Los rayos del sol comienzan a entrar en el cuarto, justamente llega un poco de luz a mis ojos y hace que poco a poco me vaya despertando, siento que esta vez si me jodieron, creo que hasta para caminar me va a doler todo, pero es que Sebastián no tuvo nada de compasión recuperó todo lo que no hacemos a diario, me dejó valiendo nada, siento uno de sus brazos en mi cintura me está sujetando fuerte, y con eso mi vejiga pide a gritos un poco de liberación.
Comienzo a quitar la mano de mi bello durmiente ya que lo veo bien dormido, me da algo de pena despertarlo, cuando he quitado su mano al fin comienzo a salir lentamente de la cama, esto si es complicado siento que en cualquier momento se va a despertar así que me apresuro de para ir al baño, hago mis necesidades y decidí por darme un ducha corta ya que si Sebastián se despierta y entra a darse un baño conmigo no salimos de aquí nunca. Salgo caminando de puntillas para buscar algo que ponerme, también preparar el desayuno a tiempo, ayer no hablamos de la hora en la cual nos íbamos a ir, pero prefiero prevenir y alistarme rápido ya que no creo que se quiera ir tarde, aunque yo no me quiero ir de aquí.
Me ducho rápido y me pongo un vestido de flores que encontré, salgo del baño y Sebas sigue durmiendo como un bebé, bajo a la cocina, creo que puedo hacer unos hotcakes, comienzo a sacar todo para prepararlo, la casa esta muy silenciosa asi que mejor pongo algo de música a bajo volumen por aquello, subo las gradas para agarrar mi celular abro la puerta muy lentamente y mi esposo duerme como un oso, esta boca abajo y la sábana le tapa sus hermosos glúteos bien trabajados, es una maravilla, esta demasiado bueno y gracias a Dios es todo mio, veo mi celular en una de las mesitas lo agarro y me encamino de nuevo para la cocina, al llegar busco en la lista de canciones y opto por mi cantante favorito Ed Sheeran y pongo Thinking Out Loud amo todas las canciones de él, comienzo a mover mis caderas de manera lenta en lo que revuelvo los ingredientes pongo el tazón en la mesa para buscar algo para hacer los hotcakes, me encuentro una sartén, lo pongo en la cocina y la enciendo para que comience a calentar, busco una cucharon hondo para hacerlas todas de la misma medida, agrego mezcla en la sartén y me quedo ahí pensando en lo maravillosa que es mi vida.
- Pero que huele tan delicioso - al fin a despertado el oso, volteo mi cabeza y lo veo que viene caminando en mi dirección - Aparte de ser buena fotógrafa eres buena cocinera, cuantos mas talentos tiene mi esposa - sonrió al sentir sus manos en mi cintura, le doy vuelta al hotcakes y veo que en verdad me están quedando bien pero siento un escalofrió en mi cuerpo cuando mi adorado tormento sopla en mi cuello.
- Cariño no hagas eso que no vez que me puedo quemar por estarme distrayendo - lo siento reír en mi cuello, será desgraciado, comienza a mecer sus caderas a los lados y aprieta las mías para que yo las mueva a su ritmo las canciones de Ed Sheeran siguen sonando.
- Yo no tengo la culpa de que tu cuerpo reaccione a mí - será arrogante, le pego en la mano y suelta una carcajada que de paso me hace sonreír.
- Eres un creído por Dios - seguimos moviendo las caderas al compas de la música.
-Tienes que aceptarlo cariño aun así de creído me amas - en eso tiene toda la boca llena de razón, él se convirtió en el motivo por el cual me despierto todos los dias, es mi razón de ser, en otras palabras Sebastian es mi todo - ¿Cuánto falta para desayunar? Necesito ir a la empresa a ver como van las cosas - y volveremos a la rutina solo que esta vez me siento mas tranquila, sirvo el ultimo hotcakes y agarro mi celular para apagar la música, llego a la mesa y cuando me dispongo a sentarme Sebas tira de mi haciendo que caiga en sus piernas.
