿Esas son las frases que dices para sentirte mejor cada noche? ━Son los pensamientos que tú tienes en cada momento. ━...Idiota. ►BNHAtober pareja: kiribaku. género: fluff, lime, comedia recopilación de drabbles.