- Estas loco casi me matas - sonríe y me hace un puchero que logra que se me pase un poco el enojo .
-No seas gruñona nada te paso aparte hoy desayunaremos así juntos - yo diría pegados mas bien pero me reservo el comentario y me acomodo en sus piernas.
- ¿A que hora quieres que nos vayamos? - porque todo lo bueno tiene que llegar a su fin tan rápido, porque no se detiene el tiempo o pasa lentamente, comienzo a partir pedazos para comer mientras pienso en que no me quiero ir.
- Bueno aún es temprano, que te parece si nos vamos tipo 8 am - agarro su mano para mirar la hora en su reloj, son las 7:45 am falta demasiado poco, apenas 15 minutos y diré adiós a esta casa hermosa.
- Pero falta poco, no hemos terminado de desayunar y me falta arreglar la cocina -agarro el jarabe para embarrar.
- No hace falta que hagas eso ya mande un mensaje diciendo que comprare la casa, asi que mandaran a una persona para que se haga cargo de la limpieza de la casa, puedes estar tranquila - tengo que admitir que me alegra saber que esta casa será de nosotros tal vez en algunos años nos podamos venir a vivir aquí los dos, lo que no me parece es que alguien tenga que venir a limpiar lo que yo ensucio.
- Gracias por comprar la casa -me doy vuelta y beso sus labios rápidamente - Y con respecto a lo de la limpieza me parece bien pero sabes que no me gusta que limpien lo que yo ensucio, nunca me ha gustado eso si yo desordeno a mí me toca ordenar - resopla y me da un corto beso en el hombro.
- Lo sé pero necesitamos llegar rápido a la ciudad me urgue - ahora la que resopla soy yo, la verdad quería hacer más tiempo para poder disfrutar de la casa pero ya veo que eso no se va a poder.
- Solo por esta vez que te quede claro no me gusta que arreglen mis desordenes me hacen sentir que no puedo hacer las cosas por mi cuenta - terminamos de comer y juntos recogemos la mesa y las ponemos en el fregadero, salimos de la cocina con rumbo al cuarto a recoger las cosas para irnos, al llegar las dos maletas están en la cama esperando por nosotros, eso hace que me ponga un poco triste.
- Bueno cariño esta todo listo vamos - agarro mi bolso y pongo el celular adentro para que no se me olvide, salimos del cuarto mientras bajamos las escaleras veo todo con detalle para no olvidar nada.
- Te prometo que volveremos pronto - Sebastian notó que me da un poco de tristeza irme de acá pero es que el venir nos ayudó un montón, no solo para que estuviéramos juntos si no también mucho en el carácter de Sebas, seguimos caminando y cuando llegamos a la puerta me giro para ver todo, como quisiera vivir aquí - Cariño vamos se nos hace tarde - respiro profundo y me doy vuelta para salir de aquí si no me voy a poner a llorar como una niña pequeña, Sebas cierra la puerta de la casa y le pone seguro a la puerta mientras subo al auto, miro la hermosa vista que tengo, el maravilloso mar me muestra una vez mas lo increíble que es y la paz que trasmite con solo verlo, Sebas abre la puerta del conductor se monta y arranca el carro.
- Bueno estas lista para volver - la verdad es que no, pero lo miro con una sonrisa dándole a entender que sí, el coche comienza a andar y me despido del maravilloso día que pasé en esa casa, ahora nos espera la ciudad y espero que algo mejor que lo que vivimos antes de este paraíso.
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Descubriendo el engaño 1° Terminado
RomantizmAriadna es una mujer completamente feliz tiene el trabajo que tanto quiere y al esposo que toda mujer desea, Sebastián es su mayor logro, su matrimonio es perfecto, toda va bien hasta que se da cuenta que tiene un pasado es doloroso y que todavía lo...